La habitación estaba impregnada de un silencio abrumador, y Noemí cerró los ojos para intentar recordar la sonrisa contagiosa de Ana, sus abrazos cálidos y las charlas sobre sus sueños y aspiraciones.
El médico se acercó a ella. — Tengo que entregarla algo...
Noemí lo miró confundida y con el corazón latiendo con fuerza.
El libro en sus manos parecía pesado, como si no contuviera no sólo palabras, sino también los sueños y anhelos de su hermana.
"UN ALMA EN DOS MUNDOS"
Era el título que brillaba en la portada.
— ¿Qué significa ésto? —preguntó Noemí, su voz apenas un susurro.
El médico sonrió con tristeza y le explicó:
— Ana quería que lo leyeras. Éste libro es especial para ella, contiene todo lo que escribió a lo largo de los años.
Noemí se sentó en la cama, sosteniendo el libro entre sus manos temblorosas.
Con cuidado abrió la tapa y comenzó a leer.
Las palabras de Ana danzaban ante sus ojos, llenas de vida y emoción.
Cada relato hablaba de momentos significativos: su infancia juntas, las travesuras compartidas, los secretos que sólo ellas conocían.
Noemí sonrió entre lágrimas mientras revivía esos recuerdos tan vívidos.
Finalmente llegó a la penúltima página.
Su corazón se detuvo al ver la escritura a pulso de su hermana.
Querida Noemí;
Si estás leyendo ésto, significa que he partido hacia otro mundo.
Pero quiero que sepas que siempre estaré contigo.
Éste libro es una parte de mí, un regalo que espero atesores como un tesoro.
Te pido que termines las historias que comencé, hay tanto que contar, tantas aventuras que vivir.
No llores por mí, celebra la vida como siempre lo hicimos juntas.
Prometo estar a tu lado en cada paso del camino.
Sólo mira hacia dentro, ahí encontrarás mis palabras y mi amor.
Con todo mi amor Ana...
Las lágrimas brotaron de los ojos de Noemí al leer las líneas finales.
Era como si Ana le estuviera hablando directamente.
En la última página, Ana había dejado un espacio en blanco, y Noemí decidió que lo terminaría.
Ana recibió santa sepultura, fue algo que marcaría la vida de Noemí para siempre.