Una expectativa es lo que se muestra en la sociedad. Una expectativa, es lo que ves mas allá de lo que puedes ver, puede o no ser realista. Un resultado menos ventajoso ocasiona una decepción, al menos generalmente.

La realidad es aquello que acontece de manera verdadera o cierta, en oposición a lo que pertenece al terreno de la fantasía, la imaginación o la ilusión. Lo real, por lo tanto, es lo que existe efectivamente.

No puedes vivir de sueños, tienes que asumir la realidad y actuar en consecuencia”.
Mostramos lo que no somos. Queremos actuar de manera de que hemos logrado lo que queremos sin haberlo hecho.
Mostramos expectativas de lo que podemos ser y no la realidad de nosotros mismos.
Si quieres lograr un sueño no lo conviertas en una expectativa o mejor dicho una fantasía, conviertelo en una realidad.
Que triste es vivir de una fantasía y no aferrarnos de la verdad, de lo real.
En el mundo de los emprendedores se emprende lo real. No lo que nos imaginamos. O más bien, emprender una mentira.
¿Por qué mostrar a la sociedad la copia pálida de nosotros? ¿Por qué mostrar lo que no somos? ¿Por qué creer en lo que no somos?
Tristemente te digo que tu originalidad, por más que no te guste la debes usar, no la encarceles en lo más profundo de ti. ¿Estás siendo sincero contigo mismo?
La realidad es que no eres seguro contigo mismo.
Y si no es así. ¿Por qué dudas de ti?
La realidad es que tampoco eres sincero.
La realidad es que te escondes y muestras lo que los demás en verdad quieren ver. Y sólo porque tienes miedo a que te rechacen; no muestras lo especial de ti, lo que te hace diferente a los demás.
Y esa es la triste respuesta de las personas que están estancados en un mundo donde están acorralados en el cual no tienen la libertad de ser ellos mismos y dar los mejor.
Hay caminos que te llevan al éxito, pero no al propósito de tu vida. Y ese propósito muchas veces lo destruyen las personas que están a tu alrededor, inclusive tu mismo por querer complacer al mundo. ¡Y tratar de complacer a otros no es servir sino destruirse a si mismo! Te pierdes en tu propio mundo, y quedas atrapado en la burbuja de satisfacer las expectativas de tu jefe, de tu madre, de tu padre, de tu novio\a, de tus amigos excepto de ti mismo.
Ya vas perdiendo el sentido de tu vida, ya vas olvidando para qué fuiste creado.
Nuestro propósito es servir no complacer al mundo. Y si no tienes nada que ofrecer no tienes nada que perder. Aunque no pierdes nada si das. Dar es tener. Y al doble.
Eso es lo que hay que entender. Hay que entender que nosotros somos los creadores de nuestro propio futuro o destino. No otro... Ya basta de escuchar a la bola de mediocres que dicen que no tienes talento, que no sirves para nada... ¿!Sabes cuál es la realidad!?
¡Qué no todos servimos para todo pero todos servimos para algo! Y tú tienes el poder de hacer lo que te de la gana, no lo que los demás impongan en ti.
El mundo negativo sólo existe en las mentes vacías.
La triste y gran realidad es que cuando estamos vivos todos somos diferentes a pesar que todos algún día iremos al mismo lugar y es a la hora de la muerte donde terminamos en un cementerio donde todos somos iguales.
El mundo será lo que quieres que seas. Y a la vez todo va a depender de como veas al mundo también.
La vida nunca va a dejar de pegarte duro. Te va a tumbar los dientes. Pero sonreír sin dientes, siguen siendo sonreír. Daniel Habif.