Tres Guerras

3: Un grito desesperado

— Por suerte, tengo amigos aquí - Exclamó Juliana sonriendo, sacando a Kai de sus pensamientos.

— ¿Ah?

Juliana señaló hacia donde estaba un grupo de chicas (y un homosexual). Esos chicos se veían como lo más friki entre lo friki, pero a Kai le cayeron bien a simple vista. El homosexual en cuestión era Arthur, el amigo (o ex amigo) de Melissa, la chica que indirectamente arrastró a Kai a dos años consecutivos de miseria.

Al lado de Arthur estaba sentada la chica más pequeña que Kai había visto en su vida, incluida Noah Nakamura. Su nombre era Sifa, según había oído decir a Arthur. Una chica blanca y robusta, pero con facciones suaves y la piel tersa (Mar) estaba sentada junto a un duende negro con cada de abusador sexual y facciones femeninas. Se llamaba Ara.

— Bueno, es mejor que no tener amigos - Admitió Kai.

Juliana alzó la cabeza y abrió la boca para decir "¡Mar!", llamando a su amiga, quien la volteó a ver con la expresión de aburrimiento y ganas de morir más convincente que Kai había visto, superando por mucho a la de Caín, quien por cierto, ya había quedado dormido.

La primera profesora del día entró por la puerta. Dejó su bolso en el escritorio y se sentó, analizando a cada alumno de la clase. Antes de que ella hablara, Kai tuvo en claro que su voz sería irritante, chillona, de reclamo y falta de amor propio. Odiaba tener razón.

— Buenos días, chicos, soy la maestra Clara - Se presentó ella - Y quiero conocer el nombre de cada uno de ustedes para intentar aprendérmelos, ¿Vale?

Empezó a señalar uno por uno a los compañeros de Kai, esperando escuchar sus nombres.

— Osiris.

— Fati

— Arthur

— Sifa.

— Algo me dice que esta profesora nos dará dolor de cabeza - Murmuró Kai.

Amelia asintió en su lugar, de espaldas a Kai pero aun pudiendo escuchar lo que decía.

— Toph.

— May.

— ¿Sólo hay gente de diseño gráfico e informática aquí? - Preguntó Juliana, volteando a ver a Kai. Él asintió.

— Amelia.

— Carlos.

— Juliana.

La profesora se quedó un momento, apuntando hacia Caín, quien aparentemente seguía dormido.

— Dale un zape para que se levante - Le pidió la profesora a Kai.

Kai no se hizo de rogar y se recogió las mangas de su sudadera antes de darle un zape tan poderoso en la nuca a Caín, que resonó en el salón tras el impacto.

— ¿QUÉ QUIERES ZORRA? - Gritó Caín, molesto por haberse levantado.

Caín analizó la situación y su contexto en menos de un segundo y comprendió que había cometido más de un error en un solo momento. Vio a Kai frente a él. Vio a la profesora Clara mirándolo mientras esperaba obtener algún tipo de respuesta de ella y también vio a todo su grupo mirándolo como esperando a que hiciera el ridículo con su respuesta.

— ¿Puede repetir la pregunta? - Sonrió inocentemente.

— Se llama Caín - Respondió Juliana.

Poco después del incidente, la profesora terminó de escuchar los nombres sin aprenderse ninguno realmente. Se volvió a sentar tras su escritorio y abrió una de sus carpetas.

— Bueno chicos, yo seré su profesora de Ciencias de la Comunicación 1 durante este curso. Mi materia estará, como las demás, dividida en dos evaluaciones parciales. En la primera, veremos teorías de la comunicación. En la segunda, vamos a tener dos pequeños proyectitos, uno sobre nuestro estado de sus regiones y el otro será armar un altar para el día de muertos de manera grupal y exponerlo ante los directivos del plantel. ¿Jefa de grupo?

Evelin alzó la mano.

— Ve a control escolar y pide una lista. Perdí la mía.

Evelin se levantó de su asiento, al fondo del aula y tan sólo a una mesa de distancia de la mesa de Kai. Podría ser muy linda, pero a Kai le daba un poco de mala espina.

— Quiero tener sus senos - Musitó Juliana.

 — ¿No te basta con los tuyos? - Preguntó Kai, escandalizado.

— Los suyos son más bonitos Kai - Replicó Juliana - Y más grandes, y más firmes, y más suaves y...

— Cálmate impúdica ramera - Espetó Kai - ¿Desde cuándo...

— Desde ayer - Lo calló Juliana.

A Kai aún no le sentaba por completo el hecho de que Juliana parecía tener hambre sexual todo el tiempo, aunque también lo desubicaba el hecho de que no la descargara únicamente con los hombres a su alrededor (y Kai era un hombre).

— Estás enferma.

— Lo sé.

La profesora Clara se largó poco después y un profesor familiar para Kai entró al aula.

— Buen día jóvenes, soy el maestro Bravo y seré su profesor de sociología. Para comenzar el curso de manera positiva, quisiera escuchar sus nombres y qué es a lo que se quieren dedicar una vez terminen sus estudios.

— Odio aquí - Murmuró Carlos para sí.

Fueron dos horas de no hacer nada en absoluto.

        

Sonó el timbre que indicaba no solo el receso, sino el cambio de curso, saliendo del de serie al de las capacitaciones. Kai y sus amigos abandonaron el aula de humanidades para irse al aula de informática. Serían otras dos horas con la profesora Ross y con Lara. Al menos, en humanidades Kai no tenía que estresarse por ella.

Al subir, se encontró a Lalo con Lucy al pie de las escaleras. Lucy había ingresado a la capacitación de químico-biólogo con la profesora Mendel y ellos apenas estaban acabando su clase doble. Además, Félix era el único del grupo de amigos de Kai que estudiaba en el área de químico-biólogo y siendo específicos, en la misma aula.

Keith salió del salón del que venía Lucy. Kai comprendió que estaban estudiando en la misma aula. A Lucy no debería haberle hecho nada de gracia, teniendo en cuenta su pasado con él, sin embargo, vio cómo Keith se detuvo a esperarla.

Lalo se despidió de ella y entró al aula de informática seguido de Corzo. Checo, el mejor amigo de Corzo, no estaba estudiando en físico-matemático, sino en humanidades con Kai y sus amigos.




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