Alessio
5 meses atrás
Rouses Alessandretti fue vista en Singapur esta tarde junto al tipo misterioso, la princesa que ha estado apareciendo y desapareciendo, estuvo en una fiesta muy concurrida….
—¿Rouses no está en San Francisco también? —Ian se sentó a lado de Emilia
—Rouses está de viaje de negocios —Hablo Arabella —Dudo que mi abuela le permita estar en fiestas y con chicos
—Pero siempre tiene esas fiestas al final del año, ¿No? —dijo Emilia
—Son rumores —Responde Arabella
—Dicen que sus fiestas son las más desenfrenadas. No he tenido la oportunidad, pero espero muy pronto ser invitado
—Hay por favor, como si fueran la gran cosa —dijo Emilia
—Es que son la gran cosa —Indico Mónica
—Rouses no se anda con pequeñeces, siempre actúa a lo grande. Nunca que se conforma con simple, ella nació para recibir aplausos —Interfiere Arabella
—Y aunque algunos no le tengan miedo, hay que hacerlo, tu prima ha demostrado que a pesar de solo tener diecisiete años —Hizo comillas con sus dedos. Aclaro Ian —Puede manejar mejor que sus padres, tremendo imperio, créeme sus medidas, han dejado con la boca abierta a las personas más experimentadas del negocio
—Con todo respeto, pero yo sí le doy a tu prima y no amistad. —Emilia lo golpeo —¿Pero qué te pasa? —Los demás se rieron —Es verdad no me digas que tú no lo harías, vamos, esa chica es capaz de hacer que a un gay se le pare y que las chicas se convierten en lesbianas
—Si la conociera, créeme que no habría desaprovechado de probar esos labios, de los que todo el mundo habla —Lo anima Mónica a mi lado —Dicen que tiene un sabor diferente para cada persona, y sin dejar de lado que tiene unos ojos muy lindos
—Ves ella entiende —Ian le indica a Emilia —¿Quién ya la ha besado?, levante la mano —él lo hizo nadie más —¿Tú no lo has hecho Arabella?
—Estás loco, es mi prima, y tú, ¿Cuándo lo hiciste? —Emilia lo miró, estaba roja
—La besaste ¿Cuándo? —Pregunto Emilia, él solo se rio
—No significo nada, claro que después de hacerlo ella me pegó, realmente son adictivos, y fue cuando estuve en Sicilia, —La miro —Vamos Emilia, es como si yo te reclamara, por acostarte con Alessio cuando no estoy —Ella se puso roja —Fue algo frío para ella no significo nada. Además, muy pronto se casará.
—La presentación de su prometido no será hasta el otro año. Supongo que será uno de la lista que haya dado mi abuela
Me puse de pie y salí al balcón, me arrimé al barandal, mi celular sonó. Antoni indicaba que Rouses ya no estaba en Singapur y que iba sola. Unas manos sujetaron mi abdomen y me beso en el cuello.
—Oh, labios de azúcar, no te pongas celoso, tus besos deben ser igual de dulces que los de ella. —Me dijo al oído, yo solo miré a las olas que chocaban con las rocas. —Es una pena que tu corazón aún tenga dueña, esa chica debe valorar lo que tiene, y no me digas que no hay nadie, porque lo veo en tus ojos. Crees que no me doy cuenta cada noche que te levantas y regresas en la mañana, o cuando me besas desearías besarla a ella. —Me conocía —No te preocupes caramelo, yo hago lo mismo contigo, solo que mi amor ya no está en este mundo — nos quedamos callados
—¿Cómo lo haces? — dije al fin y ella se puso alado mi y se abrazó a sí misma, sacó un cigarrillo de su bolsillo trasero, lo prendió y me lo extendió — ¿Cómo se puede vivir sin la persona que amas? ¿Cómo puedes verla todos los días y simular que no pasa nada?
—Caramelo, créeme, eso es lo más difícil, sobre todo cuando la persona que amas es tu cuñado, pero hay gente como tú y yo que somos unos idiotas y nos sacrificamos por la felicidad; si realmente la amas serás feliz si ella lo es —me abrazó y yo a ella —Algún día me dirás, conoceré a la chica —sonreí —La mataré créeme
—No, no te lo diré —dije sonriendo
Alessio
Presente
El dolor me consume, sus palabras son como cuchillos que me atraviesan, trato de comprenderla por su enojo, siento ira contra su abuela, quien regresa.
—¿Ya se fue?
—Sí —Habla Victoria —¿Por qué la has puesto en contra de Arabella?
—Por la misma razón por la que Eros se fue
—¿Por qué lo ha hecho? —Pregunto —¿Qué gana usted con esto?
—Rouses estaba decaída, había tenido cinco intentos de suicidio —La miro —Necesitaba un poco de amor, traerlo a usted fue algo estratégico ¿Creyó que lo pondría cerca de ella sabiendo por lo que siente?
—Eso no le daba derecho a decirle algo que no le competía
—Me competía mucho, más cuando esto se estaba saliendo de control. Rouses necesita tener los dos pies en la tierra, no estar pensando en las mariposistas. Ella es una princesa y usted es su empleado, eso pasa solo en las películas. Será mejor que se aleje de mi hija, o podrá perderlo todo.
—Ya lo he perdido todo, acabo de perder a su nieta —Declaro con furia —Puede quitármelo todo si quiere, no me importa, me sentiría el hombre más rico del mundo solo con tenerla a ella. —Sonríe con superioridad —No volveré a dejar que la trate como lo hace, protegeré a su nieta y lucharé por ella. Amo a su nieta y si por mí fuera me la llevaría lejos y la regresaría solo cuando me haya dado un hijo para que no nos separe.
—¿Es una amenaza?
—Tómelo, como quiera, pero me casaré con su nieta, con o sin su bendición. La amararé hasta que deje de respirar
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Editado: 27.05.2024