No es fácil decir adiós
cuando aún quedan sentimientos,
una parte de ti dice quédate,
aquella parte de los recuerdos bonitos,
pero de pronto llegan los malos recuerdos,
y ahí empieza la lucha
entre seguir o no seguir,
no es fácil dejar ir
ni es fácil ver derramar lágrimas
a quien en algún momento
tu corazón eligió.
pero la vida sigue y el tiempo no se detiene,
el va a su propio ritmo.
no es fácil decir adiós y jamás lo será,
ya que siempre alguien sale lastimado,
pero mejor decir adiós ahora
que más tarde cuando todo
se convierta en un completo caos.