—¡No puedo creer que él te haya dejado aquí! ¿Estás bien?
Asustada y perdida, lo único que se me ocurrió hacer fue llamar a Dick. Él vino enseguida.
—Sí. Gracias por venir.
Subo a su auto, que huele a él y se siente tan confortable, calmando al instante el huracán que se arremolina en mi interior.
—En la escuela todos creen que Jason te secuestró.
Eso es lo que él dijo que dirían. Es un idiota, pero no puedo evitar sentirme mal por él.
—¿Por qué él hace estas cosas?
Por más que lo intento, no logro entenderlo.
—Ya te lo dije, le gusta fastidiar. No me extrañaría que ya esté en casa, riéndose como un idiota.
Realmente eso espero. Quiero creer que Jason es sólo un chico imbécil, el más imbécil que he conocido y que ahora está a salvo en su lujosa casa.
"Un caro y lujoso orfanato".
Pero me resulta muy difícil.
—Quiero que me avises en cuanto sepas algo de él, por favor, Dick.
Él sonríe.
—Claro. Tiene suerte de que te preocupes así por él.
No. No quiero que Dick se haga una falsa idea de la situación, no puedo permitirlo.
—Jason es mi amigo. Yo... Me preocupo por él porque es mi amigo, nada más.
¡A mí me gustas tú!
Quisiera decírselo, pero aún no es el momento y menos con todo lo que está pasando.
—¿De verdad? Por un momento pensé que eran algo más. Sé que a Jason le gusta una chica de la escuela... Creo que ya hablé demasiado.
Se calla, apenado, pero ya es tarde.
¿Quién podrá ser esa chica?
Dick me deja en el mismo edificio donde le indiqué antes y vuelvo a tomar un autobús hasta mi casa.
Está vacía y subo a mi habitación, lanzándome sobre la cama. Tengo un nudo en la garganta y siento que mi cabeza va a explotar.
Ayer fue un día tan feliz y mágico y hoy ha sido una verdadera pesadilla. No entiendo cómo una persona puede provocar en mí sentimientos tan contradictorios.
Creo que también he comenzado a enfermarme.
~🦇~
Mi tía hace un verdadero escándalo cuando llega.
—¡Me llamaron de tu escuela diciendo que te habías fugado con un chico!
Con rapidez, me inspecciona por todas partes. Estoy bien, sólo he llorado.
Mucho.
Intento explicarle lo que ocurre, aunque ni yo misma lo entiendo.
—Tal vez, ese muchacho consume drogas. Cariño, no creo que sea buena idea que te juntes con él.
¿Ese es su consejo?
Esperaba algo mejor, pero qué más puedo pedir. Aunque se esfuerce, ella sólo es mi tía.
No es mi madre.
~🦇~
—Tienes fiebre, no podrás ir a la escuela. Hablaré al trabajo para decir que tampoco iré.
La convenzo de que estaré bien y de que no es necesario que se ausente por mi culpa. Ella se va, llena de preocupación, tras hacerme prometerle que la llamaré para reportarme.
La verdad es que me siento fatal. Supongo que mojarme en la lluvia me pasó la cuenta, pero sé que no es lo único.
Somatización.
Es cuando lo que pasa en tu mente, comienza a afectar a tu cuerpo. Suena a locura, pero es ciencia.
La última vez que hablé con Dick anoche, me dijo que no sabía nada de Jason, que no había vuelto a su casa.
Todo se pone cada vez peor y no puedo hacer nada para evitar que me afecte. No sé en qué momento Jason comenzó a importarme tanto.
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Editado: 27.10.2020