He estado sin soñar por la confusión, porque no sé cómo me siento.
Te he estado despidiendo desde hace tanto tiempo.
Algunas veces la mente lo sabe, pero el corazón lo detiene.
Hallamos un camino, conquistándolo en desiguales direcciones.
El alba ha llegado y tengo que irme,
No tiene sentido rompernos en pedazos,
Prevaleciendo para no sentirnos solos.
No sé por qué nos rompemos tan fuerte.
Algunas veces, nos disfrazamos una realidad que no es perpetua.
Pero si somos capaces de dejar entrar el amor,
Somos lo suficientemente fuertes… para dejarlo ir.
Déjalo ir, déjame ir…
Si miro hacia atrás, al principio, siento que todo fue verdad.
Todavía un cariño en mi corazón, gratificando un gran amor…
Sin acaparar lo que ya está quebrado.
Empezamos mal y creo que lo sabemos…
Esperamos demasiado para despedirnos.
¿Quién dice que la verdad es perfección después de todo?
¿Y quién dice que el amor debe rasgarse cuando nos derrumbamos?
¿Qué hay detrás de una lágrima?
¿Qué hay detrás de una despedida?
Solo nosotros dos, solo nosotros dos, tenemos las respuestas…