__ Bueno hijos, ya se les está haciendo como que tarde para que vayan a la universidad –admitió el hombre en el desayuno- Luis, mi auto está a la disposición de ustedes, con mucho fundamento, luego iremos a sacar tu licencia –lanzo las llave y el menor las agarro en el aire- maneja con cuidado, ¿de acuerdo?
__ Gracias papá, lo tendré ya lo veras –sonrió-
__ Laura –su madre se dirigió hacia ella- recuérdale a tu hermano colocarse siempre su cinturón, acá no es como en Venezuela y no quiero estar pagando multas por ello. –afirmo-
__ Lo haré mamá, de ser así, lo pones a trabajar, ¿Qué tanto? –Ambas mujeres rieron por la expresión de Luis- pero si estoy emocionada, algo me dice que nos irá muy bien.
__ Ahora déjame preguntarte algo, eso lo dices, ¿por qué es el primer día o por qué volverás a ver a Joseph? -La chica solo carcajeo para golpear su brazo con fuerzas y fue así que se despidieron de sus padres para proseguir a subir al auto; estando ahí, Laura dio paso a colocar un poco de música- Esa es buena, déjala. –dijo llevando el ritmo con su cabeza, para iniciar con su recorrido hasta la universidad, al llegar, los dos bajaron y suspiraron frente a esta- Laura…
__ ¿Sí?
__ Si algún chico te llega a coquetear, lo golpeare, sea quien sea, ¿entendido?
__ Lo siento, pero si me coquetean, coqueteare –se encogió de hombros, para caminar-
__ Esta niña… -negó entre risas para poder alcanzarla y así proseguir a encontrar sus salones, como era de suponerse, el chico acompaño a su hermana a buscar su aula de clases para después ponerse en marcha con el suyo-
Sin embargo, la menor observo como unas chicas le sonreían a su hermano, mientras que él les devolvía el gesto, así que con intriga, lo encaro;
__ Óyeme un momento, ¿por qué ellas si te pueden coquetear, Luis?
__ Es que soy irresistible –acomodo el cuello de su camisa y golpeo suavemente su barbilla-
__ Que idiota. –se burló para adentrarse a su salón quien sorprendida observo a sus dos amigas- ¿Veremos clases juntas?
__ Creo que tenemos clases compartidas, Laura –confesó con emoción Elizabeth para abrazarla-
__ Es increíble, así podrás ponerte al día mucho más rápido, pequeña –con una sonrisa, froto su brazo para así pasarle sus apuntes y mirara un poco-
__ Gracias, Gaby –agradeció y comenzó su deber mientras llegaba el docente. Así pasaron las siguientes clases en la cual cada una de ellas le hacía saber lo que a Laura se le complicaba, ya que ambas metodologías tanto de su país como ahora, eran distintas; para la hora del almuerzo, la chica se encontraba un poco ansiosa, pues esperaba que Wolfang dejara en paz a Joseph, pero su pensamiento fue interrumpido gracias a su hermano- ¿Y eso? ¿Qué haces acá?
__ Simplemente te extrañe y quise venir a verte –la abrazó y besó su hombro-
__ Olvidaste tu almuerzo, ¿no es así? –pregunto negando, a lo que él asintió- ¿Por qué nunca estas pendiente de tus cosas? –frunció su ceño y bufó-
__ No te enojes conmigo, Laura –se recostó a su lado- se me paso, de verdad…
Pero las dos amigas ignorantes a la situación que percibían decidieron intervenir;
__ Lo siento, pero ¿y tú eres?
__ Elizabeth, ¿no es obvio? Es el novio de Laura…
Los hermanos al escuchar esa oración, no dudaron en reír con ganas.
__ No preciosa, ella es mi pequeña y sexy hermanita –sonrió para volver a abrazarla-
__ ¿tú eres Luis? –pregunto y el solo asintió con una sonrisita- ¡Que gusto! Mi nombre es Gabriela.
__ El gusto es mío –estiro su mano para poder estrecharla con su nueva compañera, hasta que unos ruidos lo hacen fruncir su ceño-
__ Por favor, otra vez no. –Expuso Elizabeth- aún sigo sin entender porque Joseph acepta esto. –negó apenada-
Laura se giró para confirmar lo que decía su amiga y efectivamente era cierto, así que cuando iba a levantarse, su hermano la detuvo en un fuerte agarre.
__ Debo ir…
__ No lo hagas.
__ Pero Luis…
__ He dicho que no, Laura –alzo su voz de una manera autoritaria, sorprendiendo así a las dos compañeras de su hermana. Por ende, la menor se levantó enojada y se marchó de dicho lugar- Espera… -pero no le prestó atención, ya era tarde- ¡Dios! –Suspiro, pasando las manos por su cabello- lo siento mucho, nosotros no somos así, solo que sé muy bien la historia entre esos chicos y mi hermana, es por eso que no quiero que vuelva a suceder lo mismo.
__ No te preocupes, te entendemos porque nosotras también se lo habíamos comentado.
__ Pero Laura es muy terca, sobre todo si se trata de ayudarlo. –confesó-
__ Es su primer amor y no se puede olvidar, así haya pasado aquel terrible incidente.
Luis solo negó y se puso de pie para tratar de dar con su hermana.
__ Un gusto en conocerlas, pero ya debo irme.
Luis no pudo dar con su hermana en todo lo que resto de las clases, mucho menos al regresar a su hogar, puesto que decidió no almorzar con su persona. Cuando eran las 14:00H inicio con la jornada laboral en la cafetería y era obvio que su hermano también debía estar en ese lugar. Sin embargo, no le dirigió ni una palabra, era como si estuviese un completo desconocido y al dar las 18:00H, arreglo su parte de la cafetería para subir directamente a su habitación. Sus padres se habían percatado de la situación, pero decidieron no irrumpir en aquello, ya que ellos eran mayores de edad y sabrían como resolver sus diferencias. Laura se había mantenido acostada por unos minutos, hasta que los toques en su puerta se hicieron presentes y sabia de quien se trataba.
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Editado: 03.11.2020