De una vez y por todas, decido entrar a la casa.
Estaba todo lleno de polvo, por el tiempo abandonado que tenía, al parecer Tonny no ha llegado ya que he buscado en toda la casa y no lo he encontrado. Me siento en el sillón mirando el techo, pensaba en lo que me sucedió anoche, por qué Laura habrá hecho eso.
Fui interrumpido por alguien que ha abierto la puerta, me acordé de que escondía una escopeta debajo del sillón, la saco rápidamente y me volteo hacia la puerta, apuntándole al que abrió la puerta. Por suerte era Tonny que había llegado.
― ¡Casi te mato¡
― Tranquilo que yo solo estaba esperando que tu llegaras ya que no tengo llaves de tu casa, al parecer cambiaste el cerrojo de la puerta.
Lo miraba intentando odiarlo, pero se me hacía imposible, él era mi mejor amigo y a pesar de matar a mis padres, fue quien estuvo llenando ese vacío en mí.
― Me puedes decir qué harás con la foto que me tiraste en el piso, acaso piensas pasarme por muerto.
Eso no era lo que quería yo, pasarte por muerto sino matarte de verdad. Esa loca idea rondaba en mi mente después de escuchar lo que dijo. Le contesté:
― Necesito que me ayudes a encontrar a tu hermano y para eso él tiene que creer que estás muerto. Ahora bien ¿Sabes dónde está tu hermano?
― Sabía, ahora ya no sé, él es de esas personas que no están dos horas en un lugar, siempre está en movimiento.
― La última vez ¿Estaba aquí en Los Estados Unidos?
― Sí, cuando se dieron cuenta de mi traición en la Policía, él fue quien buscó las vías para sacarme de ese lío.
― Exactamente ¿Qué es lo que tu querías con la aceptación de tu hermano?
― Ser reconocido como él.
― ¿Tu hermano es el culpable de los asesinatos de las mujeres?
Me miró a los ojos y me dijo:
― Si, Wander.
Respirando bruscamente se agarra la cabeza Y con lágrimas en los ojos, suplica:
― Perdóname, Perdóname por todo el mal que te hecho, por todo lo que te hice pasar, por traicionarte... no te pido que me des tu confianza como amigo, sino que me perdones. Quiero agarrar a mi hermano, pero sé que eso no va a restablecer a tus padres y ni tan poco a las mujeres muertas, sin embargo, quiero hacer todo lo que está a mi alcance para atraparlo.
― Y si tantas ganas tienes por qué no agarraste y lo trajiste contigo.
― Tú crees que es tan fácil, él siempre esta con cinco hombres armados y bien entrenados, además a veces tiene uno o dos franco tiradores que lo cuidan.
― ¿Por qué quieres atraparlo?
― Porque el mató a nuestra madre y de eso me di cuenta ayer, ese hombre es un monstruo, no le importa matar por conseguir lo que quiere.
― Y cómo fue que supiste que me reuní con el tal Bestia Masiva.
― Me lo imaginé... Pero, además, los contactos de mi hermano en RD fueron los que me confirmaron la duda.
Si él supiera que me encomendó ese tipo.
Editado: 21.02.2020