Mientras Taehyung y Jungkook se duchaban juntos, Jaehwa y Hajoon habían aprovechado a cambiar sus cosas de lugar. Dejaron las pertenencias de Jungkook en el cuarto de Taehyung y Hajoon decidió quedarse en el de Jaehwa. El plan era perfecto y no podía fallar luego de lo que habían visto.
Aunque sus padres se hicieran los tontos, sabían que se habían besado y habían notado sus agarradas de la mano y miradas cursis en todo el camino.
Era un avance sorpresivo y debían provechar.
Cuando terminó de bañarse, Taehyung se echó en la cama a medio vestir, aun secando su cabello mientras veía las fotos que habían sacado con la cámara. Eran realmente muy lindas. De solo verlas podía recordar con exactitud lo que había sucedido, lo bien que se sentía el hecho de haber vuelto a probar los labios de Jungkook.
Estaba sucediendo lo que tanto temía, pero le gustaba y ya no sabia si quería dejarlo escapar. ¿Realmente él estaba huyendo? Si era así, debía dejar eso de lado.
—¿Y mi ropa? —preguntó Jungkook, viendo que había cosas que él no había llevado.— ¿Por qué esta aquí?
—Creo que los chicos cambiaron de lugar nuestras cosas mientras nos bañabamos.
—Ah bueno. —exclamó Jungkook, sosteniendo la toalla alrededor de su cintura mientras revisaba entre sus ropas.
Desde ya iba planeando dormir en el sofá si es que Taehyung no quería dormir con él, pero descartó esa idea totalmente en cuanto el castaño volvió a hablar.
—Volveremos a compartir cama luego de un año...
—Si, es un poco extraño. Ha pasado mucho tiempo ya. —cogió un bóxer y una remera.
Dejo la toalla a un lado y se vistió rápido, bajo la mirada de Taehyung, quien se lo comió con la mirada antes de cubrirse las partes más interesantes.
—¿Por qué te apuras? Ya nos conocemos bien. —sonrió, con una mirada pervertida que a Jungkook le hizo sonreír.
—Lo sé, pero si me demoró temo que no me vista aún.
Taehyung se quedó echado, viéndolo hacer sus cosas. Cada movimiento era lindo de admirar en Jungkook. Realmente estaba disfrutando de eso mientras se preguntaba que era lo que había sucedido entre ambos para llegar a esa situación.
—Jungkook... —esperó a que este volteara a verlo.— ¿Por qué nos pasó esto? —se sentó mejor en la cama sin dejar de verlo.
Jungkook se quedó un instante pensando en ello para luego sentarse también: —Quizá porque era lo que necesitábamos para darnos cuenta que estamos cometiendo un error al divorciarnos, sin si quiera intentar recuperar lo que teníamos. —estiró una mano y tomó la de Taehyung, entrelazando sus dedos.— Yo aun te amo, no he dejado de hacerlo a pesar de todas las cosas que nos hemos dicho en las peleas.
—Estoy confundido, y no porque no sepa con quien irme, sino porque no se cual opción es la correcta. ¿Y si aquí estamos así, pero al volver sigue todo como estaba? No quiero que eso suceda.
Jungkook podía ver la preocupación en los ojos miel de su amado y lo entendía. Él también se sentía inquieto ante esa duda, pero estaba dispuesto a intentarlo fuese como fuese.
—Al volver estará tu novio esperando por ti... —largó un suspiro, odiando el hecho de saber que Taehyung había sido de alguien más en ese ultimo año.— Yo de verdad daría lo que fuera por iniciar de nuevo. No cometería el mismo error dos veces, pero si tú no quieres está bien. Solo debes firmar el acta de divorcio y ya.
—Me sentía agobiado... La rutina, las cuentas, andar apurados... ni siquiera teníamos intimidad en un punto y casi nunca estabas en casa o ni me dabas atención, y con el tiempo también yo deje de hacerlo. —sus ojos se llenaron de lágrimas al recordar como todo aquello tan bonito que tenían poco a poco se había transformado en prácticamente nada.
—Lo sé, sé que ese fue mi error, pero tú dejaste de ser el de antes. Tampoco me dabas atención. A veces yo quería jugar y tú no. Aquellos juegos que hacíamos, tus coqueterías, quedaron en el olvido y sabes que yo siempre amé eso... luego comencé a centrarme más en el trabajo y en los ascensos que tuve.
—Son más de 18 años... hemos vivido tantas cosas juntos. —alzó su mano libre, acariciando el rostro de Jungkook con suavidad.— Y no quería hacer este viaje, pero acepte y de pronto descubro que no olvidamos como se hacen todas esas cosas que nos gustaban.
—Lo que pasó hoy... sentí que como si el tiempo no hubiera pasado y siguiéramos siendo novios, cuando salíamos y la pasábamos bien.
—Si, realmente lo disfrute. Hacía mucho no me mirabas de ese modo. —dejó ver una tierna sonrisa, viéndose adorable con sus ojitos brillosos y algo rojos ante el llanto que intentaba salir.
Taehyung siempre había sido el más sensible entre ambos.
—Es que fue como ver al chico lindo que me coqueteaba en la uni. —en donde había empezado todo.
—Era muy descarado en ese tiempo, no me importaba nada.
—Lo eras, pero me encantaba eso. Tu lado atrevido y desvergonzado.
Taehyung asintió, llegando a su mente aquellos tiempos y la manera tan particular en la que se habían conocido. Aun recordaba como esa chica había dejado plantado a Jungkook en medio de una multitud y él había salido a su rescate. Luego de eso, simplemente siguieron hablando y hablando hasta que el amor floreció entre ambos.
—Quiero pensarlo. Quiero tener una decisión tomada al final de este viaje.
—Independiente de cuál sea tu respuesta, lo aceptaré. —dijo Jungkook, y llevó su mano hasta su boca, dejando un beso allí.
—No dejes de intentarlo en estos días.
—Lo intentaré. Aún recuerdo cómo te conquistaba cada día cuando éramos novios.
—Me encantó la rosa, por cierto. Es muy bonita.
—Sabía que iba a gustarte, eres todo un cursi. Un bebé hermoso y cursi.
—Creo que sigo siendo el mismo, solo algo tapado por el polvo. —sonrió, y Jungkook fingió quitar un poco de eso de su hombro, lo que le hizo largar una carcajada.— Eres un tonto.