La luz parpadeante de rojo del hospital me tenía hipnotizada, solo cargaba con las cosas que alguna vez fuero de la chica que era mi mejor amiga, las abrace aún tenían su perfume.
-Señorita vine a ver a mi hija su nombre, es Oriana Cruz sufrió un accidente en el cruce de Lot.
-O señora esa chica estaba con ella.
Solo pude ver, como pueden hacerme esto , cargar con este peso y se hacen llamar profesionales, vi a la madre y padre de Ori correr en mi dirección , como puedo darles la noticia, no puedo , solo los mire, y entre lágrimas , m i voz se negaba a salir.
-Eri donde está mi hija, por que lloras.
-Erika que paso, dinos no te calles.
-¡¡Aaaaa!! yo no.
Solo negó con la cabeza y les di sus cosas, su madre pego u n grito desgarrador mientras su padre la sostenía para que no cayera al piso.
-Porque por que tenía que morir.
-Lo siento.
-¡¡Tu!! De seguro fue por ti, esto fue tu culpa lo único que haces bien es arruinar la vida de los demás, de seguro la que debía morir eras tú pero mi hija te ayudo, como siempre, porque tenías que vivir.
-Cariño basta, ella no tiene que ver fue un accidente.
-Un accidente, esto es un accidente la única que estuvo con ella en sus últimos minutos fue ella, y es un accidente, estaban juntas, como solo ella pudo salir ilesa y el resto de personas están bien, es injusto...
-Basta solo tranquilízate a mi también me duele es mi hija también...
-Ella dijo que los amaba, y que les pedía perdón por todo. Lo siento.
-Eri por favor solo retírate, ya hiciste bastante.
-No tus disculpas no harán que regresa, solo dame las cosas de mi hija.
-Familiares de la señorita Cruz.
-Nosotros díganos doctor, lo que esta mentirosa nos dice es falso no, mi hija no está muerta.
-Lo siento señora, pero ella falleció, sé que esto es repentino pero tengo que discutir algo grave, ella estaba embarazada, tenían conocimiento de esto.
-No.
-Nuestra hija nunca nos dijo algo.
-Talvez usted señorita sabía algo.
-Yo no lo sabía ella solo dijo que tenían algo importante que decirme.
-¡Aaaaaaa!, ¡esto es tu culpaaa!, no había necesidad de ir por ese cruce, solo si tenían que ir a tu casa, tú la mataste, tú me quitaste a mi hija, eres igual a tu madre, tú y ella son lo peor deseo que desaparezcan.
Esas palabras me cortaron el alma, me dolía tanto o más que a ellos el que Ori muriera pero solo me atacan, mi mente se desconectó de mí, cuando reaccione tenía mi labio partido y estaba sangrando en el piso del hospital.
-Cariño, se merece eso y lo que le paso a Ori, de seguro hasta está feliz la oí decir que envidiaba a mi hija de seguro ella la mato.
-Cariño.
cuando reaccione y vi a mi alrededor note que había más personas del accidente hay , solo veía miradas de odio, amenaza , tristeza y rostros que me culpaban de todo, me estaba rompiendo o algo así sentía que me pesaba todo escuchaba sus murmullos y cosas malas sobre mí ya estaba acostumbrada pero esta vez tenía que ver con Ori no con migo , solo me pare y tome mis cosas, vi que unidos policías se estaba acercando y comencé a irme hasta que oí al padre de Ori culparme de todo y ellos salieron corriendo detrás de mí, yo solo hui y no pude darles el mensaje de Ori ni explicar que paso..
-Todo termino para mí, ahora que va a lloverme abandonaste no, si es que existes me abandonaste, si tuviera tú mismo poder, no dejaría que esto pasara, eres cruel, odio a aquel ser que se nombra como dios.
Cuando pasaba por una calle un periódico se enredó entre mis piernas, lo vi de reojo y note que traía la fecha de mañana, solo lo guarde y fui a casa, incluso mi celular se perdió en la conmoción, no quería saber nada, la lluvia aunque era fuerte y me mojo, no era suficiente para borrar lo mal que me sentía, solo me deje envolver por esa fuerte lluvia.
-Volví...Es verdad estoy sola, no sé ni por que llamo si estoy solo.
Me duche pero ni aun así me sentí mejor, solo llore hasta quedarme dormida, cuando desperté era noche no encendí las luces solo, mire al vacío y oscuro techo, me sentía vacía, encendí las luces e intente hacer tarea pero no podía hacer nada, cuando saque mis cosas vi que tenía el periódico y los anteojos de Ori, con su liga del cabello.
-Ori perdóname.
me recosté en el escritorio, comencé a leer el diario para distraerme, y vi una noticia,, decía que mi cada estaba echa cenizas por un incendio, de seguro , era una broma, solo lo deje hay mi teléfono comenzó a sonar que le diré a mama a hora, intente levantarme pero una gran fuerza me tiro al suelo y no me dejaba respirar de repente se cortó la luz y una gran silueta apareció adelante mío, una húmeda respiración y fétido olor me invadieron sentía que me derretía por dentro, comencé a toser y vi que era sangre, estos no eran ladrones que pasa aquí.
Pude ver algo como un humo negro rojizo alrededor de esa persona adelante de mí, hablaba en una lengua extraña , sus manos eran muy grandes, me sujeto y me apuñalo con algo afilado en mu estómago, si venía a matarme , de todas formas no podía defenderme, talvez era mejor morir, era lo que todos quería.