Capítulo final de VERDADES QUE DUELEN ❤️

Hemos llegado al final de esta historia y no me queda más que agradecer el apoyo que me han brindado. A quienes han estado desde el principio, desde Mentiras piadosas, y a quienes se fueron sumando en el camino. No tengo palabras para expresarles lo mucho que he disfrutado de cada uno de sus comentarios y de sus teorías. Espero que podamos leerlos en mis próximos proyectos, de los que pronto se enterarán.

SIn más que agregar, me despido por hoy. Que disfruten los capítulos finales, solo faltaría el epílogo que también será publicado en estos días.

Les dejo un pequeño fragmento de lo que leerán dentro de la historia:

—Te arrancaré con mis propias manos cada uno de tus asquerosos dedos. Te lo advierto, aléjate de ella.

—¿O qué?

La lluvia de disparos que se escuchan desde el exterior es la distracción que necesito para librarme de los hombres que me sujetan. Todo pasa demasiado rápido: los hombres me sueltan tratando de defenderse del ataque, lo que me permite tomar una segunda arma que cargo en el interior de mi chaleco, retiro el seguro y disparo al infeliz que intenta acercarse a Catalina, esta se encoge cuanto puede sobre su silla e intento llegar hasta ella, pero un disparo en mi costado me detiene, haciéndome doblar mi cuerpo con dolor.

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