Preguntas con o sin respuesta

Capítulo 40

ALESSANDRA ANTONELLI: 

–Mañana es 24 de diciembre –comienza Emir –aun quieres… ¿quieres ir a casa de los Herrera?

–Si, todos estos años ha sido así ¿Por qué lo dices?

–¿Por qué crees tu?

Volteo para ver a Stella que come gustosa su pedazo sin dejar de ver la televisión.

–No podemos estarlo evitando a cada nada, además, tu cumpleaños es al día siguiente y todos ya nos acostumbramos a festejarte –le doy un trago a mi bebida –dudo mucho que eso cambie por la llegada de Andrés 

–Tienes razón –dice rindiéndose –trataré de que no me afecte

–No tiene por que, enfoquémonos en que Stella tendrá muchos regalos –le sonrío

–Como todos los años

–Papi, que te gustaría que te regale –cuestiona Stella

–Nada, amore –le acaricia la mejilla –que siempre estés a mi lado es mi gran regalo

–Pero siempre estaré contigo papi –se burla –te daré un súper duper ragalito y no reniegue señorito

–De acuerdo, usted manda

–Obvi

Este le comienza a hacer cosquillas haciendo que Stella de patadas por querer escapar de sus ataques. Me pide ayuda, pero yo solo me rio por como no logra salir de los brazos de su papi Emir; el amor y cariño que se tienen no creo que se pueda acabar con nada del mundo, así que se creara otro diferente con Andrés. 

–Bueno, preparare las maletas para el día de mañana

–Mami, me guardas mi vestido de flores

–¿Cuál de todos? –me burlo

–El de color amarillo… no, mejor el azul… no, no, el color verde mami, para combinar con la navidad

Tomo su mochila color azul guardando su pijama con sus pantuflas de pandas, ropa interior, zapatos adecuados para la vestimenta que quiere llevar mañana y el vestido que me pidió guardar.

–Listo, ahora iré por las nuestras, descansa, sole mio

–Hoy no me cantaste mami –hace un puchero

–Mañana lo hare sin falta, hay cosas que hacer princesa, duerme y deja a tu papi –miro a Emir

–Cuando se duerma profundamente esta princesa hermosa, iré a ayudarte

–De acuerdo, te espero en la recamara –le guiño un ojo y este me sonríe 

Salgo de la habitación yendo a la mía para realizar lo que dije antes, llegaremos allá temprano así que nos arreglaremos como siempre en casa de Eli para que en la noche cuando lleguen todos estar listos. 

A veces pasan dudas por mi cabeza donde pienso en correr a los brazos de la persona que una vez amé con todo mi ser, pero a la vez me da miedo el que lo vuelva a hacer, se vuelva a ir y perder todo lo que cree con mi pequeña familia, así que decido guardar esos pensamientos, dudas, ideas que tengan que ver con eso, lo que de verdad importa es mi hija y siempre será así. 

ANDRÉS HERRERA:

–¡¿De verdad vendrán?!

–Andrés, no comiences por favor –dice mamá –estos años que no estuviste pasamos todas las festividades juntos, además de que Emir cumpleaños en navidad

–Así que también lo festejan ustedes

–Claro –mamá deja de lado lo que hace y se acerca a mi –mijo, ese joven es una buena persona, nos cuido, es muy buena pareja de Ale y ha sido el mejor padre para Stella

–Su padre soy yo –le recuerdo

–Si, tu eres el biológico, pero no la conoces –suspira y me acaricia la mejilla –en cambio con Emir es con quien creció, él vivió todo el proceso… tu te fuiste sin escuchar nada de nadie y esa es la consecuencia con la que tienes que cargar, no digo esto con el fin de lastimarte, te lo digo porque si de verdad quieres conocer y ser alguien en la vida de tu hija, es mejor que te hagas a la idea de que cuando le pase algo, con quien correrá primero será con Emir.

–Yo lo sé mamá, es por eso por lo que con Alessandra trataremos de que poco a poco se de cuenta de que su padre soy solamente yo

–También lo es Emir –me recalca –, esperemos que salga positivo este asunto, pero deja ese odio por Emir, mijo –me besa la frente –él también ha sido un hijo para mi, para que lo sepas.

–Si, si… todos aquí lo aman, lo quieren y bla, bla, bla

–Deja tus celos –canturrea burlándose

No hay momento que nadie me recuerde que aquí soy un desconocido y que mi lugar lo tomo ese fotógrafo tanto en mi familia como con la mujer que amo y mi hija, aunque por mas que lo odie debo admitir que los trato y cuido en mi ausencia, eso se lo aplaudo, cualquier otro imbécil le estaría prohibiendo a mi flor ver a mi familia o el tener a mi hija feliz. 

Hace unas horas pase a comprar varios regalos para mi hija, uno para mi… para Alessandra y todos los demás de mi familia, ahora sabiendo que Emir cumple años el día de mañana comienza la duda si regalarle algo…nah, si acaso un apretón de manos y de malas si no lo acepta, es todo lo que puedo ofrecer.