The cartoon boy

Capítulo I

Estaba ahí, como siempre lo está en todas las mañanas, sentado en la última banca del salón, en donde podía ver desde la ventana de a un lado todo lo que ocurría desde tempranas horas en la ciudad, claro porque estábamos en el último piso del edificio más alto de la escuela.  


Algunos decían, que él nunca había tenido nada que ver con ninguna chica porque no satisfacían sus gustos, algunos otros decían que no salía con chicas de su edad y que por eso chicas universitarias lo buscaban a menudo, y a una pequeña parte de personas no les interesaba en lo absoluto, nada de lo que tuviera relación con él y con su vida. Era común verlo sentado con sus audífonos puestos, siempre solo durante la clase, sin cruzar ni una sola mirada con nadie, y aunque tenía el perfil de un chico desobligado y despreocupado, increíblemente era todo lo contrario, era el chico con mayor rendimiento escolar, el mejor en cualquier deporte e inclusive tocaba más de 3 instrumentos, entre otras cosas. Cuando un trabajo en equipo se presentaba, nunca se reunía con los otros, simplemente entregaba su parte por separado, solo eso.  


Rumores acerca de este peculiar chico rodeaban toda la escuela, acerca de las fiestas a las que se supone que asiste, las novias que ha tenido y a las chicas que ha rechazado, también se mencionaban a quienes estaban a un lado de él cuándo tiene tiempo libre, siempre eran 2 amigos, que por obvias razones siempre estaban ahí, e igual que él, cada uno de ellos tenía su propia fama. 


Cuando oyes a las chicas hablar de él en los pasillos, siempre escucharas que lo llaman “the cartoon boy” o en español “El chico de historieta” debido a que es como el típico protagonista de las historias de amor, en donde es frio, arrogante y ninguna de las personas puede negar que aquel muchacho tenia todos y cada uno de los requisitos para ser aquel protagonista: alto, delgado, pero eso no quitaba el hecho de que tuviera figura masculina, el cabello negro con un corte típico de manga. 
Lo curiosos de todo esto, es que todo cambió cuando me involucré en su vida, ese no era mi plan inicial, pero, a si se dieron las cosas y ahora es difícil de alejarse de una persona como el, descubrí todo aquello que otras personas no sabían de él, y aunque mi historia parezca cliché, no me importa, mientras cuente la verdad de como es el cartoon boy. 


… 

—¿En qué estás pensando? No me digas que de nuevo estas pensando en el de allá. — Una chica de cabello por los hombros y una tez un poco más oscura que la de su amiga comenzó a hablar. 
—¿Pensando en quién? ¿Yo? No entiendo de que me estás hablando, eh, yo estaba pensando en el examen de biología que hoy presentaremos, ¿no estas preocupada? No he logrado que nada de lo que estudiamos hasta ahora se quede en mi memoria.  
—¡Y eso no pasara si sigues matando el tiempo viéndolo desde esta banca, si tienes ganas de hablar con él, tan solo ve y háblale! No entiendo porque tienes que verlo desde esta perspectiva ¿tan difícil es? 
—Es la cosa más difícil que he tratado de hacer, ya saben lo que dicen, el no habla ni con la chica más popular de aquí ¿porque el hablaría conmigo? — Una bella joven comenzaba a ponerse nerviosa al recibir tal cuestionamiento, podríamos describirla de esta manera: la nariz mediana; la boca pequeña; sus dientes eran casi perfectos y de un color blanco, el color de sus ojos era de color café claro, un buen color para acompañar aquellos labios de un tamaño moderado, con una tonalidad roja como si estuviera degradándose el tinte; su cabello estaba por debajo de sus hombros un poco ondulado y de un color muy claro pero por supuesto que no era un color rubio más bien era una tonalidad de castaño que muy pocas personas poseían.   

—No entiendo desde cuando él te empezó a importar, no sé qué es lo que pudo causar en ti que tuvieras un gran interés por él, cuando antes lo odiabas y ni siquiera querías pronunciar su nombre ¿Por qué ahora eres así? 
—No es nada del otro mundo, es solo que me di cuenta que estaba haciendo un mal prejuicio de él, no podía criticarlo sin saber lo que le sucede ¿No crees? 

El chico se quitó uno de los audífonos y giro un poco la cabeza posicionando su mirada en aquella chica que desde la banca de enfrente lo miraba con una sonrisa ¿Por qué ella estaría mirándolo de esa manera? Le parecía extraño que fuera la primera que lo miraba con tanta seguridad a comparación de las demás chicas que esperaban una mirada de aprobación de su parte, ¿Por qué ella era diferente? No quería averiguarlo el mismo, honestamente y pensándolo bien le provocaba un poco de desagrado el hecho de relacionarse con ella. Así que cuando cruzaron miradas el simplemente se dedicó a ignorarla y volver la vista al punto de donde estaba la ventana. 
Mientras tanto ella tenía tantas cuestiones en su cabeza, no es que estuviera enamorada del chico solo por su físico, al parecer lo que a ella más le llamaba la atención era su frialdad, raro ¿no? No es que le gustara el hecho de ser ignorada, simplemente, era que cada vez que lo veía y trataba de relacionar todos esos rumores que se contaban por lo pasillos, no encontraba parecido o similitud alguna, para ella esos chismes no la convencían como para mantenerse alejada de él.  
Su amiga por otro lado la veía extrañada, era demasiado rara la situación por la que estaba pasando su amiga, sin embargo, solo tomo un gran respiro profundo, la miro y se levantó de su asiento. 
—Hoy saldré a comprar algunas cosas para mi armario ¿Por qué no vas conmigo? 
La chica castaña la miro con una gran sonrisa, mientras guardaba sus plumas en el estuche 
—Sabes que odio ir de compras Hana, no creo que sea lo mejor para mí, pero mañana me cuentas como te fue en tus compras.  

Hana la miró desanimada, tomó sus cosas y con un gesto amigable, solo se despidió de su ella, los demás chicos del salón estaban por irse por completo, solo quedaban algunos cuantos y él.  
Mel estaba esperando a que esa mínima cantidad de compañeros salieran del salón para que ella pudiera tener ese momento a solas con él y por fin después de tanta espera pudiese hablarle.  
Después de algunos momentos el ultimo chico había salido del salón, Mel no se había percatado de esto, pues había decidido que mientras los restantes salieran, ella estaba dibujando un poco en las últimas páginas de su libreta de idioma, por lo que no se percató de esto, hasta que el chico con el que tanto quería hablar, se levantó de su asiento provocando un ruido que hizo que mel saliera de sus pensamientos, dándose cuenta que estaba saliendo del salón sin decir ni una palabra, ella rápidamente tomos su mochila y como pudo guardó su libreta y demás. 
Tan rápido como pudo, salió del salón buscando al chico para poder hablar con él, y así fue, lo vio un poco más adelante que ella, así que camino lo más rápido que pudo para alcanzarlo  
La chica tenía en la mano un lapicero de tinta azul que serviría como el pretexto perfecto para que ella pudiera establecer una platicar con él. Cuando llego hasta en donde estaba, tocó un poco su hombro para llamar su atención, por lo que el chico volteó y la miró sin mucha importancia.  
Era ella, la chica de la primera banca que regularmente lo observaba, pero nunca le hablaba, ¿Le debería de dar importancia? Claro que no lo haría, ella era una chica rara, además que no se acoplaba a ninguno de sus gustos, ¿Por qué lo estaba molestando? 



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En el texto hay: juvenil, escolar, romance

Editado: 24.02.2019

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