Capítulo 4

Luego de escuchar el señor diciendo esto mis nervios se pusieron a mil, para mí llegar virgen al matrimonio había sido algo elemental ya que aunque haya tenido novios cuando querían llegar a otro nivel siempre paraba.

Pensando a mis adentros, solo podía pensar en mi mamá y en Carolina.

El hombre con rostro tapado me obligó a poner un conjunto de lencería con encajes, una pequeña abertura en medio de los senos, y unas mallas que trae junto, pensando me pregunté como este hombre con unos sesenta o quizá setenta años podía pensar en tremenda barbaridad, creer que podría siquiera hacer algo.

Esta cosa llamada por gente que es cerrada de mente “prenda” es realmente incómoda no puedo comprender  ni siquiera como mujeres pueden ponerse esto.

Solo cosas que realmente no pensé que me pasarían, estar en esta situación de todas las formas vistas posibles. Solo mis pensamientos son quienes me salvan un poco, al poder desahogarme aunque sea pensando.

Está pesándome el hecho de que no escapé a tiempo, y me atormenta cada segundo que pasa dándome como respuesta ser la única culpable de estar aquí. 
 

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Les pido una enorme disculpa por el capítulo corto, peeeero bueno espero que lo hayan disfrutado y disfruten el que viene.