_Cómo me veo-Madison comenzó a modelar para mostrar su conjunto, el cual consistía en unos vaqueros con pequeñas roturas y un crop top blanco . Por mi parte, llevo puesto un crop top blanco con cuadros negros, una falda con el mismo diseño y unos vans.
_Estás perfecta.
_Gracias-Sonrió nerviosa.
_Bajamos-Señalo la puerta.
_Sí, déjame guardar las cosas.
-Vale.
_Están tocando- Dijo con medio cuerpo dentro del armario.
_Voy-Grité y dirigí mis pasos a la puerta de la habitación. Al girar la perilla vi un zapato atravesar la puerta a la velocidad de la luz. En un ágil movimiento esquivé el golpe.
_Auch-Exclamó Madison.
Una Samantha completamente enojada.
_Si se les vuelve a ocurrir dejarme solas, no viven para hacer el cuento-Chilló molesta.
_Lo sentimos, pero, creímos que necesitabas hablar con Eugene para explicarle que ya tienes pareja-Expliqué tranquila y sentí a la ojizarca intentando reprimir una carcajada.
_No te vuelvas a reír-Le gritó a Madison lanzándole el otro zapato.
Y así, inició una guerra de zapatos, almohadas y todo lo que se topara en nuestro camino.
_Voy a cambiarme-Habló Samantha mientras escogía de nuestro armario algunas prendas. Se deshizo de la ropa laboral y se colocó un short de mezclilla y una camiseta holgada con estampado de flores. Ya lista, bajamos a la primera planta donde la música rompía los tímpanos, el olor a alcohol inundaba el lugar y los adolescentes hormonales intercambiando saliva por los rincones.
¡Al fin mi ambiente!
Fui a la barra y pedí una margarita. Comencé a moverme al ritmo de la música y a beber. Estuve bailando hasta que ya no sentía mis pies por lo que no quedó más remedio que irme a sentar. Me acomodé en un sofá y me dediqué a buscar a mis amigos con la mirada, Samantha y Daniel andaban Enrollados en una esquina. Madison estaba sentada en las piernas de un moreno besuquiándose con él. Y yo, toda borracha , cansada y con deseos de comer...Chocolate?.
_Voy a comer chocolate-Afirmé poniéndome de pie. Caminé con torpeza hasta la cocina y, NO HABÍA CHOCOLATE. Uff.
Caminé hasta la entrada principal con el objetivo de ir a una dulcería cercana a por chocolate cuando sentí mi nombre ser pronunciado con un poco de torpeza.
_Olivia-Giro en mis talones y me encuentro al cerdo caminando en dirección a mí.
_Qué quieres-Balbuceo.
_Estás ebria-Interroga escaneando mi anatomía.
_No estoy ebria-Gruño_Sólo un poquito así-Marco con mis dedos y comienzo a reír como una estúpida.
_Definitivamente estás ebria-Asintió_A dónde ibas- Nathan parecía estar sobrio(Aunque a veces atropellaba las palabras)
_A por chocolate-Sonrío cual niña de cinco años_Quieres venir-
_No tengo nada mejor que hacer-Se encogió de hombros.
_Nathan-Una voz chillona se sintió a lo lejos. Al girarme, vi a una rubia correr a nuestro encuentro.
_Vámonos -Exclamó y acto seguido me jaló del brazo y me sacó de la fiesta.
Luego de dos manzanas a trote, nos detuvimos a descansar, mierda, esa chica si que corría. Nos recostamos a la acera y me dejé caer, acostándome en el suelo.
_Quién era ella-Pregunto con voz más calmada.
_Una chica la cual no supera que rompimos hace un mes-Exclamó fastidiado.
_Qué quieres hacer-Hablo luego de un rato.
_Se me ocurren muchas cosas en este momento-Me dio una sonrisa torcida y le di un golpe en el hombro.
_Vale me callo, tú no querías chocolate.
_Ya no-Me encojo de hombros.
_Bien, vayamos a la fiesta.
_Que no-Negué con la cabeza.
_Okey tigresa, el quedarnos solos fue tu decisión-Río y yo rodé los ojos.
_No quiero ir a la fiesta. Me voy a mi casa.
_Claro princesita, cuidado y no te coma el lobo feroz-
_Está muy ocupado intentando tumbar tu casa, cerdo-Me reí por mi perfecta ofensa y seguí caminando.
_No me hagas ir por tí-Gritó a unos tres metros de distancia.
_Inténtalo-Le reté.
_Tu así lo quisiste- Se desprendió para atraparme por lo que aceleré el paso y terminé torciéndome el tobillo.
_Mierda-Exclamo. El me carga en brazos riendo.
