capitulo 39

-¿Jugamos Stop? –pregunto Kimi.

Mire a mi alrededor y estaban todos los muchachos en lo suyo, los chicos jugando fútbol con una gran bola de papel, hecha por ellos mismo. Y las chicas estaban sentadas en el escritorio, contándose cada una su fin de semana.

Por lo que pinta... Todas tuvieron un buen fin de semana, lleno de chismes y risas.

Mire a Kimi y pues... Me hundí de hombros, tampoco es como si tuviéramos algo interesante que hacer.

Bien, ¿Por qué letra? –Pregunte, arrancando una hoja de mi cuaderno y buscando mi lápiz en uno de los bolsillos de mi falda. Ella hizo puchero- ¿D?

-Nah... Muy fácil, por la E.

-Bueno.

-¿Ya?

No Sí.

-Yava... tengo que hacer las casillas, niña.

-Bueno, niña, apúrate...

Comencé a escribir "Nombre, apellido, ciudad, Etc.." Hasta terminar de hacer mis casillas.

Hoy nos tocaba hacer labor social a todo 5to año, Y.. Pff, no tienen idea de la ladilla que tengo. Debo ir en un grupito de 3 o 4 personas a hablar sobre el dengue de casa en casa en una comunidad no muy lejos de aquí.

Ósea.

Lo único bueno de esto es que será Jungkook quien nos evaluara, supuestamente iba a ser Valeria pero bueno... como está embarazada..

Y no es que me esté quejando, al contrario.

-¿Así que el papá de Jungkook despertó?

Ah, Cierto..

-Sí, Gracias a Dios, aunque bueno... sinceramente, tenías que haber estado allí -Reì, recordando todo.

*-*-*

-Iré a comprarme un café ¿Quieres uno? –Pregunto Jungkook. Yo negué rápidamente- ¿Una galleta?

-Estoy bien –Reí.

Jungkook me tomo de ambas mejillas y me hizo alzarme para darme un beso en los labios. Mi primer beso con él en la mañana.

Lo amo.

-¿Seguro que no quieres nada?

Negué.

-Estoy bien, enserio. Te espero adentro...

Me guiño el ojo y camino hacia el pasillo rumbo al ascensor.

Estaba demasiado llena, habíamos desayunado panquecas con miel y chocolate, no podía comer más. Me sorprende que él aún se le antoje comer otra cosa.

También veníamos en el camino comiendo algunas fresas con la poca miel que nos quedó, siento que voy a reventar.

Mire la puerta de la habitación donde se encontraba el padre de Jungkook y suspire. Abrí la puerta despacio y al entrar, con la misma delicadeza para no hacer el más mínimo ruido, la cerré.

-¿Quién eres tú?

Gire de golpe, soltando el gran grito de mi vida ante tal susto.

-Dios...

El padre de Jungkook.

-Ay por Dios -Lleve mi mano a mi pecho, sintiendo mí acelerado corazón. El señor Si Hyuk me hizo mofa- Está de pie..

-¿Enserio? No te creo.

Este hombre no parece que haya estado en coma.

-Supongo que tú eres la niñita que trae loco a Jungkook ¿No? Te describió tal cual eres.. Enana y fea.

Hice puchero.

Este hombre es muy cruel.

Esperen un momento ¿ENANA? ¡NO SOY ENANA!

-Para que lo sepa, mido 1.65, señor... –Me cruce de brazos- Y yo soy pura belleza.

-¿Dónde?

-¡Ah-

-Oh, Si Hyuk, ¿Qué haces de pie? ¡Vuelve a la cama ahora! –Dijo la mamá de Jungkook, quien había entrado a la habitación con unas sábanas nuevas- ¿Ya te limpiaste, o volviste a hacerte pis esta vez delante de la niña?

-¡Oye, Jeonghwa, silencio! ¡No digas eso delante de ella! –Se quejó el señor Si Hyuk. Yo solté una risita.

Pero rápidamente tape mi boca ante su mirada asesina, ese hombre me da miedo.

-No te preocupes, Daniela. No le tengas miedo a Si Hyuk –Alboroto su cabello, haciéndolo cruzar los brazos y mirar hacia otro lado- Lo que tiene de gruñón lo tiene de adorable.

¿Really?

-Oye, mujer. Ya cállate.

-A mí no me estés callando, cállate tú.

Es increíble como una mujer puede dominar a un hombre en un dos por estrés.

-¿No te da pena? Ya a tus casi 50 años de edad y orinándote en la cama, cochino.

-¡Fue un accidente!

-¡Eso no quita lo vago que eres, Si Hyuk! Y encima te haces el dormido, preocupando a toda tu familia... Espera a que Jungkook regrese, lo vas a tener que escuchar.

Esto es tan... No puedo creerlo.

¿Enserio ellos son los padres de Jungkook?

-Igual, él dijo que si despertaba iba a renunciar a todo y se iría a trabajar en la empresa conmigo. Ya desperté, debe cumplir su palabra –Sonrió victorioso, esperando el tazón de sopa que su esposa iba a darle, ante sus palabras, la señora Jeon aparto el tazón de su vista- ¿Qué?

-¿Enserio eres capaz de burlarte de Jungkook de esa forma? ¿Acaso no escuchaste el llanto de tu hijo todas estas noches? ¡Eres increíble! ¡Me provoca lanzarte la sopa por la cabeza!

-¡Espera, espera, cálmate! Esta la niña aquí... ¿No te da pena que te vea como una loca maltrata hombres?

La señora Jeon me miro, y allí fue cuando supe que estaban hablando de mí. Ah cierto... sigo aquí.

Creo que será mejor irme.

-¿Enserio te mereces ser llamado "hombre"? –Pregunto la señora Jeon.

Volví a colgarme mi bolso y estaba a punto de salir cuando sentí que choque con algo.

Era su pecho, Dios mío.

-¿A dónde vas?.. –Jungkook volvió a adentrarme esta vez con él hacia la habitación, y al ver la escena de la que yo intentaba huir, me soltó- Papá...

-Ah, Hola... Veras, Yo-

-Estas despierto, Papá.

Jungkook fue hasta la cama y se sentó en el borde, tocando sus manos, notándose la felicidad en su tono de voz. La señora Jeon miraba al señor Si Hyuk como queriendo matarlo, este solo sonreía.

-¿Cuándo despertaste?

-Pues..

-Hace dos noches, Jungkook...

Jungkook mire a su madre, completamente confundido por sus palabras.

-Si, Así es. Tu extraordinario padre se hizo el dormido por dos noches solo para no afrontar los problemas que tenemos como familia.