Coraly pudo sentirse nuevamente dueña de su cuerpo al ingresar al cuarto, cayó al suelo sintiendo la mano de Remenci ayudandola a levantarse.
-¡Déjame! No me toques. La joven la tomo del brazo y la levanto del suelo poniendo los ojos en blanco.
-Por favor Coraly no seas tan dramática.
Ella se sentó sobre la cama queriendo desahogar las lágrimas que cargaba su interior.
-¿Qué no sea dramática? No seas sinica, ¿cómo pudiste ejercer tus dones sobre mi? Somos amigas. La muchacha se sentó frente a ella sin demostrar una gota de arrepentimiento.
-Lo hice por tú propio bien, sino lo hacia hubieras hecho una escena lanzandote a los brazos de Tenacio.
-Y ESO ERA LO QUE QUERIA. Un horrible llanto descontrolado emergió dejándola toda colorada.
-BASTA, controlate de una vez, acaso no recuerdas lo que dijo Zeus, tenemos que vigilar a Nehuem y Noah sacarles toda la información posible o estaremos acabadas...y tú amado Tenacio pagará también las consecuencias.
-NO, tengo que decirle la verdad, así tendremos una forma de salir de todo esto juntos. Remenci se rió con burla antes sus palabras.
-No seas ingenua Coraly, si rompes el trato con el padre el jamás te permitirá estar con tu querido, hará lo imposible para no verlos juntos...puede incluso matar a alguno de los dos para separarlos.
-¡CALLATE! todo esto es culpa ¡tuya! Yo jamás acepté este trató, quede enredada en tus asuntos y te ordenó que me dejes libre de ellos. Su amiga no sintió ni una gota de miedo respondiendole con una sonrisa burlesca.
-Coraly hay sólo una forma de salir de esto, endulza a Nehuem con tus dones, vuelvete su confidente, conoce todo sus secretos hasta que llegué el momento de entregárselo a su padre y tendrás todo a tus pies...O si lo prefieres puedo seguir controlandote. La joven extendió su mano hacia la puerta marcando la rabia entre sus dientes.
-Lárgate de mí cuarto o no responderé de lo que haga.
-Como desees pero piensa bien lo que harás amiga mía, tal vez la verdad no sea lo correcto.
Horiamy se sentó sobre la alfombra de la habitación viendo el sol colarse por la ventana mientras Cala junto a ella revisaba detenidamente su brazo sin encontrar un sólo rastro del incidente.
-Vaya, es increíble ¿Cómo pudiste sacartelo de encima?-Liria se acercó más para escuchar quedando en una ronda perfecta igual a las que hacían cuando eran niñas.
-Le pedí ayuda a mí madre, me dio una posibilidad y la seguí...Gracias a ella estoy bien. La hija de Poseidón no pudo evitar mirarla con alegría.
-Tú madre no era tan mala al fin de cuentas ¿no?-Ella esquivó la mirada sin querer admitir el buen acto que había hecho.
-Tal vez...Es muy pronto para asegurarlo.
Cala dejó su brazo y le pregunto con curiosidad:
-¿De qué querías hablar con nosotras?
La joven tomó aire recordando las visiones que había tenido en la Laguna de Artemisa buscando las palabras para explicárselo.
-Verán es muy importante que lo que les diré quede por ahora entre nosotras tres nadie más puede saberlo. Ambas escucharon con sorpresa la petición despertando sus alarmas de pánico.
-Puedes decirnos, ya me estás asustando. Le exige Liria.
-Habla, ¿qué pasa?-Le cuestiona la hija de Hades.
-Mientras estuve curandome tuve visiones importantes.
-¿Respecto a qué?- La joven miro ambas diciéndole:
-Cala ayer seguro te diste cuenta que el veneno no era común. Rápidamente recordó todo afirmando sus palabras.
-Sí, era veneno del kraquen, no entiendo como llegó a ustedes si estaban en busca de Orión.
-Alguien plantó en los colmillos de la gran serpiente ese veneno...Alguien que no está a gusto con Nehuem aquí. Ella alzó rápidamente las manos escudándose de posibles acusaciones.
-No,no,no, no me mires a mí, es claro y conocido por todos que Nehuem no me cae bien pero yo no infectaria esos dientes sabiendo que tu ibas a estar ahí, YO NO HICE NADA. Horiamy la tomó de las muñecas bajandolas y pidiéndole silencio.
-Calmate, yo no te estoy acusando déjame terminar.
-¿Pero a quien además de Cala no le agrada Nehuem?- preguntó con duda Liria.
-Él mismo que nos vigila. Ambas miraron con asombro aquel hecho sin poder asimilarlo.
-¿Cómo que nos vigilan?- Le preguntó Cala.
-Zeus a hecho un trato con Remenci y Aresma para mantenerse cercanas a Noah y Nehuem, sacarles toda la información posible de lo que hacemos y si hay algo peligroso en nosotros para actuar a tiempo. Cala enfureció de rabia ante sus palabras frunciendo el interlineado de sus cejas igual a un toro bravio.
-¡Desgraciadas! ¡¿Cómo pueden hacer un trato contra nosotros?! ¡Son unas miserables! ¡las voy a matar!- Intento pararse cuando Liria y su amiga la volvieron a sentar en el piso.
-CALMATE POR FAVOR, no vale nada si hacemos algo ahora, estamos en un juego peligroso, si las desenmascaramos ahora ellas negaran todo y ni Noah o Nehuem creerán en nosotras porque están completamente enamorados de ellas, se que lo sabes...nuestro hermano nos ama pero lamentablemente en esta situación elegirá creer las mentiras de Remenci.
La joven proceso sus palabras pero aún así sentía no poder quedarse quieta y dejar las cosas así.
-No podemos quedarnos sin hacer nada, quiero que me expliquen ¿como fueron capaces de hacer un trato así con Zeus? ¿Por qué? Quiero saberlo. Horiamy recordó su visión respondiendole.
-Zeus les ofreció lo que desearan, junto con su libertad para casarse con quien deseen hacerlo. Liria sintió la cara arder de rabia ante lo que decía.
-¿Cómo pudieron aceptarlo todas tan fácil? Hemos compartido toda la vida juntas.
- Siempre han sido crueles Liria, pero jamás imagine que llegarán a este punto.
-Igualmente al parecer no fue unísono la decisión, pude ver como Remenci controló y forzó a Coraly aceptar deesposar a Nehuem. Cala sintió la cólera acumularse en su garganta al recordar a Noah en su mente.