Acorde del Corazón (libro 3. породица)

Cap. 46 Imran

 

Imran Zadar era y había sido un individuo tranquilo y silencioso durante toda su vida. Aunque sus padres eran Croatas, él había nacido en territorio inglés, pero por algún motivo que le llevó algún tiempo entender, sus compañeros de clase siempre lo vieron como el extranjero, de manera que esto, unido a su poca inclinación a socializar, lo hicieron un sujeto silencioso y solitario. Él era el menor de sus hermanos y para los efectos, el único varón, porque su hermano mayor había muerto en el conflicto bélico en el que su país se vio inmerso y que obligó a su padre a tomar la decisión de emigrar. Aunque Samir, el hijo de su hermana, tenía casi la misma edad que él, eran muy diferentes, porque mientras Samir era inquieto y hablador, Imran no, y al menos durante sus primeros años de vida no se sintió especialmente unido a su sobrino, y sus únicos amigos eran sus libros, lo que a la larga lo llevaría a estudiar la carrera que había estudiado. La única cosa que parecía no corresponderse con el carácter de Imran y que en un inicio preocupó mucho a sus parientes, fue la inclinación que desarrolló a un género musical que ellos veían con mucho recelo, el metal. Sin embargo, sería justamente esto lo que cambiaría la vida de los Zadar a raíz del enorme éxito que había tenido Zora.

Después de superada la desastrosa relación que había mantenido con Sally, la chica por la que había perdido la cabeza el juicioso Imran, podía decirse que no tenía motivos de preocupación, pues su madre había evolucionado bien después de la operación a la que fue sometida; ahora y gracias a sus altos ingresos, Imran se había responsabilizado por la colegiatura de Samir; había aportado una importante suma para que su cuñado ampliase su taller; y finalmente había convencido a su padre para que dejase de trabajar, de manera que todo había estado marchando bien en su vida hasta el día de la inauguración de la librería de Maggi.

Maggi Wells era su mejor amiga, su paño de lágrimas, su agenda y un largo etcétera, así que cuando Dèjan les hizo sus regalos de graduación a todos, y Maggi comenzó a trabajar en la preparación de lo que sería su librería, él se sintió perdido y estaba seguro de que sin Maggi su vida se volvería caótica como en efecto sería, y como esto sucedió en forma casi paralela a su relación con Sally, por esa época Imran había olvidado desde los cumpleaños de sus amigos hasta las citas importantes a las que muchas veces llegó con retraso, pero lo más desesperante era que no tenía con quién hablar cuando discutía con Sally, pues, aunque sus amigos no lo decían, él sabía que no la soportaban así que no iba a ir a hablarles de ella sabiendo lo anterior, y en esas oportunidades, que fueron muchas, era cuando más extrañaba a Maggi. No era que ella quisiese más Sally de lo que la querían los chicos, y la mayor parte del tiempo, al menos antes de que su relación se formalizase, Maggi lo que hacía báscamente era despotricar en contra de Sally, pero después de sacudirlo por su necedad, siempre tenía alguna palabra de consuelo. No obstante, cuando se sucedió la ruptura con Sally, Imran creyó que iba a enloquecer, porque ante los chicos se mostraba tranquilo y controlado, pero cuando estaba a solas quería morir; sin embargo, cuando Maggi se enteró de lo sucedido, corrió a su lado y de nuevo lo mantuvo a flote hasta que él recuperó la cordura.

Durante esos terrible días, Maggi volvió a ocuparse de su agenda, de que comiese, durmiese, y se alejase del alcohol, pero cuando todo volvió a la normalidad, ella comenzó a alejarse de nuevo y él no lo entendió, pensando incluso que podía haber hecho algo para molestarla, pero cuando se lo comentó a Kerim, éste se había limitado a mirarlo con algo que a Imran le pareció muy cercano a la conmiseración, algo que entendió menos aún y no le aclaró nada.

La gira internacional los había absorbido a todos, y, aunque él seguía echándola de menos, tenía que contentarse con hablar eventualmente por teléfono con ella. John los había acompañado en casi toda la gira, pero como tenía otros compromisos, en ocasiones desaparecía por dos o tres días, y después de una de esas desapariciones, cuando regresó dijo algo que alteraría mucho a Imran.

  • ¿Viste a Maggi o no estaba en Londres? – le había preguntado Dàmir
  • La vi, y creo que nuestra Maggi está enamorada

Todos los chicos, incluido Edvin que habitualmente no se enteraba de nada, y Giuliana que sí estaba bien enterada de casi todo, miraron a Imran, aunque él no notó esto por estar mirando a su vez a John con expresión de horror. Como todos sabían que Maggi había estado enamorda de Imran desde el primer día de universidad, y estaban seguros que John lo sabía también, al menos en los casos de Dàmir y de Kerim pensaron que aquel necio iba a decir la clase barbaridad habitual en él, con relación al amor de su hermana por Imran, pero en realidad todos terminarían tan sorprendidos y casi tan horrorizados como Imran.

  • Suponiendo que fuese así, no es problema tuyo, John – le dijo Kerim en un intento por frenar lo que se había imaginado podía decir
  • Mío no, pero tal vez sí de nuestro príncipe – dijo mirando a Dàmir, lo que solo los confundió más – Y de hecho hasta es posible que se enfade mucho
  • John, todos hemos aceptado que no estás bien de la cabeza, aunque te apreciamos lo mismo – dijo Dàmir – pero eso no hace que te entendamos, así que por lo menos ten la amabilidad de explicar por qué razón yo habría de sentirme enfadado con Maggi
  • Porque desde hace un tiempo me estoy planteando que nuestra Maggi, se ha fijado en el sujeto equivocado




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.