—¿Por qué tengo que sentir algo por Simón? ¡Simplemente, no puedo olvidarte! Escuchar decirme esas palabras me hirió en el alma. ¡No puedo dejar manejarme! ¡Lo único que tengo que hacer es vengarme! —dijo en voz alta para sí misma.
En el Garaje se encontraba Simón. Pensando una y otra vez en Ámbar. Entre tanto, comenzó a cantar.
Olvidarte,
¿Cómo te puedo olvidar?,
¿Cómo sacar a alguien que se quedó clavada en mí?,
Corazón que por mas no lo puedo sacar,
¿Cómo perdonar a quien me hizo tanto daño?
Que pensé que había cambiado,
Por más que trato, no puedo,
Eres la que más me impulsa a seguir buscándote,
Y tratar de cambiarte,
Y que me demuestres que lo puedes hacer,
Pero me volteo y me doy cuenta, que solo es una ilusión,
Y que nunca lo harás…
—Simón, ¿eres tú el que está aquí?
—Sí, Mónica. ¿Qué haces aquí?
—Solo pasaba por aquí y te escuche cantar. La canción es muy bonita, supongo que es para alguien especial, ¿verdad?
—No es importante.
—Está bien. Pero, sabes que puedes contar conmigo, ¿verdad?
—¡Gracias, Mónica!
—Bueno. Me voy, te veo mañana.
Mónica se alejó y pensamientos rondaron en su mente. Y comenzó a susurrarlos.
—¿Quién será aquella chica de la que está enamorado, Simón? ¡Sin duda es alguien muy importante! ¡Solo me queda desearle felicidad!
¡Espero que les haya gustado el capítulo!
La canción la invente. No es de Soy Luna.
Bueno. Besos y abrazos. Se despide, SamaraAlejandra12.
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