97. NamYoon

Después de la cena con los chicos y las novias de estos, la abogada, su hijo y yo nos vamos a dar un paseo.

El conductor que nos ha traído nos lleva de regreso a la casa de la chica, sin embargo, me atavío con la mascarilla y nos apeamos del vehículo para caminar hacia el parque que está enfrente de la vivienda.

WooJin corre hacia el tobogán, sube las escaleras con rapidez y se tira con una gran sonrisa de oreja a oreja que hace que sus ojos sean aún más rasgados.

La chica y yo nos sentamos en un banco, observándolo, y no puedo aguantar más la pregunta que se forma en mi garganta.

—¿Cuándo se lo vamos a decir? —le inquiero en un susurro intentando mantener la distancia con ella.

—¿Qué te parece ahora?

—¿Ahora? —me sorprende que sea tan rápido.

—Ahora. ¡WooJin, ven! —la chica lo llama y el niño corre hacia nosotros con la respiración agitada por la carrera.

—Dime, mami.

—Ven, siéntate aquí —lo coge para sentarlo entre nosotros y lo abraza—. Tenemos algo que decirte.

—¿El qué? ¿He hecho algo malo?

—No, no. Claro que no. Verás… Tu madre y yo, bueno… Hace unos días que ella y yo… —empiezo a hablar, pero estoy nervioso y acabo ninguna frase.

—Cielo, NamYoon y yo somos novios —termina la chica por mí para que el pequeño lo comprenda.

Veo que sus ojos se abren sorprendidos por la noticia, me mira durante unos segundos que se me hacen eternos y salta sobre mí gritando de alegría para abrazarme.

—¡Bien! —exclama el niño rodeando mi cuello con sus brazos.

—Cielo, lo vas a ahogar. Tienes que guardarlo en secreto, ¿de acuerdo? Nadie puede saberlo —le dice su madre intentando quitarlo de mi cuello.

—¿Por qué? ¿No puedo decírselo a los abuelos? —se queja quedando sentado en el banco un poco decaído.

—Sí, a los abuelos sí. Solo a ellos, aunque me gustaría que nos dejaras darles la sorpresa nosotros.

—Vale. Vamos a jugar los tres —nos coge las manos y nos guia hasta el tobogán para lanzarnos los tres juntos.

Me despido de la abogada y su hijo dentro del coche, espero hasta que entran en la casa y le digo al conductor que ponga rumbo hacia la urbanización.