capitulo 3

-Y ¿Qué sentiste?...

Le había contado todo a Kimi cuando paso a buscarme para tomar el metro juntas, Eran las 6:30 de la mañana. Habíamos dejado pasar tres metros debido a lo lleno que llegaba a la estación.

Quise irme a pie pero la muy floja pues...

-Su bien trabajado pecho, Su calor, Su olor.... Ay, huele tan rico-mordí mis labios de solo recordarlo.

Hoy tenía una braga falda del mismo modelo que nuestra falda normal. Lunes, martes, jueves y viernes se usa falda y camisa blanca formal con corbata y los miércoles braga completa roja. No pregunten porque... se supone que era para ver unas clases pero estoy en la sección en la que todos los profesores faltan cada semana.

Bueno, algunos...

-Ay, ¿Por qué no me pasa eso a mí? Ayer me confundí adrede un par de veces para que Jimin me corrigiera, Admito que me erizo la piel. Y ya sabes lo que dicen, "La piel es de quien la eriza"-Sonrió victoriosa y yo solo reí.

Luego de lo sucedido con jungkook hicimos el examen de matemáticas y nos llevaron a comedor para luego retirarnos. No fue nada interesante. Pero le hice una promesa a jungkook.

Que pasaría el examen, y si lo hacía... me daría una sorpresa.

Mm, Yo quiero algo en específico.

Creo que salí bien en ese examen. Creo...

-¿Iremos al centro comercial?-Me Pregunto en voz alta ya que el metro se acercaba, las personas se empezaron a reunir detrás de nosotras ya que estábamos justo donde se abrirían una de las puertas.

-Logre sacarle dinero a mi mamá de la cartera, pero no sé cuánto agarre...

Eso era costumbre. No mentira, casi nunca lo hago. Solo en ocasiones importantes, como estas...Ella sabe que siempre soy yo, y trata de esconder su bolso, pero siempre logro encontrarlo. Es un don.

El metro llego a la estación y no se abrieron aun las puertas cuando ya me encontraba pegando el cuerpo a esta debido a la presión que las personas hacían atrás.

-Naguara, me van a hacer vomitar el hígado-Se quejó Kimi haciéndome reír.

Las puertas se abrieron y de golpe entramos al vagón, quedando en la puerta contraria. Apretadas, pero al menos entramos y no llegaríamos tarde al liceo.

Como siempre.

-Los estudiantes no deberían subir al tren.

Y allí vamos de nuevo.

-Debería ser solo para las personas de la tercera edad, estando ellos ocupan mucho espacio y estorban.

Joder, siempre era lo mismo. Siempre son unos viejos sin educación que insultan sin razón. Luego dicen que los estudiantes somos los maleducados. Mientras más viejos, más groseros se ponen.

Nos miró a Kim y a mí y nos dedicó una mirada no muy amigable. Lo dijo por nosotras... Aunque no éramos las únicas estudiantes en ese vagón.