Quédate Conmigo

CAPÍTULO 7

Max

 

Ha pasado 1 mes desde esa noche. No he dejado de pensar en esa chica. Y realmente no sé que me sucede, no me pasaba esto desde que era un adolescente. Quizás sólo la quería encontrar otra vez para tenerla en mi cama, si tenía que ser eso, era la primera vez que conocía a una mujer que me atraía y no sucedía algo entre nosotros. Me estaba volviendo loco. Aun recuerdo el tacto de mi mano en su cintura y el calor que ésta desprendía cuando coloque la mano en su espalda descubierta por el vestido cuando se trato de incorporar, cuando sujeto mi mano para sentarse en la silla. Sus labios rojos y esos ojos verdes.

Tenía que detenerme, no podía seguir pensando en ella. Me estaba causando problemas allí abajo. Mierda! tenía que calmarme. Así que me puse a revisar algunos correos y terminar de firmar la aprobación de algunos contratos.

Escuche algunos golpes en la puerta y le permite el acceso.

-Adelante.

-Disculpe la interrupción Sr. Hemsworth - dijo al asomarse mi secretaria - La Señorita Rebecca esta aquí, dice que necesita hablar urgentemente con usted. La hago pasar?

- Si, dile que pase por favor. - Rebecca era mi hermana menor, tenía 22 años, era la consentida de la familia.

-Si Señor. Con su permiso - dijo para retirarse y yo asentí.

- Hola hermanito precioso, como esta el mejor hermano de todos? - Dice Becca cuando entra, se acerca me da un beso en la mejilla para sentarse en la silla frente a mi escritorio.

-Ya sé por donde vienés, que necesitas? - le pregunté inmediatamente ya que siempre me decía así cuando quería algo.

-Asgg! Porque siempre sabes cuando voy a pedirte algo. - dijo cruzándose de brazos y arrugando sus perfectas cejas.

-Porque te conozco como la palma de mi mano, ahora dime a que se debe tu visita? Para que soy bueno? - le respondí imitandola al cruzarme los brazos.

- Padre no quiere comprarme mi propio auto. Estoy cansada de que un chofer tiene que llevarme a cada rato a todas partes, es como si tuviera una niñera!! - dijo enojada.

- Ajá, bueno. Y yo que tengo que ver en esa decisión? - Sabía por donde iba esa petición.

- Quiero, no, necesito que me ayudes a convencerlo, ya he utilizado todo lo que hay en mi para convencerlo y no lo logró. Sí tú hablas con él ya seríamos 2 contra 1... Por favor, por favor, ayúdame. - pidió haciendo puchero y casi casi que le sale una lágrima.

- Sabes que papá en estos momentos no está muy bien conmigo que digamos y así hable con él, no va a cambiar su decisión. - si, desde el día que despedí a la ladrona, aunque él ya se alejo de ella y dejaron de tener sus encuentros ocasionales por lo sucedido, esta enojado por la discusión que tuvimos sobre las decisiones del bufete.

- Si, lo sé. Lo sé. - Dice con voz apagada agachando la cabeza - sólo quería ser normal, tener mi propio auto sin necesidad de decirle a alguien que me lleve a comprar una barra de chocolate o que sé yo. - No puedo verla así.

- Esta bien, hagamos algo. - dije y alzó su rostro para escuchar y prestar atención - Yo te voy a comprar el auto que quieres - comenzó a saltar, vaya ya no tiene lágrimas. Que buena actriz! - Eh, eh espera, no he terminado, tengo una condición. - Se sentó nuevamente y me miro.

-Que condición? - pregunto con desconfianza.

- Quiero que termines la carrera de Diseño - Me miro con tristeza- Sé que a mamá le habrá gustado que fuera así, renunciaste a cumplir tu sueño cuando ella murió.

- Yo.. No puedo Max. Ella era mi inspiración, ella había estudiado lo mismo que yo, siento que una parte de mi sueño se fue con ella - me dijo con voz quebradiza, me levante y me acerque a ella para abrazarla, sólo a ella y antes a mi madre son a la únicas que abrazo nunca me ha gustado mostrar ese afecto a otras personas.

- Una parte como dices, pero aún queda el resto de ese sueño presente, debes cumplirlo, a ella la habría gustado que así fuera.

- Pero ella no estará conmigo para ver que así suceda. No me vera recibir el título y...- dice con algunas lágrimas.

- Shh.. Ella si estará, siempre ha estado a nuestro lado antes, ahora mismo y siempre lo estará. Sólo que tú no la vez pero ella si a ti mi princesa. - le dije secándole las lágrimas. Luego de varios minutos respondió.

- Bien, esta bien voy a acabar la carrera sólo me falta 1 año para terminarla - me abrazo con una pequeña sonrisa triste en los labios, sin embargo luego se separó para decirme - Pero tú, - me señalo - vas comprar mi auto y lo quiero de color rojo.

- JAJAJAJ, trato hecho esa es mi chica. Vamos te llevaré a desayunar a una cafetería que esta a unas cuadras de aquí, me dijeron que hacían las mejores panquecas de la zona y sé cuanto te gustan. - le dije para levantarla, acomode mi saco y guarde mi teléfono en mi bolsillo ya que estaban encima del escritorio.

Una vez fuera de la oficina le pedí a Maria mi secretaria que cancelara las reuniones de esa mañana. Fuimos al estacionamiento privado para subir a mi coche y dirigirnos a esa Cafetería. Cuando entramos buscamos una mesa libre debido a que estaba lleno ese lugar. La encontramos y nos sentamos. Esperamos a que llegara la mesera para anotar nuestro pedido, pero cuando llegó a la mesa, estaba agradecido con mi hermana por haber ido esta mañana a la oficina. ES ELLA. No podía creer que la tenía frente a mi.



#29039 en Novela romántica

En el texto hay: pasado, drama, amor

Editado: 13.01.2021

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