Elena
Desperté por los rayos de sol que entraban por mi ventana, voltee y Vincent todavía seguía dormido, no quería despertarlo. Así que me levante muy despacio de la cama para no hacer ningún tipo de ruido. Baje ala cocina, busque en la nevera la leche y en las gavetas el cereal.
Busque el plato ondo, hecho el cereal y después la leche.
— Buenos días — me sorprende la voz de Vincent
— Buenos días — sonrió y llevo una cucharada de cereal ala boca
— ¿Hoy que haremos? — preguntó
— No lo se — suspire
— Bueno yo voy para tienda ¿quieres algo? Tampones
— ¿Tampones
— si para...... Cerrar la llave
— No entiendo
— Elena ...Tampones
— No... no necesito
— Entonces ¿Nunca tienes la regla ?
Sentí la sangre correr por mis mejillas
— ¡Vinnie no hables de sobre ello !— tape mi cara con mis manos
— ¿Que pasa ? Te avergüenza hablar de tu mens-trua-ción conmigo — alza la ceja y veo que esta sonriendo con malicia — A mi no me importa en absoluto
— Pues a mi si — respondí avergonzada
Se acerca a mi, y saca las manos de mi cara.
— Necesitas ¿o no ? — preguntó serio
— No necesito — respondí
— Bien — se acerca a mi frente y deposita un beso dulce
— Te veo al rato
— Bien — sonrío sin separar mis labios
El rubio desapareció.
Encendí la bocina que se encontraba en la cocina, y busque la playlist de KISS. Mientras tarareaba algunas de esos éxitos, recorría la sala bailando.
Pero algo interrumpe mi pequeña felicidad.
El sonido de el celular, me estaba llamando un número desconocido.
¿Quien será?
Dude en contestar pero decidí contestar.
— Buenos días ¿Con quien habló?
— ¿Elena? — dijo de un suspiro
— ¿si? — arrugue la nariz
— Debo verte — dijo la voz femenina ala otra línea de la llamada
— ¿Pero quien eres ? — estaba molestándome
— No puedo decirte — notaba en su voz anota
— ¿Por que? — pregunte — ¿Para que debes verme ?
— Quiero verte en el cementerio del centro.
—¿No me harás nada malo?
— Jamás lo haría... — dijo con su voz melosa
— Bien llegaré en media hora — acepte ir
— Gracias — susurro
Colgué la llamada
Subí ala habitación escogí lo primero que vi, unos jeans azules, blusa negra y tenis blancos.
Y baje enseguida , busque mi cartera y sali por la puerta. Encendí el auto, y fui directo al cementerio. Entre tanta agonía de quien era la chica que en llamo. No tarde en llegar, el cementerio estaba solitario. No había nadie pero ni una mosca. Dude en entrar, pero debía entrar. Baje de el auto, anime ánimos de no se donde y entre Entre lápida y más lápidas, no conseguí a nadie, pero no sabía como era esa chica. Busque en mis contactos al número desconocido.
— ¿en que área estás? — pregunte
— Voltéate — respondió
En ese momento voltee y esa mujer era muy parecida a mi. Su pelo negro, su piel blanca, sus ojos marrones, sus labios finos al igual que los míos, su mirada estaba perdida.
— ¿Quien eres?
— Tu madre...
— No,no — negué varias veces— tu no... — estoy confundida— Mi madre esta muerta......
— Soy yo... — intentó acercarse a mi
— No me abrazases
— Elena soy tu madre — musito
— Tu.. Tu ... — Tartamudeó— tu no eres mi madre — mis ojos comenzaron a arder
— Mi niña — se acercó a mi
Retrocedo, siento mi pecho un vacío muy grande.
— No puedes ser mi madre... mi madre está muerta — repetí
Sus ojos comenzaron a cristalizarse...
se acercó y me abrazo. Y comenzó a llorar incontrolablemente, las lagrimas recorrían mis mejillas.
— Te extrañe — escuche su susurro
Caímos al piso sube sin separarnos en ningún momento.
[...]
— Nos vemos cuando puedas — se despidió ella.
— Te veré mañana te lo garantizo... Mamá — sonrio sin separar mis labios
Sonrió al escuchar la frase "mamá".
— Bien hasta luego — comenzó a caminar.
Voltee y seguí mi camino.
Mi madre está ¡VIVA! No lo puedo creer. Y la historia de mi padre, ¿era real.?No he hablado con mi padre desde hace un tiempo. Debería hablar con el. Veo mi celular y tengo un mensaje de Vincent
¿Donde estás no te conseguí? Me llamas cualquier cosa....Decido llamar a el pelirrubio ya estaba en el auto.
Mi celular estaba conectado al carro por Bluetooth.
Contesto
— Bueno — respondió
— Hola.. — mi voz sonaba apagada.
— ¿Que pasó? — preguntó
— Algo súper extraño — sentí como las lagrimas caían por mis mejillas
— ¿Como que ? — si en ese momento estuviera a su lado vería su cara de confusión
— Te diré en casa... — limpie mis lagrimas con mis dedos.
— Esta bien... Nena
— Chao — colgué la llamada