Capítulo 14

Lia

Centro de controles;
Esperanza.

—Necesitamos mejorar la seguridad, quince chicos entraron anoche a romper en la base beta—Exige el Adalid Yaser—¡No podemos permitir que hayan más parejas entre ciudades!

—Esto ya está fuera de nuestro alcance; sabes que cada generación es más fuerte que la anterior—Advirtió Dimitruk.

—Me sorprendes, ¿Cuándo cambiaste tanto? ¿El haberte enamorado de la Adalid te hace querer que todos tengan esas mismas oportunidades que tuviste tú? O acaso... ¿Tienes miedo?—Ríe sarcasticamente—¿Escucharon esto? El gran Dimitruk tiene miedo; no me sorprende, te volviste débil—Dijo despectivamente.

—¡Yaser! Ya cálmate, si tuviera miedo o no, no es tu problema—Le digo lo más calmada posible.

—No tienes ni la fuerza para responder por ti mismo, tu mujer lo hace por tí, ¡Que asco me das!—Cada palabra que dice hace enojar cada vez más a Dimitruk.

—Necesitarás más que eso si quieres pelear, como verás; no tengo tiempo para tus estupideces, señores y señoras, hay que tomar una desición; ¿Qué hacemos frente a tantas parejas entre ciudades?—Dejó de lado lo que decía Yaser para hacer lo que mejor le sale, ser un líder.

—Esto no se quedará así—Sentenció.

—Dejando a un lado tanta pelea; tal vez podríamos aceptar parejas entre ciudades, digo, después de todo no ha pasado nada malo—Opinó Dimitri, el Máximo de Santos.

—Dimitri... Que desagradable sorpresa—Estaba a punto de golpearlo cuando, misteriosamente la Máxima de Hunter lo saca.

—Muchas gracias Terri.

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Seis horas más tarde.
Laboratorios Delta 4;
Esperanza.

—Yaser se comportó como un idiota durante toda la reunión—Suspira— De no ser por Terri, posiblemente hubiéramos peleado.

—Deja de pensar en eso, ¿Si? Necesitamos pensar sobre temas más importantes que ese descerebrado—Sugiero.

—Lo sé, pero me saca de lugar la forma en la que me ataca.

—No te preocupes por él, mejor concéntrate en buscar lo que nos pidieron así después vemos si quemamos o acuchillamos a Yaser.

Mientras Dimitruk se concentra en la idea original por la que estamos aquí, yo recorro la habitación.

—¿No se te hace curioso la forma en la que tienen ordenado todo?—Pregunto mientras reviso las mesas.

Todas tienen tubos de ensayo con una mezcla que no sabría explicar.

Muchos tonos y colores.

Y algunos hasta brillan.

—Dimitruk, mira esto—Lo llamé— Me parece bastante extraño que hayan estos líquidos aquí.

—¿No son extracciones de las frutas de cada país y ciudad correspondiente?—Preguntó.

—Me parecen algo más—Reviso cada etiqueta— Algunos brillan demasiado.

—No entiendo, hace muchos años que estos laboratorios trabajan como para que hicieran algo extraño, aunque mirando a los últimos científicos; es creíble—Sentencia.

—Pueden querer algo de los chicos.

—No lo sé—Toma la carpeta por la que veníamos— Mejor vámonos, luego investigamos la zona. 

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Tormenta

Centro de entrenamientos Élite;
Esperanza.

—Sean bienvenidos chicos, por cuestiones de tiempo hoy estaré solamente yo, Satu tiene que hacer cosas de suma importancia —Empieza su discurso el uniformado— Por lo que yo me encargaré de hacerles las pruebas de iniciación en la Élite.

Recorre la sala hasta llegar a una puerta a la izquierda.

—Primero; todos tendrán ciertos aparatos, una vez entregados los mismos sugiero que en los próximos días se acostumbren a ellos, la tecnología es nuestra amiga, sepan usarla bien y progresarán —Nos entrega una caja específica a cada uno— Ahora, es desición de ustedes decidir si aprovechan lo que tienen o lo desperdician.

Abro la caja, para mi sorpresa hay una cantidad de artefactos extraños; un comunicador, una especie de celular, un lápiz supongo, pues tiene esa forma, una cinta metálica plateada con hojas, pareciera lo que usaban para representar sabiduría y una especie de reloj.

—Mientras sean novatos lo que tienen es más que suficiente, les diré los nombres de cada uno; el comunicador, es aquél que se coloca en el oído, conforme los días pasen entenderán su funcionamiento, número dos: el teléfono holográfico, igual que lo primero, con el tiempo se acostumbrarán, si ya han estado en las salas de informática entienden a lo que me refiero, prosigamos, el lápiz, en realidad es un poco difícil de usarlo, pero en este caso aquellos que sepan usarlo verán que no es un arma, al contrario, es inofensivo en tal nivel que muchas veces solo lo usan los líderes, el reloj en casos de emergencia sirve para comunicación, es lo único que puedo decirles, todo deberá ser descubierto por ustedes, o bien, no los usarán —Nos observa a las chicas— Ustedes tienen dos objetos distintos pero con la misma función, las chicas tienen una cinta con diseños y colores distintos, los chicos tienen un segundo reloj, simplemente si no les gusta pueden cambiar, la función no se las puedo decir.