Me he tirado toda la noche pensando en lo de Lucas. Adoro a Alex y como me trata pero con Lucas es distinto, cada vez que lo veo es como si veinte mil elefantes corrieran por mi estómago. Las mariposas se quedan pequeñas, muy pequeñas.
Me pongo mi falda de tubo, mi camisa blanca y la chaqueta a juego con la falda, salgo de mi habitación mientras Snoopy está dormido en mi cama tan tranquilo. Que envidia.
Me preparo mi desayuno mientras escucho las noticias, que para variar no dicen nada alegre, ver las noticias es sinónimo de depresión. Antes de poner mi culo en la silla me llega un mensaje de Alex:
"Preciosa, ¿quedamos esta noche para ir al cine?"
Rápidamente le contesto con una sonrisa:
"Por supuesto precioso"
Termino mi desayuno, cojo el bolso y me voy a la oficina. Nada mas llegar, me encuentro una carta encima de mi mesa. La abro con una sonrisa que se borra en menos de un segundo.
"Hola cariño, espero que tengas una jornada de trabajo increible y que pienses en mi. ¿Quedamos esta noche para ir al teatro?"
Cabreada, la rompo y la tiro a mi papelera. ¿¡Pero que se ha creído!? Creerá que después de lo que ha pasado va a ser todo tan fácil.
Miro la agenda y lo que me toca hacer hoy que para variar es muchisimo papeleo mientras mi jefa está haciéndose las uñas.
Media hora después estoy tan cansada de papeles que voy a la máquina del café que hay en la planta, que mas que café es aguachirri. Estoy tan concentrada en que la estupida máquina me haga caso que no me doy cuenta de lo que pasa alrededor hasta que me doy la vuelta y me encuentro a Lucas mirándome fijamente con la carta en la mano derecha.
Evitándolo le rodeo y me voy a terminar mi trabajo a ver si puedo llegar a casa pronto y arreglarme. Se sienta en los sillones que hay justo delante de mi mesa y sigue mirándome.
Harta de él, le aguanto la mirada mientras me levanto para ir al despacho de mi jefa a dejar los papeles que tiene que revisar. Una vez dentro, dejo los papeles en la mesa y al darme la puerta veo a Lucas directo hacia mi. Con cara de susto pienso en las posibilidades que tengo de escapar de aqui pero antes de que llegue a la puerta, me agarra el brazo y me da un besazo que hace que me tiemblen las piernas. Justo cuando estaba disfrutando entra la Pitbull y se queda pasmada mirando.
"¿Pero porque todo me pasa a mi?"