Ya habíamos entrado a la ciudad y me padre ya nos había dejado a Gabriel y a mi en la casa.
-Adiós-dijo mi padre al arrancar la camioneta
Solo pensaba en lo que podía pasar si a Marta le dan los vómitos en la noche y sus padres se enteraran de todo esto.
-Espera, Marta¿ te quieres quedar? - pregu te alcanzando la cqmioneta
Marta me miró extrañadamente y luego reaccionó.
-Bueno nos serviría para conocernos más- contesto
-Entonces también te quedas- dijo mi padre
Marta y su madre se dieron unas miradas.
-Si me quedaré-contestó finalmente
Bajo de la camioneta y con ella una pequeña maleta, los tres entramos a la casa.
-Muchas gracias Alma-me dijo
-No te preocupes, te puedes quedar todo lo que quieras-conteste
Me dio un abrazo, y Gabriel nos veía de una forma muy extraña.
Marta se quedó en un cuarto y Gabriel y yo en otro
-¿Porque eres tan amiga de Marta de repente--preguntó confundido
-Porque no puedo quedarme de brazos cruzados si se que esta embarazada y aun no lo quiere decir a sus padres - conteste
-Espera ¿lo sabes? - preguntó
-¿Lo sabias? - pregunte