Ayato

Ayato no podía creer lo que sus ojos estaban viendo.Por las escaleras bajaba una mujer con un vestido  color negro y tacones altos y y era nada y nada menos que su Yui.
En que momento se había convertido en toda una mujer? Y estaba.....preciosa-pensaba.

Pero que es lo que me pasa? Porque pienso de esta manera? Es verdad que esta preciosa....a quien quiero engañar,esta endiabladamente hermosa y eso no me gusta nada, esa belleza sólo debo verla yo,al contrario todos esos par de idiotas la miraban hambrientos;locos por ponerles sus garras,en especial subaru que últimamente lo veía muy cerca de su Yui.

Ya no la molestaba como antes,se les veía a cada rato juntos,charlando,rienso,y eso lo ponía de perros,ni siquiera la mordia,lo sabia porque cuando el lo hacía no percibía su esencia ni sus mordidas;algo esta pasando con estos dos y yo voy a averiguarlo -pensó Ayato.