|| DIECIOCHO ||

ASHTON🍂

Luego de ese pequeño accidente, trataba de aguantar la risa, ella siempre parecía tan torpe. Mientras caminaba al salón donde los chicos me esperaban, vi pasar a alguien por mi costado, pero me llamo la atención que llevara un tatuaje detrás de la oreja, y fue ahí donde recordé que él era el chico que salió con la chica que me beso aquella noche, pero que hasta ahora no le he preguntado su nombre.

Quise detenerme, pero ya estaba en muchos problemas por llegar tarde al ensayo de hoy. Poco a poco voy atando cabos, pero cuando toco la puerta donde se encontraban todos, veo que todos están molestos.

—Se… se me hizo tarde —dije mientras dejaba a un lado mi guitarra.

—Y hueles a alcohol —dijo Nath.

—Debes ser más responsable, nosotros también tenemos cosas que hacer —dice Joe.

—Está bien, no volverá a pasar. —dije apenado.

—Bien, entonces comencemos con el ensayo —dice Henry.

Empezamos a tocar canciones que Henry había compuesto hace un tiempo, no hable en todo el ensayo porque tampoco tenía una canción lista para la banda, faltaba casi mes y medio para nuestra presentación.

No dejaba de ver la camiseta que tenía puesta de esta chica, tenía una sonrisa muy contagiosa, me sentía patético por un simple gesto, pero en el fondo sentía una esperanza o un tipo de salvación, o tal vez esos tipos de placeres de la vida que no se encuentran así nomás.

Luego del ensayo tenía que ir donde Madison, hoy tenía que hacer algunas fotos y fui para allá.

Llegue y toque la puerta, ella estaba arreglando la iluminación muy concentrada.

—Llegaste a tiempo hoy —dice ella mientras prepara su cámara.

Pase de largo y deje mis cosas a un lado, quería comenzar lo más rápido para terminar e irme de aquí.

—¿Hoy no son buenos días? —pregunto Madison mientras comenzaba a tomar fotos.

—No es eso, solo estoy cansado.

—Puede que te veas cansado, pero yo te veo algo diferente.

Diferente, siempre he querido ser diferente, pensé.

—Yo me siento igual que siempre.

Al pasar las horas termino la sesión y me anime a ver las fotos en su laptop.

—Las fotos se ven increíble, sigue así. —dijo Madison.

Solo sonreí por lo que dijo y fui por mis cosas para para poder irme hasta que ella me dice una última cosa.

—Esa camiseta me es familiar… —dice con duda.

Pensé que podría ser coincidencia, pero lo quise olvidar.

—No creo —dije y salí del salón.

Mientras caminaba por los pasillos de la universidad veía mi móvil, tenía en mente en llamar a mi padre, tenía la necesidad de hablar con él, pero me arrepentí y lo dejé.

Veo la hora en mi reloj, son casi las 5 de la tarde. Decidí que hoy iría a un bar, pero en el fondo sentía algo muy raro. Escuché el timbre de cambio de hora, mientras trataba de pasar por mucha gente antes de salir de la universidad sentí que alguien me tomaba del brazo.

Me giré y la vi a ella, aferrada a mi brazo, ella simplemente me miro y trate de no soltarla. Todo fue muy rápido que caminamos hasta salir de la universidad, ninguno de los dos dijo nada hasta que pude notar lo sonrojada que estaba.

La situación era extraña, porque de la nada esta chica me estaba tomando del brazo y porque no me aparté. No sé cuánto caminamos hasta que ella hablo y se soltó de mí.

—Perdóname —dijo mientras se tapaba el rostro y su voz se hacía un hilo.

 Me quede en blanco cuando estaba en frente mío, podía ver la pintura aun en sus uñas, sus muñecas con pulseras de hilo y una extraña cicatriz en la mano izquierda. Porque mi cabeza quería grabarse esas pequeñas cosas en mí.

—¿Por qué? —definitivamente era un idiota al preguntar esto.

—Por esto.

Dijo ella sin más.

Y esto podría ser el comienzo de algo nuevo, pero esto ya había comenzado con aquel beso, con aquella mirada, con aquella primavera.