Después de la visita de su latoso medio hermano Liria se desplomo sobre uno de los Edén suaves y rodeado de almohadones dándole aquella hermosa sensación armoniosa deseada.
-¿Y bien? ¿Qué quería?-Apenas volteó contemplando los ojos expectantes queriendo una respuesta, Tritón poseía una energía absorbente logrando dejarla rendida aún cuando el día recién iniciaba.
-Sólo quería hablar sobre la herencia de mi padre, pero llegamos a un buen trato.
-¿Trato? ¿Qué hiciste? El tridente es tuyo por derecho,Poseidón te lo entregó a ti.
- Ya, no te pongas así, "Mi hermano" ya me dejó muy agotada, El tridente es mío y continuará bajo mi uso, en cuánto a él le di lo que le corresponde. Noah escuchó atentó su comentario dudando respecto a lo que hubiera hecho.
-¿Qué fue lo que hiciste Liria?-Ella revoloteo los ojos por la habitación igual a una bella mariposa.
-Le entregué Atlantis y todo su dominio hasta las orillas del mar. Cala abrió la boca horrorizada dejándola casi sorda.
-¡¿QUÉ HICISTE QUÉ?!-Gracias al destino alcanzó a taparse los oídos esperando que el eco abandonará la sala.
-Hasta tú padre hubiera sido capaz de escucharte desde Infratierra.
-¡Que me escuchen todos! como fuiste capaz de darle eso, te caiste y te rompiste la cabeza ¿O qué?- Ella se rió enfureciendo aún más a Cala.
-No, o al menos no lo recuerdo, pero fue lo justo, Tritón es el mayor, el primogénito, no puedo negar sus derechos sobre la herencia de mi padre no todos contamos con tu suerte y ser única sucesora... además no es para tanto, fui equitativa, le di lo que le corresponde, me quedé con el tridente y asegure el bienestar de todos mis hermanos ¿qué más pretendes de mí?-Cala intentó calmar la euforia latir por sus venas.
-Eres la Reina, por elección de tú padre, cuando está pesadilla terminace hubieras podido vivir como la nueva regente de todos los océanos entiendes ¡¿la gravedad?!- Liria se acomodó en el lugar reflexionando tranquilamente sobre el asunto.
-No creo tener la arcilla para ser Reina, es mejor así, Tritón lo hará bien y yo seguiré siendo libre para hacer de las mías cuando todo esto terminé. Cala fruncio las cejas sin esconder por un instante el fastidió ante su actitud.
-¿Y qué piensas hacer después de que esto terminé?-Ella se mostró entusiasta viendo arder aún más de odio a su hermana.
-No lo sé con exactitud salvó por una sola cosa. Liria apuntó su dedo índice hacia la diosa tomándose un minuto de pausa.
-Ser mejor Tía que tú.
-Voy a matarte, tomalo en serio. La joven froto sus rizos dorados observando de re ojo a Noah partirse de risa, ante la cólera subir y subir por su mirada apuntó de echar llamas.
-Yo me lo tomé en serio, No quiero ser Reina pero necesito el tridente de mi padre... fui justa con mi hermano y mi gente ya no tengo más que hacer, por cierto te e dicho mil veces que no te estreses tanto, te arrugas, ahora ya déjame tranquila por favor. Ella se recosto nuevamente sobre los almohadones de tela buscando con la mirada a su hermana.
-¿Dónde está Horiamy? -Cala furioso sólo respondió rabiosa.
-¡Pues dónde más puede estar!
Noah volteó a ambos lados habiendo perdido de vista también a Nehuem, cuando su atención quedó fijada en el pasillo, ambos avanzaban a la par caminando aferrados una mano a la otra, mientras en sus ojos el júbilo parecía brillar como la primera vez, Horiamy lucía resplandeciente como nunca antes lo había estado, sus mejillas tenían un bello color rosa mientras el verde de su mirada parecía aclararse en un tono más suave y aterciopelado. Nehuem acariciaba sus nudillos como el tesoro más preciado aunque su rostro aún dibujaba la mezcla de felicidad, amor,euforia y miedo produciendo una graciosa mezcla.
Liria alzó la vista sobre el borde del Edén sorpresiva ante lo que sus ojos veían, saltando del lugar.
Cala ante las miradas dirigió su atención también hacia el mismo punto, se espanto viendo aquel lazo entre ellos diferente al conocido, la mirada de su hermana parecía confesarle aquel desastre.
-Rayos.
-¿Horiamy?- La cara de Liria se iluminó bajó el influjo de emociones cuando Nehuem respondió a cada una de sus preguntas abrazando a Horiamy contra él y sembrandole un tierno beso en la frente.
-¡Ah! ¡No lo puedo creer! ¡Qué emoción!¡Los felicito! -Ella se lanzó entre medio de ambos felicitandolos acaloradamente.
Noah caminó hasta ambos con los brazos extendidos hacia su preciado amigo, palmeandole la espalda.
-Felicidades, está vez lo haz hecho bien. El muchacho pegó los labios a su oído diciéndole en voz baja.
-La lástimas y yo te lastimó a ti. Nehuem enrojecio mostrándole una simpática sonrisa.
-No te preocupes, no haría eso nunca, además sabes quién es la fuerte en está pareja.
Liria vio encantada el rostro de su hermana sublime y radiante, pocas veces había visto en su mirada tal grado de felicidad, contagiandola a ella también.
-Entonces...ahora Nehuem es oficialmente mi pariente, ya no podremos deshacernos de él eres "Mi hermano" ahora también ¡Es increíble! -La joven se mantuvo aferrada a Horiamy cuando volteó a ver Cala.
-¿Y tú no vas a felicitarlos?
La hija de Hades salió de su lugar, acortando la distancia con ellos, manteniéndose cruzada de brazos y la vista aireosa, hasta colocarse frente al chico viéndolo de pies a cabeza, marcando en sus palabras el frío tono irónico.
-"Cachorro", "cachorro" aún consideró que eres un engreído y tonto cruzado.
-Cala...-Le dijo Horiamy intentando que se detuviera pero ella prosiguió pidiéndole un minuto más.
-Pero haz mejorado y demostrado valor...es obvio que no te la mereces mira nació inteligente con encantó. Nehuem intentó protestar pero la diosa lo detuvo de mala gana.
- Aún no terminó, eres irremediable...Pero si mi hermana te eligió es porque algo bueno está creciendo en tú ser, algo que sus ojos si pueden ver, pero me bastan para aceptarte como parte de esta..."peculiar familia". La mirada del joven se iluminó queriendo saltar sobre ella.