Capítulo 8- Encuentros

El sol se iluminó pronto en el cielo, trayendo nuevamente el brillo y el calor sobre La Gruta, Liria despertó aún con los ojos pesados oyendo desde su balcón un incipiente sonido que se colaba hasta ella, desperezo todo su cuerpo y se dispuso a empezar un nuevo día colocándose uno de sus vestidos favoritos de color aqua que la hacia lucir igual de bella que sus hermanas las sirenas, salió fuera llevándose la sorpresa del entrenamiento matutino que se disputaban Noah y Nehuem, realmente se los veía contentos e incluso dialogaban algo que no llegaba a entender. 

-Parece que ambos están muy alegres hoy. Se sentó junto a Horiamy recostandose en su hombro disfrutando del desayuno matutino.

-Parece que sí, quieres  ir de paseo conmigo después de que termines. Ella mordió la manzana y asentó con una amplia sonrisa dispuesta a ir a donde quisiera.

Poco a poco las jóvenes aparecieron  dispuestas a iniciar su nueva jornada, Cala se acomodó junto a la hija de Poseidón viendo la cara de absoluta felicidad de Noah al tener un compañero.

-Vaya si parecen mellizos, como si hubieran compartido la misma matriz. 

-Es lo mismo que acabo de decirle Horiamy, nuestro hermanito está tan contento, me siento muy feliz por él.

Ambos soltaron su espada con el corazón acelerado y una gran expresión de satisfacciónen su rostro.

-Rara vez digo esto más que a mí, pero eres una maldita plaga, no te rindes nunca.

Sus ojos color miel se alegraron dibujando una encantadora sonrísa en sus labios.

-Que bonito halago, tú tampoco te quedas atrás admito  que me lo vi un poco difícil hace un rato. Él joven curvo sus ojos con un tono de picardía imposible de esconder.

-Sigue así y seguro Coraly podría interesarse por el segundo mejor guerrero de por aquí. Nehuem se ruborizo pero aún así no disimulo su interés hacia ella.

-¿Y porque no el primero?-Noah extendió los brazos diciéndole con orgullo.

- Porque ese soy yo y le pertenecer muy pronto sólo a mí adorada Remenci.

-¿Cómo que pronto?- Noah le explicó que Zeus tenía la tutoría de la joven siendo su fija la más parecida a un padre por lo cual le pediría su mano para poder casarse con ella.

-¿Solo así? Que opina Remenci de todo al respecto-Le preguntó con intriga Nehuem.

-Remenci es muy tímida jamás aceptaría sus sentimientos por mí, por eso le daré un empujoncito...ya después estará feliz. Su amigo notó como su rostro se envelazaba al referirse a la chica, estaba completamente enamorado de ella.

-Entonces espero que te salga todo bien y que no  desconcentre  tú perfecto talento con la espada.

-Eso jamás. Noah miro hacia la mesa teniendo una idea que no podía dejar de pensar.

- Sabes una cosa, tal vez en un futuro pueda presentarte dos verdaderos guerreros.

-¿Son como tú?- El muchacho se ríe mirandolo con seguridad.

- Te aseguro que te dejarán sin aliento, no te tendrán mi bella clemencia. 

-Interesante, ahora tienes toda mi curiosidad. 

Un sonido extraño surgió en el cielo, al alzar la vista vieron aparecer entre las nubes sus colosales alas blancas que aterrizaron en su jardín. Él hombre sacudió sus ropas y marco entre sus labios una cálida sonrisa.

-Me alegra mucho volverlos a ver queridos jóvenes. Millet se acercó primero a él preguntándole que hacia tan temprano por allí. Él Dios revolvió en su bolsa sacando los papiros con el seño del poderoso Zeus.

- Por lo que pude saber, el padre todo poderoso esta preparando uno de sus importantes banquetes para esta noche y a pedido su asistencia, tomen cada uno tendrá la suya. Hermes repartió una tras otra a cada uno de los hijos de los Olimpicos pero a diferencia de la última vez allí se percató de un nuevo rostro.

-¿Y este fuerte muchacho quien es?-Noah miro a ambos lados contestando primero antes que alguien  los perjudicará.

-Él es Nehuem un amigo. Pese a no querer levantar sospechas solo su nombre hizo transformar la cara del altivo quien miro horrorizado al joven aunque en el fondo de sus ojos corría otro sentimiento más hayegado a la tristeza.

-¿Nehuem?-Horiamy tomó su carta y se interpuso en su camino preguntándole al mensajero.

-Sí Zeus pidió nuestra asistencia eso indica que es obligatorio ¿Verdad?- Él quitó su mirada del chico asentando con la cabeza.

-Todos los que reciban invitación deben asistir. 

-Gracias. Hermes saludo a todos y volvió a lanzarse en vuelo, perdiendose  poco a poco entre las nubes.

Liria se puso contentísima saltando de alegría al lado de Cala remarcando que vería a su padre nuevamente. 

Aresma, Remenci y las demás jóvenes decidieron irse a preparar buscando los mejores vestidos para lucir encantadoras esa misma noche.

Noah observó a Horiamy preguntándole sólo con la mirada ¿Qué harían con el muchacho?

-Liria vendrás conmigo al paseo o prefieres quedarte y prepárate para la noche. Sus ojos azules están sumamente emocionados replanteandose todo.

-Si no te molesta me gustaría quedarme aquí, disculpame por favor. Ella asentó cuando Noah volvió a verla de mala gana.

-Horiamy.

-Continúen sus actividades Noah los veré en la noche...Y No te preocupes. Ella tiro el papiro al suelo sin importarle donde terminará y  desaparecio frente a sus ojos. Cala y su amiga volvieron al interior de la Gruta, Nehuem camino unos pocos pasos tomando el papiro que ni siquiera había sido abierto.

-¿Qué es lo que le pasa? ¿Por qué actúa tan raro? Siempre es así. El se sentó en el borde de la fuente recordando su infancia.

-No la juzgues, en el fondo ella es diferente lo que vez apenas es una coraza causada por muchos hechos Nehuem. Se acomodó junto a él cuestionando lo que decia: