Capitulo 2

Seguía en mi oficina pensando que cosa había hecho mal y no sabía qué hacer, no sabía adonde se dirigía Julie, no sabía si se fue en avión o en bus, no sé si volverá a Chile o se quedara en Estados Unidos. Tome nuevamente mi teléfono y llame a mi Padre, se que el me puede ayudar.

-Hola ¿Qué pasa?- dijo el gran magnate del otro lado de la línea, con bastante tranquilidad.

-Julie se ha ido, necesito que la busquen y que la vigilen, no quiero que se vaya de mi vida tan fácil- Dije rápidamente y con una pequeña muestra de felicidad, esto es extraño. 

-¿Por qué no la buscas tú?- yo bufe un poco enojado. 

-sabemos perfectamente que tus hombres tardaran unos minutos, los míos demoraran días, ayúdame- ser un hombre tan conocido tiene sus privilegios eso es lo bueno, ya que él puede buscar a la chica en unos minutos y eso es lo que necesito.

-iré a la empresa y me contaras todo lo que paso- colgué la llamada y llame a Isidora para que me trajera un café, luego le pregunte si sabía dónde se iría Julie, ella obviamente me dijo que no sabía dónde se iría, quise creerle pero fue imposible ya que ellas son muy buenas amigas. Después de una hora de espera Isidora me informo que mi papa ya había llegado y en unos minutos ya se encontraba sentado en los sillones de mi oficina.

-¿Por qué se fue?- algo característico de mi padre es que es demasiado directo y eso a veces es molestoso, suele olvidarse de los modales, gracias padre me encuentro de maravillas, solo tengo el corazón un poco triste .

-Ella confundió sus sentimientos conmigo, pero no sé qué me pasa, necesito que vuelva y no voy a descansar hasta poder encontrarla, no creo que pueda desaparecer, eso es un punto a mi favor, ayúdame a buscarla y te volveré a la empresa- mis padres me arrebataron la empresa central de la marca Calvin Klein y ahora él junto a mi madre quieren que vuelva ya que la empresa está casi en la ruina.

-está bien, mañana tendrás la dirección de la chica, te espero en la otra empresa a primera hora, yo me hare cargo de esta- yo asentí y el salió de mi oficina, me acosté en los sillones y seguí pensado, me sentía tan triste, en ese momento recordé mi puta frase.

-Vete, quiero estar solo-

-Vete, quiero estar solo-

--Vete, quiero estar solo-

Siempre que ella me brindaba su apoyo yo solo le hacia daño. Sin poder concentrarme tomo la decisión de retirarme del edificio e ir a casa de mi gran amigo Adrian. Después de manejar por una hora al fin llego hasta su casa, me bajo de mi auto, prendo un cigarro y comienzo a fumar, el idiota es tan estricto que no me deja fumar dentro de su casa, aunque soy Jared Klein eso obviamente no me importa, Adrian es unos años menor que yo, fui unos de los socios que confió en el sin conocerlo y por ello su empresa tiene tanto reconocimiento, es un chico con gran talento para los negocios, a penas termine mi cigarro llame a Adrian pero el imbécil nunca contesto, comencé a caminar por el vecindario intentando encontrarlo, se que el debe estar cerca de casa, a menos de que se haya ido de viaje, por suerte no es así, ya que lo veo sentada en las bancas de una pequeña plaza.

—¡Hey! ¿Cómo estas?— Dije mientras me sentaba a su lado—Hace mucho tiempo que no nos vemos ¿Qué ha pasado en tu vida?

—Me casé— Comenzamos a reír y saque otro cigarro de la cajetilla para volver a fumar—Es enserio, idiota, me casé con mi secretaria...

—¡Espera! ¡Debe ser una broma!— No podía dejar de reír por la situación, es bastante cómico lo que acababa de decir.

—¡Claro que no! Abril llevaba dos meses trabajando como mi secretaria y su padre le dijo que si no se casaba se debía ir al campo y ¡Como el idiota que soy! Me casé con ella, me enamoré ¡Me enamore! Aunque ahora ella se fue al campo a cuidar a su padre y yo no se que hacer— Sigue siendo solo un niño.

—¿Puedo opinar? Es que tu eres un poco extraño, no quiero que te enojes— Es tan bipolar que mejor pregunto antes de que terminemos enojados— Ve y bésala ¡Basta de pensar! ¡Solo hazlo—

—Unos minutos antes de que llegaras le dije eso ¡Pero es difícil la mujer! No quiere que me arrepienta, es entendible he trabajo mucho para llegar hasta donde estoy. ahora que lo pienso ella tiene razón ¡Claro que la tiene! Luche contra los socios gordos para tener este puesto y ¿lo voy a dejar por una mujer?

—¿Qué sentiste al decir eso?— Se que no lo dice de verdad, me concentre en las estrellas y deje que el idiota se sintiera culpable.

—Mal, la extraño, nunca me había sentido así por una chica, ya sabes que me cuesta crear lazos de cariño hacia las personas, por ello no me importas— Solo rodee los ojos y prendí otro cigarro.

—¡Mi secretaria también se fue! ¡Que cómico! ¿No? Fue extraño, sentí que algo iba a pasar, la verdad es que esperaba una noche de pasión, no una carta de renuncia, la acepte demasiado enojado y cuando por fin la termine de leer la llame y le dije que se casara conmigo ¡Matrimonio feliz! Obviamente ella me rechazo y no dejo de sentirme extraño, siento como un vacío en el pecho, es como cuando pierdes tu virginidad, sientes que perdiste algo de ti, lo único puro que la vida te da, siento que perdí a la mejor mujer que he conocido...

—Espera— interrumpió Adrian con el ceño fruncido, el si es que imbécil, estoy seguro que el piensa que estamos hablando de la misma persona— ¿Cómo se llama tu secretaria?

—Julie— Respondí rápidamente — ¿Tu secretaria como se llama?

—Se llama Abril, ya lo había dicho ¿Me estás tomando atención?— dijo bastante melancólico .

—¿Quién se llama Abril? Que nombre más extraño-.

—Julie no es muy normal a mi parecer—.

—¡Okey! ¡Basta! Luego terminaremos enojados, así que ¡Basta! Debemos idear un plan, más bien dos planes "Conquistando a las secretarias en fuga" ¡Es un buen nombre!

—Eres un idiota inteligente, Creo que yo estoy más desesperado, Abril vendrá en una semana y debo saber que hacer, en cambio tu debes comenzar a buscar alguna idea de donde podría estar ¡No se cual de los esta más complicado!