Cree en mí

Salir es todo un caos, tantos flashes apuntando a mi cara, odio esto. Tantos reporteros con sus preguntas como ¿Por qué mataste a tu mejor amiga? ¿Cuándo vas a decir la verdad? ¿en realidad eres inocente? Me bombardean de preguntas y lo único que puedo hacer es llorar, personas que conozco y otras que jamás he visto me gritan cosas horribles

¡Asesina, basura, deberías suicidarte, porquería, vuelve a la cárcel!

 Tantas cosas que preferiría no haber escuchado jamás

Estoy camino a casa, no tienen más pruebas contra mí, pero siguen sospechando de mi historia, creen que mi coartada puede ser solo para cubrir el crimen, es entendible, pero me duele que sigan sospechando de mí. Nunca mentiría así y mucho menos a la policía, realmente tengo miedo de que esas personas vengan por mí y terminen su trabajo

Mi cabeza seguía doliendo tanto en ese momento y solo quería salir de ahí ya. No sé cómo, pero los oficiales lograron que saliéramos ilesos de esa multitud, mi madre no deja de mirarme por el espejo retrovisor durante todo el camino a casa, no paro de llorar, papá nos verá en casa dijo mi madre, pero no sé cuánto de verdad tenga eso, supongo que esta si es una emergencia para él, claro que te llamen para decir que tu hija es sospechosa en la muerte de alguien lo es. Odio mi vida

Siempre está en su trabajo, parece que ama más a su trabajo que a su familia, pero es bueno y cada vez que tiene tiempo hacemos cosas divertidas, suele ser mejor compañía que mamá que siempre habla de los mismos temas y se preocupa por cosas superficiales, papá suele hablar de muchas cosas interesantes. No tengo preferencia por ninguno de los dos, solo los amo eso creo. Realmente nunca podría decidir entre uno de los dos, papá nunca está y mamá parece no estar en casa

Al fin llegamos a casa y lo primero que hago es salir corriendo del auto cuando mamá se estaciona, en mi camino me encuentro a papá en la cocina, se ve tan cansado y preocupado, en realidad solo lo veo parado mientras sigo corriendo y subo las escaleras de dos en dos para llegar más rápido a mi habitación, no me molesto en poner seguro porque sé que mamá va a entrar, aunque le diga que no quiero que lo haga, siempre lo hace

Siento que mi habitación no es realmente mía. Es como una prisión en mi libertad, en las paredes están llenas de fotos mías junto a Hanna, esos momentos que no podré olvidar jamás, en mi mesa de noche está nuestra foto de cuando teníamos 6 años. Nos veíamos realmente ridículas con nuestros disfraces de Halloween, pero éramos felices, no hay una foto donde Hanna no sonría, ella era así tan alegre que lograba hacerme sonreír en las fotos, siempre he odiado mi sonrisa y eso no cambiará. Me duele el pecho y apenas puedo respirar bien

Mi único lugar seguro ahora se siente como una maldita prisión de la que jamás poder escapar, me meto bajo las mantas en busca de un refugio que se no voy a encontrar ahí. Como si un par de brazos invisibles me esperaran ahí, mamá entra poco después arrastrando los pies, no se molesta en tocar como siempre, siento su peso al sentarse en la esquina de la cama y me hago bolita, pero no dice nada, tal vez espera que sea yo quien lo haga y eso no va a suceder, ahora lo menos que quiero es otro interrogatorio. Debería saber como estoy

—Tenemos que hablar —es lo primero que dice después de ver que no voy a decir nada, mamá podrías irte y volver en otro momento, quiero decirlo, pero no tengo fuerzas para pelear— Luna esto es importante y bastante serio, deja de llorar un momento — me enfurece esa actitud que tiene siempre pero no diré nada, ya me siento lo bastante mal para preocuparme por su actitud

—Elena no es el momento, está cansada y lo bastante mal para hablar de eso. Deberías dejarla descansar un rato ya tuvo suficiente —Es la voz de papá, no me di cuenta en qué momento entró, pero se lo agradezco

—¿Entonces cuando? —pregunta molesta— No voy a esperar hasta que un grupo de policías entre y me diga que mi hija irá a la cárcel, solo quiero entender que sucedió —no puedo ver su cara, pero sé que está enojada con papá, cada vez que él trata de ayudarme se molesta y termina mucho más enojada

—También estoy preocupado por ella, debe descansar y después nos va a contar lo que sucedió, está en shok ahora mismo, acaba de perder a su mejor amiga y salir de una sala de interrogatorio y lo primero que haces es interrogarla tú también —mamá se levanta furiosa, lo sé porque la he visto muchas veces, papá se queda ahí parado al lado de mi cama, siento su mirada clavada en mi

Levanta la sabana que uso de escudo y me mira triste, se sienta a un lado de mí y me siento para abrazarlo, es algo que siempre hace cuando estoy triste, es el único en mostrarme algo de empatía ahora que estoy destruida, siento su aroma dulce que se mete en mi nariz, amo su olor, yo lo llamo olor de la confianza. No lo dice, pero está sufriendo al igual que yo

—Está bien cariño, todo estará bien, sé que no lo hiciste —eso es lo que había querido escuchar en todo el día, después de tantas cosas horribles es como una pequeña luz de esperanza, pero no puedo soportar este dolor, como si me asfixiara todo en mi queda vacío, perder a alguien que amas duele como el infierno, nunca había sentido esta opresión en mi pecho. Cuando la abuela murió no sentí esto— yo creo en ti

—Solo quiero volver el tiempo atrás — es lo único que digo y él me abraza más fuerte, he llorado frente a papá en otras ocasiones y nunca me ha juzgado por parecer débil al contrario de mi madre, suele decirme que llorar es la cosa mas valiente que puedo hacer al soportar tanto— Hanna no lo merecía

No sé en qué momento pasó, me quedé dormida en sus brazos mientras lloraba, acabo de despertar y lo único que veo es oscuridad, trato de abrir los ojos, pero tengo forzarlos, no creí que podría dormir en esta situación, pero estaba tan cansada que no podría haberlo evitado, me siento sobre la cama y enciendo mi lampara para poder ver un poco y veo nuestra foto, mi corazón se encoge al ver su cara. Desearía que todo fuera un mal sueño