Capitulo 11

CON EMMA Y JIN.

–Tengo que… salir… de aquí…– Emma entro en pánico, y su mirada ya estaba llena de lágrimas, quien estas se deslizaban por su mejilla y terminaban el recorrido en su barbilla –Tranquila… lo haremos rápido, solo... Taeh deja la puerta medio abierta cuando se va ¿verdad? Eso me dijiste, por lo que vi… Joon no viene al sótano–

–A veces viene…–

–Bien… calculando eso… no hay ningún objeto afilado que podamos utilizar, así que… tocaría usar nuestros dientes, primero yo te desato. Cuando ya sea de noche… ¿Cómo sabes si es de noche o de día? – pregunto Jin –En esa ventanilla, la he intentado abrir, pero no abre– respondió Emma –Es perfecto, cuando sea de noche saldremos. Con sumo cuidado podremos abrir la puerta ya desatados… si ellos tienen seguridad en la entrada estaremos jodidos… podremos salir por alguna ventana o por el jardín–

–Me parece bien…–

–Espero que estés lista para esto Emma–

–Lo estoy. He esperado salir de aquí con ansias, no voy a desperdiciar esta oportunidad–

EN LA NOCHE.

Emma trato de estirar sus manos lo más posible hacia Jin, le habían amarrado de una forma extraña…

Una cuerda que rodea su cintura eso hace que sus brazos estén juntos en su torso, pero no están tan cerca a su boca para desatarlos con la boca, sus manos también estaban atadas, sus piernas y pies también, mantenía en el suelo así que… se tenía que arrastrar para llegar a algún lado del pequeño sótano, pero podía sentarse.

Jin se puso a jugar con sus dientes con esa cuerda de las manos de Emma, con varios intentos fallidos lo logro ¡qué bien! Ahora le faltaba la de los pies como mínimo… no tenía idea de cómo iba a desatar eso, eso parecía que fuera un nudo hecho a lo loco.

–¿Cómo lo haremos? – pregunto Emma –¿No puedes levantarte? – pregunto Jin, estaban hablando en susurros obviamente –puedo dar pequeños saltos y llegar a tus manos–

–Hazlo– respondió Jin de inmediato, se les acababa el tiempo para escapar. Emma dio pequeños saltos como dio, golpeando su cuerpo en el suelo con cada salto que daba, y quedo atrás de Jin, empezó a desatar rápidamente sus manos, si soltaba sus manos ella estaría libre –Ya está–

Jin se levantó ágilmente y la desato en un abrir y cerrar de ojos la libero –Vámonos–

Subieron lentamente las escaleras, no se escuchaba un alma en la casa ¿se habían ido? Jin iba de primero, no quería que Emma saliera lastimada. Con un poco de miedo, pero decidido fue a abrir la puerta del sótano y como dijo Emma estaba abierta, Jin saco su frente y luego sus ojos achinados para ver si había alguien.

–Vamos– susurro, dio un paso a fuera, y miro hacia todos los lados esperando algún grito de… “¡Jin escapo!” pero no lo escuchaba, Emma salió y también rectifico si había alguien, fueron examinando la sala lentamente y vieron la puerta del jardín, Jin se adelantó y trato de ver por un pequeño agujero que había. No vio a nadie, pensó que estaban a los costados cuidando. Se acercó a Emma con pasos pequeños, sin ruido –Emma, agarra ese jarrón y salgamos, cuando lo hagamos corre lo más rápido que te den tus piernas– ordeno Jin, Emma sintió con su cabeza para no hacer ruido con su voz y agarro el jarrón que Jin le dijo que agarrara, sus manos estaban con un temblor que había sentido aquella vez que asesino a dos personas… de un disparo saliendo de la mansión de Suga.

Emma fue atrás de Jin quien este también tenía un jarrón…

(imagínenselo en cámara lenta)

Abrieron la puerta y los dos guardias que estaban cuidando la puerta fueron golpeados por los jarrones noqueándolos y dejándolos inconscientes –¡vamos! – grito Jin, salieron corriendo, ya con tan pocos metros de distancia ya sentían que sus pulmones y sus piernas ya estaban al punto máximo de explotar y de colapsar, varios disparos se empezaron a escuchar en la escena –¡No te detengas! –Jin grito a los 4 vientos… aquellos recuerdos venían a su memoria, aquella sensación de morir le invadía todo el cuerpo, esa sensación… que… odiaba con toda su maldita alma, no quería sentirla otra vez… no quería, pero esta vez tenía que ser fuerte y salvar a aquella niña inocente que Taehyung había secuestrado por puro berrinche de este.

Pero… para su suerte… una bala fue disparada directo en la pierna de Jin haciendo que se caiga repentinamente y Emma lo vea, pero seguía corriendo sin importarle nada “No puedo detenerme… lo siento Jin… gracias por…” Emma para en seco al ver a Taehyung con una sonrisa en frente de ella, la valla estaba tan cerca y tan pequeña que podía saltarla sin ningún problema, tan cerca de la salvación y de la libertad… ya no había escapatoria de ese mundo.