Un Amor imposible

Más que un beso

Al principio alex fue frío al darme el beso pero cuando sentía que no podía más, me siguió el beso.

se separa de mi bruscamente y se para. Se queda congelado.

—¿Aún no te acuerdas?— pregunté. Pero alex no me contesta— Entonces... ¿Pueden gustarme otro chicos ahora?

—¿Por qué me haces una pregunta como esa?— me pare del asiento y alex mira lo que estoy a haciendo—.

—¿Incluso si esa otra persona es augustus?— me miran pero ninguna palabra sale de su boca— ya veo, entonces me iré a dormir. Solo quiero que te des cuenta que siempre fuiste mi primer amor, buenas noches— me di la media vuelta y empecé a caminar. Pero algo impide mi ida, alex me agarra de mi mano y hace que lo mire—.

—Estamos ebrios, no me culpes por lo que pasara esta noche— alex de la nada me empieza a besar—.

El beso si duro un poco pero el aire me faltaba y me separe de él.

—No... no esta bien.

—Hazle, este beso los dos lo deseábamos. Cuando te vi luego de 15 años, mi único deseo era poder abrazarte y besarte. Te extrañé mucho— alex me abraza con un fuerte y amoroso abrazo—.

—Alex, estas ebrio y esto lo haces por qué no sabes nada.

—Hazel, se lo que estoy haciendo. Mira vamos a otro lugar me estoy muriendo de frío.

—Está bien.

Nos alejamos de ahí y fuimos a la casa, estaba más caliente adentro. Todo estaba silencioso ¿Dónde está todo el mundo?.

—Te llevo a tu recámara.

—¿Puedo quedarme contigo?.

—No lo sé. Pero Esmeralda esta en tu cuarto.

—Lo se, y cuando esta borracha vomita mucho y eso a mi no me gusta, prefiero quedarme contigo.

—Está bien, yo me dormiré en el sillón que esta mi cuarto y tu dormirás en la cama.

Llegamos al cuarto de alex, todo está como antes. Y me sorprende que este así, pensé que había cambiado las cosas de su cuarto.

—Entonces... iré a ducharme, si quieres ya duerme.

—Está bien.

El se mete a bañar y me deja sola en su enorme cuarto, camine hacía la cama y me acosté. Estoy un poco incomoda, primera vez que duermo con un chico en el mismo cuarto, y peor tantito, con alex.

Escuche a lo lejos que alex salió del baño, y saca unas sábanas del clóset y acomoda el mueble para que se pueda acostar. Ya acostado pone sus dos manos atrás de su cabeza y mira el techo.

—¿Hazle, estas dormida?— pregunta—.

—No.

—Yo no puedo dormir.

—¿Por qué?.

—Por qué estás tú, hazle puedo decirte algo.

—Dime.

—¿Aún te sigo gustando?.

—Sí.

—lo siento— al escuchar eso, mi corazón late mucho— perdón por todo, siento que perdí a mi única chica, la chica que aún me sigue gustando. Hazle no puedo sacarte de mi mente ni un segundo, cuando te vi luego de tanto tiempo enloqueci, mi corazón saltaba de emoción, solo quería abrazarte y decirte que te extrañé mucho. Pero no pude, mi orgullo ganó y mis sentimientos también.

Quede en shock con la palabras de alex, no se si creerle pero se que esta diciendo la verdad. Me senté en la cama y alex lo nota y el hace lo mismo. Quedamos mirándonos de frente, segundos después alex estaba alado mío, su mirada cambió a un lugar no especifico.

—Mi mente decía "Déjala ir, no vale la pena" pero mi corazón decía otra cosa, decía "ve y corre y abrazala, ella te necesita" pero no pude. Cuando escuche que Augustus y tú se estaban tratando, lo admito me enfureci, no soportaba la idea de que ustedes dos anduvieran y muchos menos con la chica que amo. Tal vez y en tu mente estés pensando que te estoy diciendo esto por qué estoy ebrio— alex me voltea a ver— no, no lo estoy y estoy consciente de lo que te estoy diciendo, solo necesito que me perdones, necesito que estés conmigo, hazle, nunca te he superado.

Me quedé sin habla, no sabía que decirle y nunca me imagine que alex hablaría de esto. Mi corazón late mil por horas, mi respiración está muy acelerada, no tengo en mente que decirle.

—Yo...

—Te entiendo si no me llegas a perdonar, creo que todos lo que has pasado por mi culpa no te lo merecías. Una persona me dijo que tu vales y no merecías las humillaciones que yo te hacia. Y esta en lo correcto, te mereces muchas cosas más que humillación, mereces ser amada, querida y otras cosas más.

—Alex.... yo no te puedo perdonar, ahora. Pero algo si se es que si te sigo amando, pero no puedo perdonar a alguien que me ha engañado y humillado de una forme cruel. Yo no merecía eso, hubieras tenido el mínimo de talle de decirme que no querías nada conmigo y que me alejara de ti, pero lo hiciste a tu manera, tu manera fue dejarme en vergüenza y dejarme destrozada.

—Lo sé, estas en lo correcto pero ya estoy harto de esconder mi sentimientos asía a ti. Ya no puedo más, y si sigo rechazando este amor a ti, te perderé y si lo hago moriré por dentro.

—¿Esto lo haces por que Augustus me gusta?

—No, no es cierto. Mira te explicare, soy una mala persona y lo acepto, y soy un pésimo amigo. Pero lo que si se es que en esta vida todo se paga y lo que te hice lo pagaré muy pronto, el día que fuiste al aniversario de mis padres te veías hermosa, me quedé totalmente sorprendido con esas curvas, y lo que más me sorprendió es que eres una profesional, me refiero a que el vestido que hiciste te quedó hermoso.

—Gracias— sonreí— alex seré honesta, Augustus y yo decidimos quedar como amigos, no quiero que te ilusiones. Pero si de verdad quieres intentar algo conmigo quiero que lo demuestres. Cambia tu actitud ¿De acuerdo?, quiero de vuelta  a mi alex.

—Y te lo demostraré— alex hace que lo mire y acaricia mi mejilla— quiero que sepas que cambiaré por ti y por qué de verdad sigo queriendo a esa niña tonta, tímida, chistosa y preciosa.

Alex me saca una risa boba.

—Te creo, solo espero y esta oportunidad no la eches a perder. Por cierto, tenemos tenemos disimular en esto.

—¿Cómo que disimular?— la cejas de alex se elevan—.

Quito la mano de alex de mi mejilla— si, mira todo este tiempo Augustus te tuvo odio, Esmeralda también y de paso mi madre.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.