Capítulo 11
- ¿Quién es la niña mas Linda del planeta?- le pregunta
- Obvio que soy yo- le respondo.
- ¡Oh cariño! hace mucho dejaste de ser niña- me da una sonrisa cómplice y voltea a ver de nuevo a Hil.
- No sé si debo ofenderme, reír o llorar- Pongo mi mano sobre mi pecho y lo observo dramáticamente ofendida.
- Mira cariño vestida así pareces un autentico ángel- le dice y ella solo se dedica a bostezar.- No como Nate- lo voltea a ver - él sin duda es un galán igual a mi- Hil si entiende a la perfección lo que dice su tonto padre ya que se quedo quita y mirándolo seria.- Vamos mi amor tu siempre vas a ser la favorita de papá.- yo solo niego.
- Bueno mi amor, ya estas precioso- le digo arreglando sus guantes- ahora si ya podemos bajar a esperar las visitas.- Kendal al escucharme finalizar esa frase, toma en brazos a nuestra pequeña niña.
- Vamos- digo imitando la acción de mi esposo.- vamos a esperar a todos sus tíos.- volteo a ver a mi esposo que se acerca muy galante y salimos de la habitación.
- Amor- Kendal me susurra al oído ya fuera de nuestra habitación caminando hacia la cocina.
- Hoy es día de fotografías- pienso en voz alta.
- Eso es cierto- Para frente el espejo.
- Camina- suspiro- todos deben de estar desayunando mientras que yo tengo hambre.
- Que no desayunaste suficiente- sonríe- creo que su madre...
- Basta- le pego en el hombro con mi mano libre, Nate y Hildegard están enfocados vernos con los ojos entrecerrados.
- Tranquila, mi amor.- me sonríe y yo comienzo a mecer a Nate ya que se está quedando dormido de nuevo.
- Estos niños pasan más horas dormidos que despiertos.- Volteo a ver los y me percato que ella ya se durmió.-Gemelos tenían que ser- ruedo los ojos.
- Son mis Hijos que esperabas- alardea mientras la acomoda en su brazo- Vamos a sacar la foto del antes y después.
- ¿Cómo así? – frunzo el ceño.
- Vamos, coloca bien a Nate- me dice en lo que busca y encuentra su celular.
- Esta bien- acomodo de la mejor manera a mi niño- Ya entendí porque el "antes y después"- le digo sonriendo. Mi esposo tiene de fondo de pantalla la foto que nos tomamos hace mucho en este mismo lugar cuando yo estaba embarazada.
Ambos posamos para la fotografía y luego de unas cuantas me deja un casto beso en los labios y continuamos nuestro camino hacia la cocina.
Bajamos y como lo había dicho Nana y nuestros padres ya se encontraban desayunando, dejamos a los niños en unas sillitas que tenemos para que descansen en la sala de estar y los alcanzamos.
- Vaya hombre- exclama Nana- Cuando uno los va a buscar ustedes nunca abren la puerta.- dice, Kendal y yo solo nos sonreímos cómplices.
- Buenos Días Nana- dice Kendal- Buenos días a todos.-
- Si, buenos días a todos.
- Buenos días- responden todos al unísono.
- ¿Y los niños?- dice mi madre.
- Es verdad, ¿en donde están mis Nietos?- dice Marco.
- Yo aun no los he visto- dice María Jose.
- Para avisarnos que ya estaban acá subiste Nana? - dice Kendal acercándose a saludar a su madre mientras que yo voy a saludar a mi suegro.- ellos se quedaron dormidos pero están en la sillitas de la sala.
- ¿Arriba? – preguntan todas las mujeres abriendo más de la cuenta los ojos.
- ¿Cómo se les ocurre dejar a solas a los niños en las "sillitas"?- mi madre niega con la cabeza.
- Pues se nos ocurrió así como ustedes pensaron que se quedaron arriba- contesto con un tono de cansancio- es obvio que no voy a dejar a mis hijos solos en el segundo piso- rodo los ojos mientras sirvo fruta en nuestros platos.
- Es que con ustedes dos nunca se sabe.- acota Nana.
- Nana tiene toda la razón.- dice mi madre.
- Ya basta- interrumpe Marco- cuando terminemos de comer estarán despiertos y podremos disfrutar con ellos.- se dibuja una gran sonrisa en su rostro.
Y así se nos pasa la mañana platicando y haciendo diversas cosas todos juntos, hoy no tendríamos que preocuparnos por la comida ya que Ana y Marissa se comprometieron a traer una "sorpresa"- solo espero que no se les haya ocurrido cocinar- no es por ser pesada, pero la cocina en definitiva no es su fuerte aunque una sea repostera no es muy buena sazonando con especies.
...
*Llaman a la puerta*
-Yo voy- dice nana levantándose de la mesa del patio.
Estamos todos en la terraza tomando el sol mientras esperábamos la llegada de Ana y Marisa con su respectiva familia.
-Buen día- pasa la puerta y se para frente a nosotros.
-Oh Dios cuanto tiempo- dice mi madre levantándose a saludar.
-Es verdad- dice correspondiendo el abrazo de mi madre.- Es un placer verlos, les presento a mi esposa e hijos.- dice y entra por la puerta Sandi con Luz de la mano y por lo que veo esta embarazada de nuevo.
-Que bueno que están acá- dice mi esposo levantándose a saludar a mí mejor amigo de lo más normal con Nate en brazos...
-¿Por qué nunca me cuentan que vendrán?- hago un puchero- vengan a conocer a su sobrina.- digo con una sonrisa mientras todos terminan de saludar y tomar asiento.
*Llaman a la puerta de nuevo*
-Yo voy- digo esta vez.
Todos y siguen en su platica mientras que yo me voy alejando con cada paso que doy, al llegar a la puerta pude observar por las ventanas de los costados que no hay nadie... Así que opto por abrir la puerta.
-¡¡¡Santo Cielo!!!- un grito ahogado.- ¡Kendal!
-Cielo que...- se queda callado al observar lo mismo que yo.
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Editado: 01.11.2018