ALEX BRUCE
-¡¿Cómo es eso de qué ya no sales con Carrie!? - Grita mi madre, al borde de la histeria. Suspiro con cansancio y apoyo mi cabeza en mis manos. Axel que está sentado frente a mí en la barra frunce el entrecejo con seriedad, mientras muerde una manzana verde.
Mi madre toca sus sienes, masajeando la zona, y cierra los ojos con fuerza. En otro caso me reiría, pero esta demasiado molesta que prefiero no hacerlo.
-Pues terminé con ella, mamá - Digo, lo más tranquilo que puedo.
Ha pasado casi un mes y medio desde que terminé con Carrie y mi madre hasta apenas hoy se viene enterando, todo gracias a la mamá de Carrie. No entiendo el por qué tienen que meter sus narices donde no tienen qué hacerlo.
Se podría decir que mi madre es bastante... intensa. Ella quiere que Axel y yo hagamos lo que decida, que sigamos sus ordenes al pie de la letra, y si, en algunas ocasiones nosotros obedecemos, pero en otras simplemente la tratamos de ignorar. No quiero que vayan a mal interpretar las cosas, por supuesto que amo a mi madre con mi vida, ella es la mujer que me ha dado la vida después de todas las circunstancias, pero en algunas veces no me gusta lo que quiere que Axel y yo hagamos con nuestras vida, quiere que hagamos lo que quiere, cuando quiere, y no a toda persona le gusta que le digan lo que tiene que hacer. De igual manera, la respeto, por eso me evito tener cualquier tipo de discusión con ella.
-¡¿Por qué, Alex!? - Vuelve a gritar, su tono de voz se hace cada vez más apremiante, trago saliva y entierro mis dedos en las hebras de mi cabello -, ¡¿por qué!?
-¡Porqué sí! - Exclamo con frustración -. No iba a durar con ella una eternidad, en algún momento teníamos que terminar.
Papá entra a la cocina con el entrecejo fruncido, su mano sostiene un vaso de whisky y se viene aflojando el nudo de la perfecta corbata negra que trae puesta, que hace juego con su costoso traje de vestir.
-¿Qué son todos esos gritos, Angélica? - Cuestiona, mirándola con extrañeza. Aprieto el tabique de mi nariz y suelto un suspiro.
-¡Pues que tu hijo ya terminó su relación con Carrie! - Informa mi madre, respirando hondo, como si en algún momento se fuera a asfixiar.
Carrie.
Escuchar su nombre hace que miles de flashes naveguen por mi mente a la velocidad de la luz, todos del mismo puto acontecimiento de una noche.
Papá me mira con una ceja arqueada. Él comprende mejor las cosas que mamá. -¿En serio, Alex? ¿hace cuánto?
Aprieto la mandíbula. -Hace cómo un mes o más. - Me limito a responder.
-¡Tenía planes para él, Alejandro! - Mamá me señala con el dedo índice.
Eso basta a decir para que capture toda mi atención, levanto la vista del mármol y la miro, arqueando las cejas.-¿Qué planes?
-¡Te ibas a casar con ella! - Mi estómago se revuelve y me atraganto con mi propia saliva. Comienzo a toser y Axel y mi padre la miran con sorpresa.
-¿Qué? - Pregunto, cuando puedo hablar, mi voz sale llena de desconcierto -. ¿Estás loca?
-No me hables así, Alex.
-Yo no pienso casarme con ella - Hablo, enderezándome en el banco -. Estoy demasiado joven como para pensar en un futuro comprometedor.
-Te guste o no tie...
-Angélica - Mi padre la interrumpe, tomándose de un trago todo el alcohol -, ¿cómo se te ocurre querer casar a Alex con Carrie? Él es muy joven aún, no estoy de acuerdo con la clase de planes que tienes. ¡Ni siquiera a Axel que está más grande pretendas casarlo!
Mi madre mira a papá con los ojos entrecerrados y las manos en la cintura, Axel deja de comer de la manzana y mira con seriedad a nuestros padres.
-Pónte a pensar en lo que nos beneficia, Alejandro - Papá mueve la cabeza en negación -, si Alex se casa con Carrie nuestras empresas se asociarían con las de Fernando.
Aprieto más la mandíbula, tanto que mis dientes y muelas empiezan a doler.
Fernando es el nombre del papá de Carrie, él también cuenta con empresas importantes como las de mi padre. Meneo la cabeza en desacuerdo, ni en mil años llegué a pensar casarme con Carrie. Hablando con la verdad, estando con ella jamás, pero jamás de los jamases, me imaginé un futuro a su lado, en ningún momento se me llegó a la cabeza imaginármela con un vestido blanco en el altar, o ella y yo viviendo juntos y planeando tener hijos. Sinceramente, ahora pensándolo con claridad, nunca la incluí a mi futuro, y, tal vez, fue porque ella y yo no estábamos destinados a estar juntos. Es como dicen: todo lo que se llega a unir, se tiene que separar.
‹‹¡Y entonces Axel podría salir en una relación con Kristen!
Axel abre los ojos más de lo normal, moviendo la cabeza con frenesí, estoy seguro que le puede dar un paro cardiaco al escuchar a mamá.
-Ni lo creas, nunca, pero nunca - Hace énfasis en la palabra, su voz saliendo llena de frialdad, él no puede ver ni en pintura a la familia Dunne -, me involucraré con la hermana de la ex de Alex.
-¡Ustedes son unos malagradecidos! - Nos da una mirada reprobatoria, en especial a mí -. Yo sólo quiero lo mejor para los dos.
-Lo mejor no esta en casarme con Carrie - Hablo, luego hago una breve pausa -. ¿Quieres que toda la vida viva con quien no quiero? ¿quieres que viva amarrado a ella solo por ganancia y obligación? Ya no estamos en esos tiempos, mamá; así que me niego rotundamente a volver con Carrie y casarme con ella, te parezca o no, ella y yo no volveremos a ser novios.
Mamá jadea con indignación, su rostro se contorsiona en una mueca dolida, a ella no le gusta que le alzemos la voz, y yo no acostumbro a hacerlo, siempre tengo presente que debemos respetar a las mujeres, papá me lo enseñó, pero en entos momentos, era necesario aclararle que no estoy, ni estaré dispuesto a ceder a lo que quiere que haga. Ella voltea con papá de forma interrogante.
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Editado: 29.05.2023