Han pasado dos semanas. Dos semanas en las que toda mi familia me ha llamado despues de conocer la noticia de la boda.
FLASHBACK
Casa de la madre de María, hace una semana.
- Enana, ¿estas segura de esto?- Dice mi padre con su cara de preocupación.
En ese momento entra mi hermano mayor por la puerta con cara de asesino.
-¡María! ¡María!- Dice gritando de tal manera que creo que le han escuchado hasta en Japón.
Salgo de la cocina junto a mis padres mirándolo asustados.
-¿Que pasa hermanito? ¿PORQUE GRITAS?- Digo imitándolo.
-¿Es verdad que te casas? ¿Con quien? ¿Porque no lo conozco y ya tengo ganas de matarlo?
-Tranquilo hijo, esta noche tenemos una cena para conocer al maravilloso novio de la niña. Relajate.- Dice mi madre con cara de "Deja de gritar".
FIN DEL FLASHBACK
Todavia me acuerdo de esa noche que llevé a Alex a casa de mis padres. Solo de pensarlo me dan escalofríos.
Mi madre mas que encantada con él, de hecho mas de una vez pensé que se tiraría a por él. Mis hermanos lo querían asesinar, pero cuando me vieron mirándolos con cara de "Cuidado que muerdo", no atacaron. Mi padre estaba intentando calmar las cosas, sacando temas de conversación que solo yo seguía.
Alex intentaba integrarse como podía pero acabó ganándose a mis padres (a mi madre la tuvo conquistada desde que la miró). A mis hermanos iba ser mas complicado pero no imposible.
Estoy haciendo el desayuno para mi maravilloso novio, que sigue mas dormido que un muerto, cuando recibo un mensaje:
"Tenemos que hablar. Te espero en el parque de debajo de tu casa. Lucas"
Hago como si no hubiera visto nada y sigo haciendo el desayuno. A los 15 minutos me suena otro mensaje:
"María, baja ya o me planto en la puerta de tu casa"
Decido bajar después de comprobar que Alex sigue dormido, me visto con un chándal y me hago un moño simple de esos que te haces cuando te quedas un domingo en casa sin hacer nada.
Bajo y me encuentro a Lucas andando de un lado a otro con cara de enfado.
-¿Que quieres Lucas?- Digo con voz cansada.
-¿Como que te vas a casar? ¿Desde cuando conoces al gilipollas ese?-Dice gritando.
-Vamos a ver, 1º No te importa. 2º No te importa. A mi no me grites que te meto una hostia que te vuelvo la cara.
-Perdona, no quería gritarte pero entiéndeme estaba ilusionado pensando algo para volver a conquistarte y me encuentro con que te vas a casar con el puñetero policía que se metió por medio.
-Mira te lo voy a decir muy clarito, olvídate de mi y mañana presento mi carta de despido.- Digo muy digna y me voy a mi casa con mi novio maravilloso.
Cuando llego a casa, me encuentro a Alex terminando el desayuno que dejé y al verme deja lo que esta haciendo y viene a darme un besazo que quita el sentido. Desayunamos tranquilamente y nos vamos a pasear a Snoopy.