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Peyton

Habíamos llegado a un punto importante en las empresas tanto que estas semanas han estado demasiado ocupadas llenas de trabajo. Mis hermanos sobre todo Tyler, Carter, Connor, Jayden y los gemelos están demasiado estresados con el tema de convenio hacia países europeos, igual que Ryan.

Mi relación con él está en el mejor momento, sabemos quedar a comer, ir al cine o a ir de paseos con mis hermanos los fines de semana. Mi padre Dominic también sabe venir a visitarnos a mis hermanos y a mí. Por otro lado, con las carreras, todo seguía igual que de costumbre que llegaba gente nueva, se les hacía conocer las reglas por la gente de nosotros. En eso es algo que nunca faltamos en ir para que no olviden quien manda ahí. Aún seguía realizando convenios con otras mafias.

Como la mayoría de mis hermanos estaban un poco ocupados decidí no molestarlos con una invitación a comer que solo quedé con Bruno y Scott.

–Lucí ya no regresare –dije acercándome a su escritorio – Cancela todo lo que tenía para hoy –ordene, ella asintió.

Salí de la empresa de Ryan y me dirigí donde habíamos quedado los tres. Era un restaurante afueras de la ciudad para que no nos moleste la prensa.

– Hola –sonrei al verlos –¿Cómo la han pasado? –pregunte saludándolos. Ellos me miraron con una sonrisa mientras negaban con la cabeza.

–Vivimos en la misma casa, cariño –dijo burlo Scott mientras chocaba las cinco con Bruno. Resople divertida.

Esperamos que se nos acercará el mesero para ordenar la comida, como ya habíamos venido en algunas ocasiones aquí ya sabíamos que pedir. Una vez que la comida llego comenzamos de cualquier tema en específico hasta de los deportes. Hicimos un debate porque los Simpson eran amarillos.

–Esto me recuerda la época cuando vivíamos en Londres –dijo Bruno con una sonrisa. Sonreí.

–Siempre será como en Londres, cariño –afirme con una sonrisa

Los dos dejaron los cubiertos levantándose abrazándome como oso. Solté una risita.

–Te amamos mucho –dijeron en un insomnio besando mis mejillas.

–Y yo a ustedes –los miré a los ojos –Con la misma o más intensidad que ustedes lo hacen –dije.

Terminamos de comer y salimos del restaurante. Pasamos toda la tarde divirtiéndonos, recordando cómo eran los viejos tiempos siendo solo nosotros tres antes de regresar acá que eso me hizo traer un recuerdo.

–Flash Back –

Sabía que fue una buena decisión lo que hice tiempo atrás. Había comprado a una casa donde ahora vivíamos los tres.

–Es hora de regresar –dije cohibida. Ellos me miraron confundidos.

– ¿A qué te refieres, cariño? ¿Regresar a dónde? –pregunto Scott con el ceño fruncido.

–Hay que regresar a Los Ángeles –susurre.

– ¡No! –exclamaron los dos al mismo tiempo, estaban demasiados serios. Desde todo este tiempo que estoy con ellos me protegen mucho igual que yo a ellos.

–Aunque no quiera tengo que hacerlo. Dominic me llamo diciéndome que Matt anda que me busca. –explique –Como no me encuentro allá se está desatando el mismisimo infierno –dije sinceramente, ellos me miraron fijamente –Tranquilos, no va a pasar lo mismo –trate de tranquilizarlos

Ellos sabían todo de mí, ellos sabían la razón porque estaba en Londres. Lo único que no me atreví a contarles fue mi pasado, eso era solo mío. Ellos me miraron dudosos y al final terminaron aceptando sin estar muy convencidos.

–Matamos al que se atreva acerté daño –dijeron muy serios. Asentí mientras los abrazaba. Eran todo para mí

–Fin flash back –

Si, paso muchas cosas desde ese entonces. Desde que decidí otorgar una segunda oportunidad y volver.

– ¿En qué piensas princesa? –pregunto preocupado Bruno seguido de Scott. No me había dado cuenta que me quede mirando a la nada. – ¿Te encuentras mal? –toco mi frente, reí negando con la cabeza

Los miré y sonreí.

–Pensé en que tenía una familia maravillosa –dije con una sonrisa que llegaba a mis ojos. Me levante de mi asiento –Haría cualquier cosa por su felicidad –los abrase muy fuertes.