Camino al instituto me tropese con Colton. Mi mejor amigo.
Colton Scott es el que me ha apoyado y acompañado desde los 15 años. Desde aquel día obscuro.
Lo amo, en serio, lo amo inmensamente. Es el mejor amigo, hermano y compañero que he podido alguna vez tener.
Y eso él lo sabe perfectamente.
- Beth, ¿cómo pasaste la noche? - Preguntó con preocupación, el esta al tanto de mis pesadillas, y sabe perfectamete que nunca, durante 5 largos años, las he dejado de tener.
- Bien.- le conteste. - Ya hemos hablado sobre esto Scott. - le reproche con pereza. - te he dicho sentenares de veces que ya no son tan frecuentes.- lo miro con fastidio, pero luego de un suspiro le digo - se que desde que me mude te has estado preocupando un poco más, pero no miento cuando te digo que ya no me afectan como los 3 primeros años.- lo miro fijamente tratando de transmitirle tranquilidad y seguridad- mi reacción al despertar ya no es tan... intensa. - el me mira con severidad y una pizca de comprensión por cinco minutos antes de ladear una sonrisa y envolverme en un consolador y asfixiante abrazo.
- Se que mientes, Morgan. - susurra en mi oido.- pero te lo dejo pasar porque estoy completamente seguro que solo lo haces para tranquilizarme. - Y despues de darme un sonoro beso en la mejilla se separa para poder agarrarme de la mano y caminar juntos hacia el instituto.
¿Ven?
Por estas cosas, y muchas más, es que este pendejo se convirtio en mi mejor amigo. Se lo vuelvo a repetir... Lo amo, joder.
Y la persona que si quiera piense en arrebatarmelo, se ganara un pasaje de ida al infierno, sin retorno.