Si decido quedarme

Holly es divertida, extrovertida, escandalosa, no tiene modales y es toda una vaquera.

Jack es un chico soñador que no ve la hora de casarse con su novia Holly y hacerse cargo de la hacienda de su familia. Cuando por fin logra su sueño empieza a planear tener una gran familia con su esposa, pero todas sus ilusiones se desvanecen cuando llega la prima de ella.

Holly es invitada a pasar unas vacaciones en la gran ciudad, nunca ha salido de su pueblo y esta es la oportunidad de hacerlo y cuando se va y conoce la gran ciudad no puede evitar sentirse maravillada con un mundo que desconocía.

Lo principal y lo que se acostumbra en su pueblo es casarte joven, tener hijos y ayudar al marido con la casa y la granja.  Pero después de escuchar una y otra vez a su prima y a sus tíos por parte de su madre de lo importante que es estudiar e ir a la universidad y vivir esa experiencia antes de ser una esposa y madre decide decirle a su familia el cambio de sus planes.

Muchos se sorprenden al escucharla aun así deciden apoyarla.

Ella emprende este viaje sin saber que terminaría cambiando el rumbo de su vida. Holly nunca más regresó a su casa, se aleja de todos, en especial de su esposo quien aún sueña que ella vuelva en cualquier momento.

Pasan los años y cada uno siguió con su vida hasta que un día Holly aparece de nuevo en su hacienda.

—¿Qué haces aquí?— Pregunta Jack malhumorado.

—Necesitamos hablar— Dice con voz suave.

Los ojos de Jack viajan por todo su cuerpo y le cuesta creer que esa mujer que tiene delante sea la misma chica revoltosa de quien él se enamoró.
Ahora ella está vestida como una chica de ciudad, tacones, falda tubo y ni hablar de su cabello.

—¿Para qué? — Pregunta —¿Ahora si quieres hablar?—

—Yo...

—¿Qué quieres Holly?—

—Quiero el divorcio— Sus ojos bajan hacia su mano donde hay un enorme diamante.

—No— Jack se da la vuelta y empieza a caminar hacia el establo.

—¿Cómo qué no?— Escucha decir —¿Acaso quieres seguir casado?—

—Me da igual si estamos casados o no—

—¿Dime que quieres para que me des el divorcio? —

Una sonrisa retorcida se dibuja en sus labios.

Ahora Jack podrá sacarse la espina que le dejó el abandono de su esposa. Piensa desquitarse y complicarles las cosas.

Holly tendrá que pasar tres meses en el rancho de su esposo y no será fácil. Ahora ella es una chica sofisticada de la ciudad con un prometido millonario y no piensa dejar su buena vida para volver a un mugroso y horrible rancho. Aunque su esposo ya no es el chico flacuchento con el que se casó y ahora es un fornido e increíble, guapo y sexy hombre (Cualquiera de sus amigas dirían que es modelo de ropa interior masculina) y ella no puedo evitar babear y fantasear cómo sería estar entre esos músculos y abdominales.
Debe resistir, dejar pasar tres meses e irse de nuevo para la gran ciudad.

 Aunque su esposo no le va a poner las cosas fáciles.
 
 

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Si decido quedarme