_Como pesas-
_Dilo otra vez y te la parto-Nos carcajeamos. Le acaricié la mejilla mientras caminabamo(Más bien él caminaba) hasta la fiesta. El me miró y me perdí en ese mar azul.
_No eres fea-Dijo detallando mi rostro.
_Sí, tú tampoco estás mal-Sonreí y seguimos el recorrido. Llegamos a la fiesta, él me acomodó en el asiento del copiloto y se fue al del chofer. Luego de minutos me desmayé...o al menos eso sentí.
(...)
Me estiré en la cama deshaciéndome de las sábanas. Abrí los ojos con pesar e identifiqué una pared azul, seguí detallando la habitación y supe que era de un hombre. Analicé mi vestimenta, la cual consistía en un pullover cinco tallas mayor y mi panty. Salí de la habitación chocando con la cruda realidad ESTA ERA LA CASA DE MADISON sentí unas voces en la sala de estar, dirigí mis pasos hasta dicho lugar y me encontré con la chillona y el cerdo. Ella al verme corrió echa una furia a mi encuentro por lo que me encerré en el baño.
_Sal de ahí maldita bruja, a ver si aprendes a no meterte con novios ajenos, exclamaba golpeando la puerta. Honestamente no recuerdo nada, por lo que me golpeo mentalmente. Su voz me era conocida, comencé a recordar que en la fiesta me dio deseos de comer...chocolate? En serio?
Los golpes seguían hasta que Nathan logró alejarla. Yo sólo le suplicaba a mi subconsciente.
Dime que no tuvimos sexo.
Tuvieron sexo, tuvieron sexo tuvieron sexo.
Cállate -Le ordeno molesta.
Sexo sexo sexo sexo
Gruño y salgo del baño antes de que termine loca.
Para mi suerte, la chica ya se había ido. Nathan estaba tumbado en un sofá.
_Qué pasó ayer-Digo parándome frente a él.
_Eso quisiera saber-Se pasó la mano por la cabeza.
_Dime que no tuvimos sexo-Le imploro nerviosa.
_Si lo hicimos-Me dio una de sus sonrisas torcidas.
_Cómo lo sabes? Tú no eras el que no recordaba-Le recuerdo.
_Lo sé porque fui yo quien te puso la camiseta-Respondió.
_Mierda-Me golpeo mentalmente._Cómo llegué aquí-Vuelvo a preguntar intentando recordar algo.
_Obviamente te traje yo, pero no recuerdo porqué. -Se encoge de hombros.
_Quién era ella-
_Mi ex, te lo dije ayer-Se pone de pie.
_Entonces si recuerdas-Afirmo.
_Algunas cosas vagamente, yo no estaba tan ebrio. Sé que querías chocolate.
_Ay, eso si lo recuerdo-Bufo.
_Si quieres date una ducha y arréglate, no creo que a tus padres les agrade verte llegar así-Me aconseja mientras se va a su habitación. No respondí y fui a darme una ducha.
El agua recorría cada espacio de mi piel mientras intentaba deshacerme de la situación, como si fuera tan fácil!.
Tengo deseos de llorar, pero llorar de rabia por haberme acostado con ese sin vergüenza. Intentaba recordar, pero nada.
(...)
Ya salida del baño, me volví a portar mi vestimenta y recogí mis cosas, no quería mirarlo a la cara. Me daba vergüenza, ha de creer que soy una zorra que se mete con el primero que le coquetee.
Ya lista, salí de la habitación con dirección a la salida.
_No quieres desayunar- Volteo a verlo. Madre mía, por qué hace esto tan difícil. Vestía unos vaqueros desabotonados que dejaban a la vista parte de su boxer, su tórax desnudo pero bien definido me tentaba a acercarme y tocarlo y para qué les voy a decir lo que tengo deseos.
Aléjate Satanás. Pero qué digo? Antes no opinaba así de él. Sigue siendo un cerdo, un cerdo con un...tatuaje? Cómo si el engendro no pudiese ser más sexy, tenía cerca de su clavícula un tatuaje que decía Kiss Here. Maldito sexy hijo de su pinche madre.
_Ya terminaste-Pregunta burlón mientras enarca una ceja_Si quieres repetir dilo y ya. Pero no te quedes mirándome así, soy malo captando indirectas-Sonrió mostrando los hoyuelos que se forman en sus mejillas.
_Eh...yo...si...eh...dónde está Madison-Hago oídos sordos a su comentario lo cual hace que su risa aumente. No puedo ponerme más rojita.
_Eso es lo único que se te ocurre-Se rió_No durmió aquí, debe andar con Alan y mis padres, no pasaron la noche quí. Así que tranquila, tu expediente de princesita sigue igual de intachable. Ahora sí, quieres desayunar-Repite cansado.
_No-Hablo cortante. AAcomAcom