PRIMERA PARTE: RECUERDOS ESCRITOS CON LÁGRIMAS DE UN SOLDADO.

Desde muy joven Gabriel ha sido maltratado y sabe lo dura que puede llegar a ser la vida, todo debido a que esa mujer se casó con su padre. La única razón por la que ha aguantado tantos años es por su pequeño hermano. Al enlistarse en el ejército encontrará la paz que su corazón tanto anhela. Motivo por el cuál de anciano carga  con el pesar de un triste pasado.

Lizz quedó huérfana desde muy joven, su hermano se hizo cargo de ella pero la guerra se lo arrebató. Al estar completamente sola tuvo que valerse por sí misma y trabajar. Ahora es una bibliotecaria solitaria y amante de los libros que se esconde del mundo tras los muros de aquel lugar que su madre ayudó a fundar, cómo una forma de sentir la cercanía de la familia perdida.

Sus vidas se cruzaron en un día de Navidad y de alguna forma sus destinos jamás se volvieron a separar… y aunque ella ya no esté, él se niega a dejar su recuerdo en el pasado y vive rememorando cada momento a su lado… Porque en su corazón, cada uno de ellos equivale a una vida entera.

Algunas veces la muerte no significa el final de una historia, sino el comienzo de una nueva vida para hacer realidad lo que no pudo ser…