Desperté con un par de lágrimas, tal vez tuve un sueño triste y estoy segura de que era de ti,
pero aun que intente recordar no se cual fue exactamente el sueño que agita mi corazón.
Los días han sido así desde que decidiste irte de mi lado, las preguntas del porque te fuiste, por qué no me explicaste que hice mal, ronda a mi cabeza, si tan solo me hubieras dicho el error que hice tal vez pudiera haber enmendado el dolor que te causé, pero solo decidiste decirme adiós, tal vez la relación no supe valorarla, tal vez fui demasiado expresiva o tal vez me falto algo.
Desde la última vez que fui a tu casa esperanzada con tener una oportunidad de saber qué fue lo que te hizo cambiar, quería disculparme antes de decir un adiós quería decirte cuanto te quería, y lo mucho que me importabas, pero ese día después de haber salido a divertidos, después de haber hecho un día común como otros lo, podía sentir que estabas incomoda, desesperada, no podías ni verme al rostro, no sabía cómo retirarme y dejarte respirar, pero mi corazón era débil quería aferrarse decirte lo siento por lo que sea que haya hecho mal, pero no me dejes...
dependí tanto de ti emocionalmente que el saber que este era nuestra última conversación me carecía de valor de preguntarte por qué? ¿porque ya no me miras a los ojos?
porque no te Ries como hace un par de días anteriores, porque estas esperando la hora para decirme adiós y marcharte?, pero lo único que hice ese día, fue llorar como si a un niño le hubieran quitado su juguete, como si hubiera perdido un ser querido y tal vez así me sentía, porque se estaba yendo de mi lado, la persona que mejor me conocía, la persona que, hacia olvidarme de mis problemas, se estaba yendo de mi futuro alguien con quien prometí estar juntas para contar anécdotas de nuestras locuras a nuestros futuros nietos.
Tal vez creo saber cuál fue el detalle de aquella noche...
Regresemos un poco atrás en el tiempo y contemos una historia, llena de sentimientos, alegría y no, no es un amor correspondido, de hecho, ni siquiera es de amor, a veces la vida nos dice que debes conseguir una pareja que será esa persona tu soporte, tu alegría tu todo, pero yo antes de confiar en el amor creí en la amistad, decid conocer alguien que compartíamos locuras y mis gustos, decidí por primera vez creer en la amistad, y te digo algo cuándo pierdes a tu alma gemela duele de la misma forma como si te hubiera arrebatado un ser querido.
Mi nombre es Lisa Maguire, actualmente estoy empezando la universidad, mi vida no es tan interesante, pero tal vez mi historia se asimile a alguna, comencemos con un poco atrás de mi historia antes de presentarte, a mi alma gemela, y no es de manera romántica es más como de lazos de sangre sin llevar la misma, ella se llama Wang Yi, pero detengámonos en este punto.
Vengo de una familia humilde por humilde me refiero a que mi madre batallo mucho para llevar alimentos a nuestro hogar, tal vez se pregunten y tu padre?, bueno él es alguien que no veía en semanas, algunas veces y otras duraba todo el año para verlo, según mi padre era porque su trabajo era de chofer y tenía que ir y venir, pero bueno desde pequeña fui perspicaz así que si usamos la lógica ningún viaje puede durar tanto tiempo, debe descansar un operador, pero esa es otra historia para más adelante.
A causa de los engaños de mi padre, mi madre siempre tuvo que trabajar todo el día, y aun así no sé cómo esa mujer le hacía para darnos tiempo y atendernos cuando la necesitábamos, estoy segura de que mi madre no es perfecta, porque nadie lo espero estoy segura de que nos ama tanta y que sacrifico tanto por que sus hijos fueran felices.
En mi familia somos un total de 4 hijos, yo soy la menor de ellos somos 3 mujeres y 1 hombre, aunque de hombre le queda grande esa palabra. En fin, mi madre despertaba a las 2 am para salir como a las 10 am y trabajaba como panadera en una tienda muy grande de Inglaterra, es una tienda local que todos conocemos, cuando salía de trabajar llegaba a otro trabajo que era de 10 am como a las 4 o 5 pm salía e iba por nosotros a la escuela, por mi hermana y yo las más pequeñas.
después nos daba de comer y se iba a casa por casa aplicar cortes de cabello, manicure etc. Algunas veces nos llevaba otras se iba sola, al regresar a las 8 o 10 pm más o menos nos arreglaba para mañana, nos daba de cenar y nos acostábamos para el siguiente día.
Así que no era perfecta pero antes mis ojos esa mujer hizo todo para no sufrir, aun así, la economía en mi país era algo difícil por lo que para alguien sin estudios aunque tuviera 3 o 4 trabajos no alcazaba para que viviéramos bien, más que mis hermanos mayores no veían el sacrificio y solo pedían cosas, mi hermano por ser el único hombre le daba toda mi madre, ella ahorraba para darle buena ropa, un auto etc. mi madre siempre fue educada a la antigua donde el hombre tiene más valor qué la mujer, mi padre adoraba mi hermana que era mayor que yo por 5 años la que nació antes que yo, y ambos se sentía orgulloso de la mayor, así que cada quien tenía su favorito, yo era como una especie de que tal vez no me habían planeado, pero ya estaba aquí y no les quedaba de otra más que educarme.
Aun así, mi madre siempre me cuido y amo, de mi padre no puedo decir mucho siempre hacia la distinción de mi versus mis hermanos. En fin, cuando nací estaba muy enferma del corazón mis padres me contaron que al nacer me atoré con el cordón umbilical lo que me provocó que no podían traerme como parto normal o podría desgarrar a mi madre, y mi madre estaba quedando inconciente, al final el parto fue tan difícil que nací con dos soplos, arritmia cardiaca, bilirrubina y defensas muy bajas.
Durante mi primer año me mencionaron que estuve en incubadora, pero los doctores le decían a mis padres que debía operarme