Nunca fuiste mío(pero de igual manera voy a robarte) 18+

Alex siempre había sido así: intocable.
No porque nadie pudiera tocarlo, sino porque nadie parecía atreverse a quedarse demasiado tiempo.

Liam lo supo desde el primer día.

Lo observó amar a otros con una distancia elegante, comprometerse sin pasión, sonreír sin entregarse del todo. Y aun así, lo amó. En silencio. Como se aman las cosas que no se pueden pedir.

Durante años fue el amigo fiel, el apoyo constante, la sombra cálida en la que Alex descansaba sin sospechar que allí también ardía un incendio.

Pero el amor, cuando se reprime demasiado tiempo, se vuelve peligroso.

Y cuando el mundo perfecto de Alex empezó a resquebrajarse, Liam comprendió algo terrible y delicioso al mismo tiempo:

No necesitaba que Alex lo eligiera.
Solo necesitaba que cayera.

Y esta vez, no iba a quedarse mi