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Te recomiendo esta hermosa historia donde el amor no solo es entre hombre y mujer, pues un niño desamparado también puede lograrlo.
Fragmento:
—¿Y es que acaso esta nueva vida te impide tener un hijo?, ¿Te impide tener una exesposa? No seas cínico, nunca quisiste una familia y apenas tuviste la oportunidad te marchaste. — le sigue reprochando la mujer.
—No quería, pero éramos jóvenes y por tu terquedad tuve que hacerme cargo cuando no era lo que quería. — quiero interrumpir, pero lo escucho me deja congelada en mi sitio. ¿Martín tiene un hijo? No entiendo nada.
—Tenías veintitrés años, no eras precisamente un niño cuando tuvimos a Mateo. Tienes un hijo de diez años que te necesita. Deja de ser egoísta por una vez en tu vida. Él te necesita ahora, yo ya no puedo cuidar de él. — se me cae lo que tengo en la mano y ambos se giran a hacia mí.
—¿Tienes un hijo y una exesposa? — le pregunto al hombre delante de mí.
—Déjame explicarlo. — me dice.
—Oh, claro que lo harás. — me siento molesta, pero más que todo engañada.
¿Con quién estuve conviviendo por dos años?
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