El amor de una vida

Hoy un anciano se sentó a mi lado en el parque, se quedó viendo a la nada por unos segundos y después grito su nombre. 
 

—Juliana!... 
 

Note que confundió a una chica con ella y la curiosidad me gano. 
 

—Quien es Juliana? —Pregunte. 
 

El silencio reinó por un momento, pero no sentí más que melancolía al ver su reacción. 
 

—Fue una chica que conocí hace muchos años, fue el amor de mi vida... Y por una estupidez la perdí.
 

—Bueno... Al menos conoció y estuvo con el amor de su vida, veo que aún lleva su anillo. 
 

—No. —me miró directo a los ojos. —No me case con ella, tuve hijos, hice una vida con otra persona, pero nunca me pude olvidar de ella... Fui un tonto cuando la deje ir. Y aunque fui feliz, estoy seguro de que ella fue el amor de mi vida.

Hay lo entendí, justo en ese momento se volvió tan clara la respuesta que mis puños se cerraron y mis dientes crujieron, ya conocí al amor de mi vida y también lo perdí, ni siquiera pude tenerlo... Sentí algo de lástima por el anciano, pero no tanta como la que él tuvo por mí. Su mirada lo dijo todo, ambos respiramos, pero no estamos completamente vivos, verdad?.