Capítulo 23

Tener que pensar en algo diferente, en algo que no sea esa noche resulta imposible. A cada instante lo recuerdo y todavía más intenso cuando estoy cerca de Logan. Él fue mi primer beso al día siguiente lo único que podía pensar en eso, cada vez que lo encontraba mis ojos solo miraban sus labios y un anhelo intenso por volver a sentirlos iba creciendo.

Estos sentimientos eran nuevos en mi vida, los había sentido, pero no de esta forma. No es como el amor que sientes por tus padres, el cariño hacia un amigo. Esto es totalmente todo lo contrario. Este sentimiento.

Bajo la mirada y me levanto de la silla, acercándome al balcón ni siquiera he leído, una página del libro que tome de la biblioteca. Lo miro ahí en la distancia junto a Steven junto las reses. ¿Por qué no lo hizo? Empecé a preguntarme estaba seguro que lo deseaba tanto y de la misma manera yo. Anhelaba volver a sentir sus labios contra los míos, pero no lo hizo. El momento era el adecuado, era perfecto. Talvez si lo hubiera hecho estaría dispuesta a quedarme con él.

Alice llega junto a él y le dice algo haciendo que regrese junto Alice a la casa –hija –llega mi mamá.

–Mamá –la noto algo nerviosa –¿Ocurre algo? –pregunto.

–El detective que está investigando tu caso está aquí –dice nerviosa.

–Descubrió algo –respondo con emoción –vamos.

Doy unos pasos encontrándome en el pasillo a Alice –señorita Ester acompáñeme ¡por favor!

Asiento. Y salgo junto a mi mamá y Alice llegando hasta la sala donde Logan ya se encuentra dialogando con el detective.

–Buenos días –saluda el detective.

–Buenos días –respondo junto a mi mamá tomando asiento –si está aquí es porque, tiene avances en la investigación. –continuo.

–¿Sabe quién está detrás de mi hija? –cuestiona mi madre.

Guarda silencio y nos mirada, pero su mirada se detiene en Logan –lastimosamente no he podido dar con el responsable –responde –, pero seguiré investigando. Las razones de mi presencia aquí son otras –fija más su mirada en Logan.

Él mantiene la mirada con total naturalidad, con una expresión inalterable –¿Cuáles son? –cuestiona con tranquilidad.

El detective se apoya completamente en el espaldar del mueble –supongo que no me dirá, ni me entregara los avances de su investigación –dice serio fijando más su mirada en él.

–Si hago eso, van a interponerse y eso es algo no que permitiré. Así que mientras mis investigadores avancen y tengan todas las pruebas. Es solo asunto mío –responde Logan.

–Ya veo –dice el detective inclinándose hacia adelante, apoyando sus codos en sus rodias, juntando sus manos mirándolo atento –¿de verdad está investigando este caso? –cuestiona.

–¿A qué se refiere detective? –pregunta mi madre. –Él nos ha dicho que tiene investigadores que trabajan día y noche buscando las pruebas y al que está detrás de mi hija.

–¿Usted cree eso? –inquiere el detective, no sé a dónde quiere llegar –dígame. Alguna vez ha visto al investigador privado llegar aquí. hablar con él.

–Estaba en coma –interviene Alice.

–Pero antes de eso estuvo algún tiempo despierto. Debieron notar algo –presiona el detective.

–El joven Logan, se preocupa por ella. No quería exponerla ante la situación en la que se encontraba –continua Alice –quería protegerla.

–Sabe me resulta curioso y extraño –continua el detective –como el hecho de que usted supiera que iban a secuestrar a su prometida. Y da la casualidad que minutos antes secuestro a su madre.

–Piensa que yo estoy detrás de todo esto –dice Logan con tranquilidad.

–Es curioso que lo diga porque al continuar con mi investigación. Descubrí muchos cabos sueltos con la historia que me contaron y contaron al resto. Como, por ejemplo. Su supuesta hermana. Nunca existió, usted es hijo único. Huérfano cierto. Usted perdió a sus padres cuando estaba en la universidad y da la casualidad de que obtuvo una enorme fortuna después de eso.

–Cuidado con lo que dice detective –dice serio Logan.

–Su fortuna siguió creciendo de forma extraña. Tan joven y se había convertido en el millonario más joven del país. Compro esta hacienda a Joaquín Russo, pero se asociaron e ingresaron como inversionistas en Lácteos Rey y cuando el señor Joaquín Russo muere usted hereda todas sus acciones. Tiempo después secuestra a la señorita Ester Guerrero y su madre. No le parece muy extraño –dice el detective.

–Quiere decir que es Logan quien está detrás de mi hija –dice mi madre mirando a Logan.  

–Eso no puede ser –intervengo –todo este tiempo nos trató con respeto. Estuvo en coma, por más de dos meses y durante ese tiempo tanto mi madre como yo sufrimos varios atentados –responde a favor de Logan, pero la duda está sembrada.

–Cierto, pero el joven Lombardi tiene muchas personas, trabajando para él. No me parece raro que…

Logan empieza a reír –insinúa que yo atente contra Ester y su madre. Déjeme adivinar. Usted piensa que Alice o alguno de los trabajan para mí actuaron, para lastimarlas. Jamás haría eso. No sabe nada de lo que dice.