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OWEN
 

Llevaba varios meses preparando la manera en como iba a decirle a Amanda la propuesta.

Estaba muy nervioso, angustiado y hasta estresado. Las ideas de Alex casi nunca funcionan ¿Por qué le hice caso? Lo mejor que podría hacer es ser yo mismo y dejar la inseguridad atrás ¿no?

Me costó mucho recuperar a Mandy, casi tres años y sé que a ella le costó demasiado volver a aceptarme en su vida.

No quiero arruinarlo.

Se me hacía tan extraño volver a hablar con ella todos los días, llamarla, besarla cuando nos veíamos después de tanto tiempo, habíamos pasado casi dos años separados y costó tanto esperar una buena oportunidad para acercarme, después de todo, el que arruinó las cosas fui yo por mi falta de confianza (cosa en la que he trabajado todo este tiempo). No quería llegar tan de repente a su vida y que ella sintiera que todo su mundo se le iba encima, mucho menos por mí. Todo parecía sacado de una película, sobre todo en estos dos años tratando de conquistarla de nuevo.

¿Sufrí cuando creí que ella me había engañado? Mucho, pero dolió más haber analizado todo y saber que se trataba de un simple malentendido que se convirtió en algo más grande. Todo había sido idea de Phillip y Lauren (digno de telenovela) todos los que me habían dicho que Amanda no era buena para mí, se pusieron de acuerdo para hacerla quedar como la mala de la historia.

Tiempo después Phillip se arrepintió de lo ocurrido y me buscó, fue aún más doloroso que mis suposiciones fuesen ciertas. Yo había arruinado las cosas con Amanda por mi inestabilidad, por no saber manejar las situaciones en las que me encontré con mi padre y la muerte de mi tía. Yo dejé ir a alguien tan preciado como ella y cuando tuve el valor de ir a buscarla y pedirle perdón por ser tan tonto, ella se había ido a Inglaterra.

Quería hacer las cosas bien, explicarle que no tenía culpa de nada y que cayó en las manos de Phillip así como yo caí en las de Lauren (ella me besó delante de Amanda para que nos separáramos y yo era tan tonto que no lo había podido ver. Creí que Lauren lo había hecho sin querer. Si, sé que soy un completo idiota, sobretodo porque veía siempre lo bueno en los demás pero no fui capaz de ver lo bueno en mi novia.)

Siempre le ví el lado bueno a todos, pero no a ella en su momento.

Que hipócrita me hacía eso.

La había perdido por ser tan idiota.

Traté de localizarla... Buscaba en sus redes sociales para ver en que país se encontraba y así poder verla como "que casualidad verte por aquí" pero eso no pasó, preferí quedarme tranquilo y asimilar bien las cosas para no espantarla, estuve con alguien por tres meses pero no hubo una chispa del todo intensa, además de que no podía superar a cierta persona y no quería hacerle daño a Lissy (mi ex novia después de Amanda), así que lo dejamos. Traté de vivir en paz y dejar a Amanda atrás, encontré parejas esporádicas, tuve mis meses de querer experimentar con otras chicas pero nada funcionó, porque cuando conocía a una chica, íbamos a su casa y pasaba todo, al día siguiente un vacío siempre estaría conmigo. No se trata de la cantidad de mujeres con las que creí debía estar, se trataba de un sentimiento profundo que se arraigaba a mi ser y yo lo ignoré para no sufrir ni depender de alguien más.

Los seres humanos somos tan débiles cuando nos enamoramos, pero somos jodidamente afortunados cuando se trata de un sentimiento recíproco.

Dos años atrás, cuando ya sentía todo perdido con ella, Alex me dijo que Amanda estaría en Boston y decidí tomar esta primera y última oportunidad ¿Qué podría perder? La curiosidad me hizo dejar una oferta en un estudio de baile y una entrevista de trabajo en una de las empresas más grandes de Canadá para venir a verla y hablar con ella.

La palabra "Enamorarse" para mí era una sinónimo de esclavitud, dominación y debilidad, me equivoqué.

Mirar a Amanda me hizo feliz desde el primer momento, ver su rostro angelical era algo admirable en todos los sentidos y escuchar su dulce voz era música para mis oídos, hablarle me hacía sentir pleno y hacerla sonreír era lo que me dejaba más que satisfecho.

- Feliz navidad, cariño - me susurró en el oído mientras me abrazaba por la espalda.

La tomé de los brazos y le di la vuelta haciéndola quedar frente a mí - Feliz navidad, amor - le dije, dándole un beso en los labios.

Me entregó una caja ni tan grande ni tan pequeña de color negro y yo de curioso le pregunté que era.

- Ese es mi regalo de navidad para ti. Mis fotos, mis escritos, mis recuerdos con Lily - al mencionar el nombre de su amiga, sus ojos se cristalizaron, yo la abracé como si no hubiese un mañana - Aún la extraño ¿Sabes? Nunca hablo de ella, nunca creí necesario alguna foto, alguna conversación de nosotras y el día en que traté de quemar todos sus recuerdos fue un momento de flaqueza, Owen. Nunca quise quemar esa caja, no pude hacerlo.

- Sé lo importante que fue Lily para ti, Mandy. Se fue muy pronto de tu vida, pero recuerda que nunca se irá de tu corazón. 

Ella sonrió entre las lágrimas y hundió su cabeza en mi pecho, mientras yo olía el hueco de su cuello - Sigue siendo muy injusto que se haya marchado con apenas quince años. Recuerdo nuestros juegos, nuestras travesuras, todo lo que pasamos juntas, como si de alguna manera alguien allá arriba quisiera que yo mantuviera su recuerdo intacto - volvió a mirarme y aproveché de secar sus mejillas. - De alguna manera siento que es culpa mía.

- ¿Por qué dices eso? 

- Porque yo iba en el auto cuando pasó - su rostro se ensombreció - Íbamos a la playa. Mi madre me había dado permiso para ir con ellas, pero no pudo ir porque ella y mi padre estaban trabajando al igual que el padre de Lily. Yo iba en el asiento trasero, mientras que Lily y su madre adelante, no comprendo que fue lo que sucedió o como pasó, lo que sé es que íbamos en una curva... Un camión venía a toda velocidad y... chocó. De ahí no recuerdo nada más. Desperté una semana después del accidente y  mi mejor amiga y Clarissa, su madre, ya habían muerto para entonces - sollozó - Mis padres estuvieron conmigo en todo momento, los mellizos estaban muy pequeños y el padre de Lily nunca apareció, ni antes, ni después de su entierro.- se separó de mí muy despacio y se quedó mirando al vacío, yo la abracé dándole a entender que tenía todo mi apoyo y duramos así un largo rato, habían pasado los minutos y las horas hasta que mi chica volvió a mirarme y en un tono más tranquilo me habló - Hay algo más en esa caja que no te he dicho.