DE VEZ EN CUANDO, VIENE BIEN DORMIR
“De vez en cuando viene bien dormir (viene bien)
De vez en cuando viene bien dormir (viene bien)
De vez en cuando viene bien dormir
Viene bien, viene bien, viene bien dormir.
Uno que solo sabe dormir, solo le queda soñar o morir
Aunque la verdad es que cuesta reír, pero al fin
Haciendo un esfuerzo, se puede vivir.”
¿Por qué tengo que recordar esta canción en este momento?
Cuartel General del Arcángel Zanemi…
- Esto es completamente extraño – dijo con asombro Naivy al ver que la persona que los había convocado no se encontraba.
- Normalmente siempre él llega primero que nosotros, ¿será que tuvo algún inconveniente? – Emely, también con asombro, se preguntaba el porque su Líder no se encontraba con ellos.
Mientras todos se debatían un poco el porque la tardanza del Arcángel Zanemi, uno de ellos se percato que alguien mas faltaba en la reunión.
- Oigan todos, Zanemi no es el único que falta – dijo Zalathras con un tono arrogante y repulsivo al mencionar el nombre del otro personaje que no se encontraba con ellos. – ¿Dónde diablos se encuentra el idiota de Erick? – su cara alterada al ver que no se encontraba con ellos lo decía todo.
- Oye, tranquilo Zalathras, probablemente ya venga en camino… - una voz calmada se expresaba ahora y trataba de relajar el ambiente. – Erick tuvo que haber recibido el mensaje, adonde quiera que se encontrara – la duda de esas palabras era poca, aunque la verdad todos tenían la curiosidad de saber adónde había ido este al final de la batalla.
Aun se encontraban hablando cuando de pronto una voz familiar les llamo a la calma, y ellos al escucharla se sorprendieron en gran manera.
- Hijos míos, es un gusto verlos sanos y salvos después de este enfrentamiento – aquella voz era suave, calmada, llena de paz y amor, y al momento de ellos oírla se dieron la vuelta, se formaron en una línea y todos a un mismo compas doblaron su rodilla en señal de respeto y con su mano derecha formando un puño puesta en su corazón e inclinando un poco la cabeza hacia el suelo, dijeron al unisonó: “Alabado sea el nombre de Dios, el escuadrón Zanemi se hace presente.”
- Hijos, ya les he dicho que toda esta formalidad no es necesaria – Sorprendido, alegre, algo sonrojado al ver aquella escena tan impactante viniendo de un grupo de ángeles que no parecieran tan agradables.
- Arcángel, usted más que nadie sabe la gratitud que nosotros le tenemos – de una manera tan pacifica y en tono suave decía Zalathras estas palabras – al hacernos parte de su escuadrón especial, habiendo tantos ángeles mejores que nosotros. – Era un Zalathras renovado.
- Chicos, chicos, chicos, realmente el más agradecido debo ser yo, al tener a uno de los mejores escuadrones – y levantándose de su asiento, se inclinó hacia ellos en señal de agradecimiento y todos al ver esto quedaron sorprendidos.
- Señor Zanemi, no haga eso… - decía Azarías – no somos ángeles superiores a usted para que se incline hacia nosotros – algo sorprendido al ver aquella conmovedora escena.
- Es verdad Azarías, ustedes no son ángeles superiores, pero ¿acaso no tengo derecho de felicitar y agradecer a aquellos que brindan toda su confianza hacia mí? – decía Zanemi de manera fuerte, con un tono de voz de autoridad, pero una autoridad donde todos eran iguales, nadie era más y nadie era menos. – Ustedes para mi son como mi familia, y velo por ustedes cada día – para Zanemi no existían ángeles ni superiores o inferiores, todos eran iguales y por tal pensamiento era criticado por algunos, pero alabado por otros.
Un tiempo después, cuando las formalidades habían terminado, los reportes de todas las misiones estaban dados, su enfoque estaba en dos asuntos primordiales.
- Así que Erick desobedeció una orden directa tuya, no es así Zalathras – viéndolo fijamente con una cara de asombro, pero al mismo tiempo no extrañándole la situación.
- Así es Zanemi, no siguió mis instrucciones – solamente tres ángeles lo llamaban solo Zanemi, ya que ellos tenían una relación con una historia diferente a la de los demás. – Cuando pasamos por la retaguardia se percató de la situación en la que se encontraban, pero nuestras ordenes no eran esa línea, el escuadrón del arcángel Noe era el que se encargaría, pero Erick dijo que no llegarían a tiempo y dejando la formación fue directamente al centro de la batalla y supongo que tú ya conocerás el resto. – decía Zalathras terminando su explicación con algo de preocupación.
- Si, ya conozco la situación – pasaba su mano sobre su cabeza – mientras me encontraba con el Angel Superior Miguel nos llegaron los reportes y allí se encontraba lo que Erick había hecho, y al final termino resultando bien para él, ya que ahora Miguel quiere verlo y felicitarlo – entre risas algo confusas y uno que otro suspiro la platica cada vez se tornaba más calmada.
- Y otra cosa, adonde se encuentra Erick en estos momentos – preguntaba Zanemi algo sorprendido al ver que todavía no había llegado a la reunión.