Ya habían pasado unos días, Naomi no les había contado, a sus padres que estaba embarazada, tan solo faltaban unos días para volver a casa, y no tenía muchas ganas, de enfrentarse a su padre.
—¿Le has dicho a el chico, que estas embarazada? Lo debería saber, también es responsable los dos, no solo tuya—dice Gina.
—No sé yo.... pero si hablare con el hoy —dice Naomi convencida.
Naomi quedo con el chico, en la cafeteria, lo estaba esperando, cuando llego con un amigo.
—Podemos hablar solos, ¿en privado?, tengo que contarte algo.
—¡Si, claro! Dime ¿Qué quieres?
—Ire al grano, ¡Estoy embarazada! Estamos esperando un hijo.
—¡Pero que, estás diciendo!, ¿Te has vuelto, loca? Aclaremos las cosas primero nena, punto uno, no somos novios ni nada que se le parezca, solo hemos tenido sexo y ya, ¿no has tomado precauciones en serio? La píldora del día después... ¿Y cómo se, si es mío? No vine al crucero hacer hijos, en mi país tengo mi novia formal, y no pienso romper con ella, por un polvo mal echado.
—¡Escúchame! Esto es culpa de los dos, no solo mía, además si tenías novia, para que te enrollaste conmigo, eres un cerdo...
—Tu fuiste la que viniste a mí, te pusiste a tiro nena, no soy de piedra, sera mejor que abortes, bueno haz lo que quieras ni me importa ni interesa, para nada, por cierto, no me llames más, ni me busques, olvídate de mí.
—Ni loca te busco... Eres de lo peor que he conocido nunca, no vales la pena, lastima, me da tu novia...
Naomi se levantó y salió de la cafeteria, las chicas la estaban esperando en la biblioteca.
—¿Que ha, pasado? Que te ha dicho—preguntó Gina.
—Pues que tiene novia, que seguro que no es suyo, y que solo fue sexo y nada más, tampoco me he estado callada... me parece un cerdo, que se habrá pensado es tan prepotente el pobre, no sé cómo me pude fijar en él...
—Me lo imaginaba, tiene cara de sinvergüenza, y es muy chulito—dice Gina.
—Ahora eso, no importa, creo que lo mejor es qué se lo digas a tus padres, no lo podrás ocultar por mucho tiempo—dice Leila.
—No es una noticia, para contarla por teléfono, sera mejor que se lo diga en persona, con mucho cuidado y tacto, seguro que lo entenderán—dice Zoe.
—Es lo que voy hacer, si mi madre es más comprensiva la verdad, pero también se, que no quiero este hijo, estoy estudiando y con, esto mi carrera se iría al garete, no pienso estropear toda mi vida, por un desliz.
—Bueno, tu tuviste la culpa, asúmelo Naomi, por ser así como eres tan alocada, espero que hayas aprendido algo, y se has más responsable ahora—dice Gina.
—La culpa es de los dos, pero si he aprendido algo, tenía que haber puesto cuidado, y no haberme fijado solo en su cara y cuerpo, porque es lo único que tiene, celebro tiene muy poquito dice Naomi.
—¡Dejémoslo! Ya, vayamos a la playa un rato, nos quedan dos días solo, pasémoslo lo mejor que podamos chicas—dice Leila.
Bajaron las cuatro chicas a la playa, allí estaban los chicos jugando con el balón, enseguida se acercaron a ellas.
—¡Hola chicas!, ¿qué tal estáis? Hoy habéis llegado algo más tarde, os estamos esperando—Dice Edgar.
—Si queréis podemos seguir jugando con la pelota en el agua, esta buenísima, chicas—dice uno de los chicos.
—¡Está bien, vallamos al agua! —contestaron las chicas.
Zoe se sentó en la arena, y cogió un libro de su mochila.
—¿Me, puedo sentar contigo? No me apetece estar en el agua jugando, ya llevábamos un rato jugando.
—Si claro, te puedes sentar Edgar.
—¿Te, ocurre algo? Estas muy seria, tú no eres así, el poco tiempo que te conozco, me ha valido para saber cómo eres.
—¡Tu amigo!, el que salía con Naomi, es una cara dura, ¡perdona que te lo diga! ¿Sabías que tenía novia? —pregunto Zoe.
—¿A pasado, algo con él? No es amigo mío, mis amigos son Gray y Jogndan, él es amigo del otro chico, nos conocemos de la universidad, por eso mientras hemos estado aquí, solo la noche que nos vimos por primera vez, salimos todos juntos a cenar, y no hemos vuelto a salir juntos, ellos son de otro rollo tu ya me entiendes.
—¿Entonces, no sabías que tenía novia formal?
—¡No! Si que le visto hablando por teléfono con una chica, pero me dijo que era su hermana, y bueno no le di importancia, sabía que estaba saliendo con Naomi, y me parecía que se llevaban muy bien, ahora sé que vino de mal humor esta mañana, y comento algo de que había discutido con Naomi, y no quería volver a verla más, en su vida.
—¡Si, claro! me supongo, después de lo que ha hecho, no me extraña nada, es un irresponsable y una cara dura, no creo que llegue lejos en esta vida, pero bueno el sabra....
—¡Pero bueno!, ¿que, ha hecho? Tiene que ser algo malo, para que hables así.
—Nada olvídalo, no merece la pena, pensar en él, es perder el tiempo, ¿quieres dar, un paseo por la playa?
—¡Si claro! Te vendrá bien, así dejas de pensar tanto.
Las tres chicas se quedaron, jugando un rato con los cuatro chicos, cuando llego el ex amigo de Naomi.
—Hola chicos veo que os lo estáis pasando muy bien.
Se metió en el agua, y se acercó a Naomi agarrándola por la cintura, cogió y la beso en los labios.
Naomi le dio una bofetada, con todas sus fuerzas, y quito la mano de su cintura.
—¡Asi aprenderás! Besa a otra imbécil, o mejor besa a tu novia, que se piensa que eres todo un angelito, cuando eres un mujeriego.
—¡Mira quien, habla! La monjita de la caridad ahora me dirás que eras virgen y todo jajaja, no te hagas la tonta nena, tú te enrollas con el primero que llega.
—Me puedo enrollar como tú dices con quien me dé la gana, estoy sola, no tengo ni novio, ni pareja, a diferencia de ti.
Naomi se separó de él y se acercó hacia sus amigas.
—Mejor me voy, aquí parece que huele a chusma, por esa parte.